"Es la Liga de la uni¨®n"

Tom Cruise y su esposa, Katie Holmes, secundaron a Victoria Beckham, con rostro de funeral. El mundo de Hollywood vivi¨® el partido como una tragedia. Los tres pusieron cara de consternaci¨®n cuando Fabio Capello quit¨® a Beckham, y su gesto se torn¨® m¨¢s l¨ªvido cuando el Bernab¨¦u grit¨® el nombre m¨¢s fuerte de la noche: "?Guuuuutiiii, Guuuuuutiii...!".

Hollywood no entendi¨® nada. La pel¨ªcula termin¨® bien cuando quitaron al h¨¦roe. Media hora m¨¢s tarde, el segundo gol de Reyes anul¨® las represiones. Despu¨¦s de haber soportado una lenta remontada, el Bernab¨¦u estall¨®. Ra¨²l, el capit¨¢n, hombre prudente, reconcentrado, apareci¨® corriendo por la pradera como un ni?o. Fue en direcci¨®n al banquillo y se abraz¨® a Capello. El gesto abri¨® la celebraci¨®n de la Liga n¨²mero 30 del Madrid, posiblemente la m¨¢s sufrida. Tal vez la m¨¢s deseada por el p¨²blico, que con el gol de Reyes se dej¨® llevar por la fiesta.

"He demostrado que dar¨¦ todo por este club hasta que no pueda m¨¢s", proclama Salgado

"He hecho dos goles y espero que me sirvan para quedarme", desea Reyes

La noche se convirti¨® en un homenaje a Beckham y Roberto Carlos, hubo congas, vueltas ol¨ªmpicas y grandes personalidades de la pol¨ªtica y del espect¨¢culo. Cuando el show de luz y color se apag¨®, apareci¨® Ra¨²l con un capote. Su mensaje tuvo gran carga pol¨ªtica: "Hemos perseguido este t¨ªtulo todos juntos. Ha sido un objetivo com¨²n. Antes est¨¢bamos dispersos. No ¨ªbamos todos por el mismo camino. ?sta ha sido la Liga de la uni¨®n, del grupo, de la fe".

Las palabras de la m¨¢xima autoridad en el vestuario fueron sutilmente dirigidas hacia algunos ausentes. Ronaldo, uno de los principales opositores a Ra¨²l, fue el blanco. El brasile?o, vendido al Milan en enero por el empe?o de Capello, es considerado por los veteranos como un elemento perturbador. Alguien que induc¨ªa a la dispersi¨®n, la falta de rigor y la destrucci¨®n de eso que Capello llama "esp¨ªritu".

"Cuando el Mallorca marc¨® el gol, seguimos tranquilos", dijo Ra¨²l; "ten¨ªamos fe porque esto lo hab¨ªamos visto en partidos anteriores y sab¨ªamos que, si segu¨ªamos, acabar¨ªamos por imponernos".

Los jugadores -ya con su nuevo patrocinador, Bwin, en las camisetas- volvieron al campo como pose¨ªdos. Ondearon las banderas. Beckham besaba el c¨¦sped envuelto en la inglesa. Diarra corr¨ªa con una enorme insignia de Mal¨ª. El m¨¢s pintoresco result¨® Cannavaro, conocido como Duce en la pe?a Ultras Sur, que ech¨® mano de una italiana con s¨ªmbolos fascistas. "No me di cuenta", explic¨®.

Reyes, que vivi¨® momentos dif¨ªciles esta temporada en el banquillo, se gan¨® las mayores ovaciones gracias a sus dos goles. Su entrada en la segunda parte result¨® decisiva. Estaba exultante: "La verdad es que en la segunda vuelta no he tenido las oportunidades que quisiera, pero he hecho dos goles y espero que me sirvan para quedarme. Cuando uno sue?a, sue?a con marcar dos goles".

Reyes espera poder abandonar el Arsenal. Quiere que el Madrid ejecute su opci¨®n de compra y supone que los valiosos goles que hizo le ayudar¨¢n. Otro que quiere seguir es Salgado. Habl¨® por los veteranos y por s¨ª mismo. Al igual que la de Helguera o Guti, su continuidad no est¨¢ garantizada. Pero ¨¦l defendi¨® su vigencia de la mano de sus dos hijos, que le acompa?aron en sus bailes: "He demostrado que dar¨¦ todo por este club hasta que no pueda m¨¢s. He sumado nueve t¨ªtulos. Represento la vieja guardia. La que tiene que estar serena y llevarse los mazazos. Tenemos contrato todos y queremos seguir. Ahora, nuestro futuro es problema del club. ?Hombre que si tenemos fuerza!".

El que no debe de tener ni un gramo de energ¨ªa es Cassano. El hombre, que cobrar¨¢ su prima como todos, no se present¨® en el Bernab¨¦u. Capello dijo que estaba lesionado. Tanto que ni pod¨ªa sentarse en la grada.