Fannie Lee Chaney, 'madre coraje'
El asesinato de su hijo James Chaney por el Ku Klux Klan en 1964 inspir¨® la 'marcha de Selma'
La pel¨ªcula Arde Misisipi, de Alan Parker, se encarg¨® en 1998 de inmortalizar para la historia del cine un caso que, quiz¨¢ por su gran dramatismo, impulsar¨ªa decisivamente el movimiento por los derechos civiles en Estados Unidos. James Chaney, hijo de Fannie Lee Chaney, desapareci¨® el 21 de junio de 1964 junto a dos activistas blancos con los que recorr¨ªa el Estado de Misisipi tratando de inscribir a los negros en el censo electoral. "Probablemente pueda hacer algo por m¨ª y adem¨¢s ayudar a otros", le dijo James a su madre antes de partir. Casi dos meses m¨¢s tarde, los tres cuerpos de los activistas aparec¨ªan en una ciudad cercana a Filadelfia cosidos a balazos. Adem¨¢s, el de Chaney hab¨ªa recibido tal paliza que apenas era reconocible.
Pese al racismo imperante en la ¨¦poca, el caso no pudo pasar impune. "Si hubieran matado s¨®lo a mi hijo nadie habr¨ªa hecho nada. Pero han matado a dos blancos y mi hijo estaba con ellos, as¨ª que hubo que hacer algo", asegur¨® Fannie Chaney tras un juicio que llev¨® a la c¨¢rcel a siete miembros del Ku Klux Klan un a?o despu¨¦s del brutal crimen. No obstante, ninguno fue declarado culpable de asesinato sino de violar las leyes federales sobre derechos civiles y apenas cumplieron seis a?os de c¨¢rcel.
Sin embargo, en 2005, Fannie Lee Chaney obtuvo su revancha durante el proceso contra un octavo sospechoso, Edgar Ray Killen, que durante el primer juicio hab¨ªa quedado en libertad. La anciana fue la ¨²ltima en testificar en un emotivo pleito que volvi¨® a despertar los fantasmas del pasado.
Subi¨® Fannie al estrado ayudada de un bast¨®n y all¨ª rememor¨®, casi entre l¨¢grimas, c¨®mo vio partir a su hijo mientras su hermano peque?o Ben lloraba porque quer¨ªa ir con ¨¦l. Ella no se lo permiti¨®, lo que probablemente le salv¨® la vida. "Nunca m¨¢s volv¨ª a ver a James", dijo.
El Estado de Misisipi declar¨® a Killen inocente de asesinato pero le conden¨® a 60 a?os de c¨¢rcel por homicidio sin premeditaci¨®n. "Se ha tardado mucho tiempo pero se ha hecho justicia", dijo Chaney tras la sentencia.
Pero aqu¨¦l no hab¨ªa sido su primer encuentro con la cara m¨¢s oscura del racismo. Fannie Lee Chaney, que hab¨ªa nacido en Meridian, Misisipi, tambi¨¦n fue testigo de la muerte de su abuelo, quien tras negarse a venderle sus tierras a un potentado de raza blanca, desapareci¨® sin dejar rastro. Meses despu¨¦s la familia encontr¨® sus zapatos, su camiseta y un reloj en los alrededores del pueblo.
Tras la desaparici¨®n de su hijo James, Fannie Lee tambi¨¦n fue objeto de ataques racistas. Su casa fue bombardeada primero con huevos, despu¨¦s a tiros y finalmente alguien trat¨® de dinamitarla pero los asaltantes se equivocaron de vivienda y pusieron una bomba casera en la residencia de un vecino.
Fue el momento en que Fannie Lee Chaney decidi¨® irse de Meridian. Hab¨ªa denunciado a cinco restaurantes por racismo y hab¨ªa perdido su puesto de trabajo como panadera. Nadie la quer¨ªa contratar, as¨ª que decidi¨® mudarse a Nueva York. Su vida no fue f¨¢cil. Su marido la hab¨ªa abandonado a?os antes y ella a¨²n cargaba con cuatro hijos.
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