Pasaporte para la horca
El Museo del Holocausto de Buenos Aires localiza el documento falso de Adolf Eichmann que permiti¨® su captura y traslado a Israel
Se trata s¨®lo de una vieja cartilla dividida en cuatro secciones expedida por la Cruz Roja en 1950. En un lado y escrito a mano figuran los datos de Riccardo Klement, un mec¨¢nico ap¨¢trida nacido en Bolzano (Italia) que hab¨ªa decidido iniciar una nueva vida en Argentina. En el reverso aparece una ajada foto de un hombre con gafas, pajarita y apariencia apacible. Alguien banal, como lo calificar¨ªa a?os despu¨¦s la fil¨®sofa Hannah Arendt, pero s¨®lo en la superficie.
El rostro corresponde a Adolf Eichmann, uno de los arquitectos y ejecutores del exterminio jud¨ªo durante la Segunda Guerra Mundial al que los nazis denominaron eufem¨ªsticamente la soluci¨®n final. El documento es el pasaporte con el que Eichmann huy¨® de Europa ayudado por una red dedicada a poner a salvo a criminales nazis. Por casualidad ha sido hallado en el archivo de un tribunal porte?o y ahora ser¨¢ exhibido por el Museo del Holocausto de Buenos Aires. "Un museo que aporta como algo ¨²nico no s¨®lo testimonios del Holocausto, sino tambi¨¦n de la vivencia del nazismo en Argentina", explica Mario Feferbaum, presidente de la instituci¨®n.
El 'cazanazis' Sim¨®n Wiesenthal puso sobre la pista al Mossad, que secuestr¨® al criminal
Porque la historia de Eichmann -organizador de la conferencia secreta de Wansee, donde en 1942 se decidi¨® el Holocausto, y alumno aplicado de Ernst Kaltenbrunner, ajusticiado en N¨²remberg, y de Reinhard Heydrich, el Carnicero de Praga- representa no s¨®lo el horror de un proceso de asesinato industrial que llev¨® a la muerte a seis millones de jud¨ªos, sino tambi¨¦n las complicidades a ambos lados del Atl¨¢ntico que permitieron la huida y una vida tranquila a cientos de nazis acusados de cr¨ªmenes contra la humanidad.
El investigador ?lvaro Ab¨®s relata c¨®mo en las cervecer¨ªas del barrio porte?o de Belgrano, en los a?os posteriores al hundimiento del r¨¦gimen de Hitler, destacadas figuras nazis celebraban abiertamente el cumplea?os del f¨¹hrer o la invasi¨®n de Polonia. Algunos como Joseph Mengele, el ?ngel de la Muerte, de Auschwitz, incluso abandonaron sus nombres falsos y obtuvieron documentos oficiales con su verdadera identidad. Parad¨®jicamente, al mismo tiempo, miles de jud¨ªos que hu¨ªan de las ruinas de Europa ten¨ªan que entrar en Argentina de forma clandestina por el norte del pa¨ªs. "Los jud¨ªos no gozaron de la hospitalidad que tuvieron los nazis en Argentina", apunta Sergio Widder, del Centro Simon Wiesenthal.
Eichmann, un hombre gris aunque absolutamente efectivo en las filas de las SS, decidi¨® no salir a la luz. "Opt¨® por la pobreza para pasar inadvertido", se?ala Ab¨®s. Tras un paso por Tucum¨¢n, en el norte del pa¨ªs, el hombre que se encarg¨® personalmente de organizar el traslado en tren de millones de personas hacia la muerte, se instal¨® en la localidad bonaerense de San Fernando con su mujer y sus hijos y trabaj¨® como obrero en una f¨¢brica de autom¨®viles, siempre como el se?or Klement, como rezaba su pasaporte.
Pero si bien al otro lado del Atl¨¢ntico los miembros de la ruta de las ratas le hab¨ªan ayudado a escapar, tambi¨¦n hab¨ªa personas decididas a encontrarlo. Uno era Sim¨®n Wiesenthal, superviviente de 12 campos de concentraci¨®n en donde perecieron 89 miembros de su familia. Durante a?os, Wiesenthal acumul¨® una voluminosa carpeta de informaci¨®n sobre Eichmann.
Por una casualidad -un hijo de Eichmann se jactaba ante una novia de las haza?as de su padre aunque aseguraba que hab¨ªa muerto y el hombre que habitaba ahora en su casa era su padrastro-, Wiesenthal puso al Mossad sobre la pista y ¨¦ste, tras recibir otra informaci¨®n desde Alemania, organiz¨® por orden del primer ministro y padre de la independencia israel¨ª, David Ben Guri¨®n, secuestrar al criminal nazi y llevarlo a Israel para juzgarlo. El 11 de mayo de 1960 un grupo coordinado por Isser Harel secuestr¨® a Eichmann cuando volv¨ªa del trabajo. Diez d¨ªas despu¨¦s lo llev¨® a Israel drogado y disfrazado de piloto. Ben Guri¨®n dio la noticia al mundo.
En Argentina, donde se produjeron diversos episodios antisemitas, el mismo presidente Arturo Frondizi (1958-1962) acus¨® a Israel de violar su soberan¨ªa nacional. "Pero no hab¨ªa ese sentimiento de violaci¨®n por el hecho de que un criminal nazi hubiera entrado en el pa¨ªs con un nombre falso", se?ala Feferbaum. La mujer de Eichmann, Vera, pidi¨® ayuda al Gobierno argentino y entreg¨® a la polic¨ªa el pasaporte que hab¨ªa utilizado su marido para entrar en Argentina.
Eichmann fue ahorcado en Jerusal¨¦n el 30 de mayo de 1962 y el pasaporte qued¨® traspapelado en el Juzgado Criminal Federal n¨²mero 1 de Buenos Aires hasta que este a?o un estudiante de la Universidad San Mart¨ªn pidi¨® el archivo de la denuncia para una tesis.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.