Aquel 15 de junio

Se acercaba la muerte de Franco. Y hab¨ªa que estar preparados. Las distintas opciones pol¨ªticas, las hist¨®ricas y las de reciente creaci¨®n, se preparaban para cuando tuviese lugar el evento. Un grupo de liberales, algunos de los cuales hab¨ªamos coincidido en el diario Madrid, pensamos en la conveniencia de poner en marcha una opci¨®n pol¨ªtica liberal con la que poder participar en el r¨¦gimen democr¨¢tico en el que sin duda iba a desembocar la dictadura. Y pensamos que quien mejor pod¨ªa liderar ese grupo pol¨ªtico no era otro que Joaqu¨ªn Garrigues. En mi casa de Madrid tuvimos alguna cena con el fin de ir madurando el proyecto. Hab¨ªa, pues, que crear el partido pol¨ªtico. Se habl¨®, en principio, de un Partido Liberal Espa?ol. Fuimos Ximo Mu?oz Peirats y yo, por el Pa¨ªs Valenciano, junto con otros liberales pertenecientes a distintas ¨¢reas regionales -Canarias, Andaluc¨ªa, Galicia, Navarra...- quienes convencimos a Garrigues de que, en lugar de un partido ¨²nico de ¨¢mbito estatal, fuesen los distintos territorios quienes fundasen su partido regional y que todos juntos se integraran en una Federaci¨®n de Partidos Dem¨®cratas y Liberales. As¨ª se aprob¨® y se hizo. Y as¨ª naci¨® el Partit Dem¨®crata Liberal del Pa¨ªs Valenci¨¤ (PDLPV). Nuestra intenci¨®n, al fundarlo, no era otra que tener una opci¨®n pol¨ªtica liberal valenciana para cuando llegase el momento de las primeras elecciones. El PDLPV, integrado en la Federaci¨®n de Partidos Dem¨®cratas y Liberales, form¨® parte de las listas de la coalici¨®n de UCD (Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico). Y en aquellos comicios del 15 de junio de 1977, los liberales elegidos por el Pa¨ªs Valenciano fuimos, por Valencia, Ximo Mu?oz Peirats y yo, como diputados, y Jos¨¦ Antonio Noguera de Roig, como senador. Por Castell¨®n, Enrique Monson¨ªs como diputado y, tambi¨¦n, diputado por Alicante, el doctor Francisco Zaragoza.

A los pocos d¨ªas de celebradas las elecciones, los diputados y senadores de la UCD fuimos convocados a una reuni¨®n en Madrid. Los l¨ªderes de los partidos que formaban la coalici¨®n -Su¨¢rez, Calvo Sotelo, Camu?as, Fern¨¢ndez Ordo?ez, P¨ªo Cabanillas, ?lvarez Miranda, Joaqu¨ªn Garrigues- hab¨ªan decidido convertir UCD en un solo partido. Calvo Sotelo fue el encargado de presentarnos la propuesta a los all¨ª reunidos. Y en caso de estar de acuerdo, pasar¨ªamos a firmar ante un notario que esperaba en un despacho contiguo. Fui el primero en pedir la palabra, apenas termin¨® Calvo Sotelo su intervenci¨®n, para mostrar mi disconformidad y que, en caso de que se llegase a constituir, yo renunciaba a formar parte de ese partido ¨²nico. En mi opini¨®n, UCD era una coalici¨®n tan heterog¨¦nea que, convertida en partido, iba a tener una vida muy corta. Hab¨ªa dem¨®cratas-cristianos, liberales, socialdem¨®cratas... y los llamados azules, la gente que junto con Su¨¢rez y Martin Villa, se integraron a ¨²ltima hora en la coalici¨®n. Porque en contra de lo que se dice, Su¨¢rez no fund¨® la UCD. La Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico fue una idea de los liberales, democristianos y socialdem¨®cratas. Naturalmente, mi propuesta no prosper¨®, UCD se convirti¨® en partido y yo permanec¨ª en el grupo parlamentario hasta que me fue imposible.

Esto ocurri¨® durante el debate de la Constituci¨®n en el Congreso. Se hab¨ªa aprobado, ya, que los territorios que hab¨ªan plebiscitado un Estatuto de Autonom¨ªa durante la Rep¨²blica y les fue anulado con la llegada de Franco al poder -caso de Catalu?a, Galicia y el Pa¨ªs Vasco- podr¨ªan recuperar esa autonom¨ªa por la v¨ªa r¨¢pida del art¨ªculo 151, seg¨²n la Disposici¨®n Transitoria Segunda. Yo present¨¦ una enmienda pidiendo que tambi¨¦n fuese de aplicaci¨®n esta norma a los territorios que hab¨ªan sido despose¨ªdos de sus fueros "por derecho de conquista" como era el caso del Pa¨ªs Valenciano, por obra y gracia del Decreto de Nueva Planta promulgado por Felipe V. Pero los diputados Emilio Attard y Fernando Abril Martorell -?los dos valencianos!- se opusieron. Jos¨¦ Antonio Noguera, senador por el PDLPV, volvi¨® a presentar esa enmienda en la C¨¢mara Alta. Siendo rechazada, tambi¨¦n, por los mismos. Y me pas¨¦ al Grupo Mixto. Yo ped¨ªa que Catalu?a no fuese m¨¢s que el Pa¨ªs Valenciano. Nac¨ªan las llamadas comunidades hist¨®ricas y quer¨ªa que el Pa¨ªs Valenciano figurase entre ellas. Luego propalaron la especie de que yo era un "catalanista", un "valenciano renegado", y otras lindezas por el estilo, haciendo costado a la jaur¨ªa blavera capitalina. ?D¨¦u que els haja perdonat, am¨¦n!

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