Juicio internacional

El Consejo de Seguridad de la ONU ha decidido, con la abstenci¨®n de Rusia y China, constituir un tribunal especial internacional que juzgue a los presuntos responsables del asesinato del ex primer ministro liban¨¦s Rafik Hariri, en febrero de 2005. Es el primer tribunal de este g¨¦nero en Oriente Pr¨®ximo. La decisi¨®n, propiciada sobre todo por Estados Unidos y Francia, es coherente ante la resistencia pol¨ªtica interna y el vac¨ªo judicial existentes en L¨ªbano, aunque comporta el grave peligro de provocar una mayor desestabilizaci¨®n y el incremento de la violencia de las facciones islamistas prosirias. El Gobierno de Damasco, a cuyos servicios secretos culp¨® la investigaci¨®n de la ONU realizada hace dos a?os, ya ha afirmado que no piensa reconocer el tribunal ni colaborar en el proceso.

La Resoluci¨®n 1757, basada en el Cap¨ªtulo VII de la Carta de las Naciones Unidas, que contempla en ¨²ltimo extremo la eventualidad de recurrir a la fuerza en caso de incumplimiento, ha despertado no s¨®lo la fuerte protesta siria, sino tambi¨¦n las reservas de rusos y chinos y de otros cinco pa¨ªses miembros del Consejo de Seguridad, por considerarla como una injerencia en la soberan¨ªa de L¨ªbano. Esta posici¨®n resulta relativamente d¨¦bil, habida cuenta del actual limbo pol¨ªtico y jur¨ªdico que vive el pa¨ªs de los cedros.

La divisi¨®n pol¨ªtica y la par¨¢lisis sobre el magnicidio son absolutas desde que se conocieron en octubre de 2005 las conclusiones de la investigaci¨®n de la ONU realizada por el fiscal alem¨¢n Detlev Mehlis. El suceso precipit¨® la retirada militar de Siria tras d¨¦cadas de ocupaci¨®n del pa¨ªs vecino, aunque significativamente Damasco sigue sin creer necesario abrir Embajada en Beirut, por considerarlo su patio trasero. Mehlis sostuvo que el asesinato no pudo producirse sin la complicidad directa de los m¨¢s altos cargos de la seguridad siria y m¨¢ximos responsables libaneses ligados al presidente Emile Lahoud. ?ste, a diferencia del primer ministro, Fuad Siniora, se neg¨® a reconocer las conclusiones del informe, al igual que el presidente del Parlamento, el l¨ªder chi¨ª Nabih Berri.

Desde entonces no ha habido ning¨²n gesto de las autoridades libanesas para colaborar en la persecuci¨®n y enjuiciamiento de los culpables de la muerte de Hariri, sino todo lo contrario: los actuales sucesos en L¨ªbano parecen responder a acciones de los servicios secretos sirios. No resultar¨¢ nada f¨¢cil el enjuiciamiento de los autores del crimen, pero hoy por hoy el esclarecimiento s¨®lo puede venir a trav¨¦s de la labor de un tribunal internacional independiente.