La ronda, 60 a?os despu¨¦s
El anillo dise?ado en 1946 sigue sin cerrarse y transcurre por avenidas que afectan al futuro de Valencia
A pesar de estar dise?ada desde hace m¨¢s de 60 a?os, en el Plan General de 1946, la ronda que rodea los barrios de Valencia sigue sin cerrarse. El objetivo es unir la periferia y descongestionar el tr¨¢fico. Sin embargo, los expertos vaticinan que puede suponer una frontera al crecimiento de la ciudad. "Hoy se culmina el cierre del anillo", proclam¨® el pasado martes la alcaldesa de Valencia, Rita Barber¨¢. Mostr¨® su satisfacci¨®n despu¨¦s de la inauguraci¨®n del tramo de la CV-30 que une Ciudad Fallera y Benim¨¤met. La ronda dista mucho de ser una v¨ªa circular para el coche. Sus tramos no est¨¢n conectados -falta el puente de Caltrava y la avenida de Catalu?a- y otros forman parte de los viales convencionales de la ciudad, como la calle de Serrer¨ªa o la avenida de los Naranjos.
La ronda incluye la avenida de Tarongers, una zona consolidada del campus universitario que utilizan diariamente 55.000 estudiantes
"No se puede acabar la ciudad con una ronda. ?Qu¨¦ hacemos hacia el exterior y c¨®mo planteamos el interior", analiza el profesor de Econom¨ªa Urbana Josep Sorribes. El presidente del Consell, Francisco Camps, la alcaldesa de Valencia, Rita Barber¨¢, y el consejero de Infraestructuras, Jos¨¦ Ram¨®n Garc¨ªa Ant¨®n, posaban orgullosos, el pasado martes, en uno de los pasos elevados sobre la CV-30. A la vista, los terrenos de huerta sobrevivientes a la v¨ªa. Los ¨²ltimos tramos construidos de la circunvalaci¨®n, por el norte y por el sur, junto al cementerio, atraviesan lo que hace d¨¦cadas formaba parte de las afueras verdes de Valencia.
Los c¨¢lculos de la Generalitat auguran un ahorro y distribuci¨®n eficaz del tr¨¢fico -90.000 coches de los que acced¨ªan por la pista de Ademuz acudir¨¢n a diario a la ciudad por el nuevo acceso de la CV-30-, sin embargo, Sorribes, que fue miembro del gabinete del ex alcalde socialista Ricard P¨¦rez Casado, no lo tiene tan claro: "Est¨¢ demostrado que m¨¢s viales pueden significar una multiplicaci¨®n del tr¨¢fico y, por tanto, el colapso".
- Norte. La avenida de Primado Reig, desde la plaza de Don Bosco a la avenida de Catalu?a, era la ¨²nica alternativa para acceder a la ciudad por el norte hasta que fue creado el Bulevar Perif¨¦rico Norte. Este tramo facilita el acceso al barrio de Orriols por la rotonda de la avenida de la Horchata. La desconexi¨®n con la avenida de Catalu?a evidencia la falta de concreci¨®n del proyecto. Las obras para el soterramiento de esta v¨ªa, a cargo del Ministerio de Fomento, impiden la continuidad con el resto de la ronda.
- Este. Una de las cr¨ªticas que recibe el anillo es que utiliza v¨ªas que ya son urbanas. Es el caso de la avenida de Tarongers. Esta v¨ªa atraviesa el campus universitario en direcci¨®n al puerto y supone una alternativa a Blasco Ib¨¢?ez para alcanzar la costa por el frente derecho de la ciudad. 55.000 estudiantes del campus del Polit¨¦cnico y de Tarongers utilizan a diario el bulevar pensado para acceder a las facultades. Los problemas de aparcamiento y congesti¨®n del tr¨¢fico ya se producen en esta v¨ªa. El vicerrector de Infraestructuras de la Universitat, Aurelio Beltr¨¢n, ya solicit¨® al Ayuntamiento que propusiera una alternativa para sacar a los campus de la circunvalaci¨®n. El final de esta avenida supone un frenazo a la ronda. Adem¨¢s de los m¨²ltiples sem¨¢foros, el conductor se enfrenta a la calle de Serrer¨ªa, con una apariencia absolutamente diferente que resta uniformidad a una v¨ªa que, en teor¨ªa es la misma. La zona este de la ronda contin¨²a por Menorca hasta la Ciudad de las Artes y las Ciencias, donde sufre otro par¨®n.
- Sur. El conductor ajeno a la ciudad, habitual en las zonas cercanas al puerto, busca en el mapa de Valencia el puente del Grau, que aparece en los mapas tur¨ªsticos como la mejor alternativa para atravesar el complejo dise?ado por el arquitecto Santiago Calatrava. Sin embargo, es un puente fantasma. La demora de las obras por las variaciones presupuestarias en el proyecto, confunden a los turismos. "Pregunten a la Generalitat", acusa la alcaldesa cuando es interrogada por el estado de las obras. El puente junto a la futura ?gora que debe complementar el museo Pr¨ªncipe Felipe, tiene como fecha de finalizaci¨®n la segunda mitad de 2007. Hasta entonces la ronda queda partida. Al otro lado del antiguo cauce del r¨ªo Turia, prosigue la ronda por la calle del actor Antonio Ferrandis. Este tramo es una verdadera v¨ªa r¨¢pida, con rotondas que permiten atravesar la ciudad hacia el oeste con fluidez. Los PAI pendientes en la zona pueden convertir esta avenida en una c¨¦ntrica calle en pocos a?os. Ahora cruza con la principal salida a las playas de El Saler y l'Albufera.
- Oeste. El lado izquierdo de la ronda es el m¨¢s delicado. Enlaza Valencia con la A3, que sufre atascos kilom¨¦tricos casi a diario. La V-30, en el margen del nuevo cauce del Turia, es el principal acceso de camiones al puerto. La potenciaci¨®n comercial mar¨ªtima de la ciudad provoca grandes problemas a esta v¨ªa que repercuten en las poblaciones de L'Horta Sud. Acceder a la ciudad por el oeste es cada vez m¨¢s complicado sin una v¨ªa alternativa. Para algunos urbanistas, la presencia del nuevo cauce tan cerca de la ciudad representa la falta de perspectiva hist¨®rica en el planeamiento urbano de Valencia. "Hay que tener cuidado con establecer una v¨ªa dura como una ronda como l¨ªmite", advierte el profesor Sorribes. "Los sem¨¢foros de la ronda impiden la mejora del tr¨¢fico", a?ade el concejal socialista Mat¨ªas Alonso.
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