Royal acusa a Sarzoky de querer "reescribir la historia" de Francia
La socialista re¨²ne a 60.000 personas en Par¨ªs en v¨ªsperas de un decisivo debate televisivo
La candidata socialista a la presidencia francesa, S¨¦gol¨¨ne Royal, acus¨® ayer a Nicolas Sarkozy de "querer reescribir la historia" y de "maquillar su balance de Gobierno". Ante el crucial debate televisado que enfrentar¨¢ hoy a los dos aspirantes, Royal se dio un ba?o de masas ante 60.000 seguidores en el estadio Charl¨¦ty, en Par¨ªs, atac¨® con dureza a su rival y se declar¨® heredera de los valores patri¨®ticos, que no son otros que la herencia de la revoluci¨®n francesa.
Vestida con uno de sus cl¨¢sicos trajes de chaqueta blancos, adornado con una blusa roja, Royal atraves¨® el campo de juego del estadio entre una multitud. Ya en el escenario, dijo: "Os saludo, pueblo de Francia, pueblo libre, pueblo orgulloso, pueblo insumiso. (...) He recibido muchos golpes durante esta campa?a, pero tambi¨¦n he recibido tanta felicidad compartida, como la que me llega esta tarde, que todo lo dem¨¢s pronto se olvida".
Rebati¨® con humor no exento de provocaci¨®n la tesis de Sarkozy de que los problemas de Francia provienen de la revoluci¨®n de Mayo del 68, que los socialistas encarnan. "?Qu¨¦ mosca le ha picado con lo de Mayo del 68?", pregunt¨®. "Esto sucedi¨® hace 40 a?os, y el domingo todo parec¨ªa muy calmado en torno a Bercy [el estadio parisiense donde Sarkozy celebr¨® su mitin], pero escuch¨¢ndole daba la impresi¨®n de que estaba rodeado por barricadas, con los polic¨ªas antidisturbios faj¨¢ndose contra los manifestantes".
Para Royal era importante medir sus fuerzas ante el crucial debate de hoy con Sarkozy. El candidato de la derecha hab¨ªa conseguido reunir el domingo m¨¢s de 30.000 personas en Bercy. Royal, que en un primer momento tambi¨¦n hab¨ªa escogido el inmenso pabell¨®n al borde del Sena, decidi¨® en el ¨²ltimo momento celebrar el ¨²ltimo mitin en Par¨ªs de su campa?a en un estadio descubierto, el de Charl¨¦ty, al sur de la capital, con capacidad para 45.000 espectadores, sin contar el terreno de juego.
Hay que reconocer que la oferta era tentadora para los parisinos. En un d¨ªa festivo, con un tiempo casi veraniego, y un concierto gratuito de una serie de nombres muy populares en Francia y que apoyan su candidatura, el lleno estaba asegurado.
A diferencia de los de su rival -que mantiene una tensi¨®n constante-, los discursos de Royal van de menos a m¨¢s, est¨¢n construidos en espiral. Arranca con referencias a su infancia, a los valores republicanos que han permitido que una chica como ella haya llegado hasta donde se encuentra. Sigue con una serie de relatos extra¨ªdos de su campa?a participativa, que utiliza como ejemplo de los contenidos de su programa.
"Yo no har¨¦ discriminaci¨®n entre los que se levantan pronto y los otros", dijo en referencia a uno de los mantras m¨¢s repetidos por Sarkozy durante la campa?a. "Porque s¨¦ que hay quienes se levantan tarde porque trabajan por la noche, como estas enfermeras a las que visit¨¦ el otro d¨ªa y que me contaron lo duro de su trabajo". Denunci¨® "el riesgo de la brutalidad en la gesti¨®n de los asuntos p¨²blicos, un peligro que est¨¢ inserto en el programa del candidato de la derecha", y critic¨® a "¨¦sos que filosofan sobre el valor del trabajo pero no han visto a los obreros desesperados frente a las puertas de las empresas que acaban de cerrar".
"Fran?ois Mauriac no es Bernard Tapie
[el empresario arruinado que apoya al candidato de la derecha] y el se?or Sarkozy no es el general De Gaulle", dijo Royal como parte de una comparaci¨®n entre la derecha gaullista y la que representa ahora la Uni¨®n por un Movimiento Popular (UMP). "El candidato de la derecha se sit¨²a a otra altura que el general De Gaulle", a?adi¨® con mucha iron¨ªa. "Hay que conservar la calma, la sangre fr¨ªa, hay que reformar Francia antes de que se subleve".
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