Montilla destituye al delegado de la Generalitat en Madrid por tratar de enfermo a Maragall
El presidente catal¨¢n fuerza la dimisi¨®n de uno de sus m¨¢s estrechos colaboradores
Las disculpas no bastaron. El presidente de la Generalitat, Jos¨¦ Montilla, forz¨® ayer la dimisi¨®n del delegado del Gobierno catal¨¢n en Madrid, Raimon Mart¨ªnez Fraile, quien el lunes se refiri¨® a Pasqual Maragall como una persona "enferma" tanto "f¨ªsica como mentalmente" por sus cr¨ªticas al proceso de reforma del Estatuto catal¨¢n. Mart¨ªnez Fraile dimiti¨® despu¨¦s de que se lo pidiera expresamente el presidente de la Generalitat. Montilla se queda sin su hombre de m¨¢xima confianza en Madrid en el momento en que el Estatuto catal¨¢n comienza su andadura en el Tribunal Constitucional.
Una nota de s¨®lo dos l¨ªneas confirmaba ayer a mediod¨ªa el cese de Mart¨ªnez Fraile, seg¨²n la versi¨®n oficial, efectuado "a petici¨®n propia" y despu¨¦s de hab¨¦rsele agradecido "los servicios prestados". Pero el propio Gobierno, en conferencia de prensa, corrigi¨® la nota al asegurar que el propio Montilla le pidi¨® a Mart¨ªnez Fraile que dimitiera.
Y es que el presidente de la Generalitat no consider¨® suficiente la rectificaci¨®n de su embajador en Madrid despu¨¦s de las pol¨¦micas declaraciones que hizo en R¨¤dio 4, de RNE. Mart¨ªnez Fraile dijo el lunes en esta emisora que el ex presidente se encontraba en una "situaci¨®n no muy adecuada f¨ªsica y psicol¨®gicamente". "Est¨¢ un poco enfermo en estos momentos", coment¨® en referencia a las palabras de Maragall en las que aseguraba que el proceso de reforma del Estatuto "no ha valido la pena". Con estas palabras, seg¨²n fuentes del Gobierno catal¨¢n, el delegado, no s¨®lo falt¨® al respeto del ex presidente, sino que tambi¨¦n incumpli¨® las precisas instrucciones de Montilla de poner sordina a las palabras de Maragall.
El presidente del Gobierno catal¨¢n, m¨¢s acostumbrado a lidiar con los excesos verbales de algunos de sus socios de Gobierno que con las de sus correligionarios, no tuvo m¨¢s remedio que aplicar a alguien de su propio partido su pol¨ªtica de mano dura. Por este motivo, y seg¨²n fuentes del Ejecutivo, el presidente de la Generalitat le pidi¨® ya el lunes a Mart¨ªnez Fraile una disculpa p¨²blica y que anunciara su dimisi¨®n. Si lo segundo no se produjo el mismo lunes fue, seg¨²n las mismas fuentes, porque el delegado del Gobierno pidi¨® 24 horas de margen para tener tiempo de explicar lo sucedido a sus allegados y colaboradores.
No existi¨® tal periodo de gracia. A primera hora de la ma?ana de ayer, el Gobierno catal¨¢n hac¨ªa p¨²blica la dimisi¨®n de Mart¨ªnez Fraile e intentaba cerrar as¨ª una crisis paralela a la abierta por Pasqual Maragall hace menos de dos semanas. El golpe de autoridad de Montilla se convirti¨® tambi¨¦n en una clara advertencia para sus socios de Esquerra Republicana e Iniciativa per Catalunya: no se tolerar¨¢n excesos o devaneos que puedan recordar a la accidentada presidencia de Pasqual Maragall.
Fue el consejero de Agricultura, el socialista Joaquim Llena, ayer en funciones de portavoz del Gobierno, quien tuvo que dar cuenta del desenlace. Contradiciendo la nota oficial que ¨¦l mismo acababa de leer, Llena admiti¨® que la dimisi¨®n fue forzada por Montilla. "Le pidi¨® que dimitiera en la misma conversaci¨®n en la que le exigi¨® que se disculpara", dijo Llena.
Sea como sea, el presidente de la Generalitat ha tenido que prescindir de uno de sus hombres de m¨¢xima confianza, a quien situ¨® en la Delegaci¨®n de la Generalitat en Madrid con un encargo de alto calado pol¨ªtico: mejorar las relaciones del Gobierno catal¨¢n con el Ejecutivo central tras la tensa negociaci¨®n del Estatuto. Desde su nombramiento, el pasado noviembre, Mart¨ªnez Fraile hab¨ªa tenido una intensa actividad institucional centrada en tender puentes y tejer nuevas complicidades con el Gobierno central. Mart¨ªnez Fraile tambi¨¦n estaba teniendo un activo papel en la defensa del Estatuto catal¨¢n, sobre el que pesan siete recursos de inconstitucionalidad y que el Tribunal Constitucional abordar¨¢ en los pr¨®ximos meses.
Algunas fuentes apuntaban ayer que el mismo Pasqual Maragall presion¨® para lograr el fulminante cese de Mart¨ªnez Fraile. El propio jefe de la oposici¨®n, Artur Mas, lleg¨® a apuntarlo y Presidencia lo neg¨®. En la l¨ªnea del Gobierno, fuentes pr¨®ximas al ex presidente recordaron que Maragall tiene escasa ascendencia sobre Montilla, con quien no se ha reunido desde el pasado febrero, cuando precisamente le anunci¨® que pensaba abandonar la presidencia del PSC un a?o antes de lo previsto.
La "muerte" del maragallismo
El episodio de la dimisi¨®n de Mart¨ªnez Fraile no dur¨® ni 24 horas, pero proporcion¨® abundante combustible a la oposici¨®n. Desde Converg¨¨ncia i Uni¨®, Artur Mas afirm¨® que las palabras de Mart¨ªnez Fraile son la muestra de que "el maragallismo ha muerto". Aunque hace apenas dos a?os Artur Mas lleg¨® a pedir "un bozal" para Pasqual Maragall, ayer atribu¨ªa el conjunto de la crisis a que el relevo del ya ex presidente "no se hizo de forma correcta".
Desde el Partido Popular, su portavoz en el Congreso, Eduardo Zaplana, calific¨® de "correct¨ªsima" la actuaci¨®n del presidente de la Generalitat. "Por una vez y sin que sirva de precedente, coincido con Montilla", coment¨®. Tambi¨¦n coincidi¨® con el socialista Diego L¨®pez Garrido, quien record¨® que las palabras de Fraile sobre Maragall "no son adecuadas".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.