El traj¨ªn promocional de Avril Lavigne

Conoce el mundo a golpe de hoteles y ruedas de prensa. Avril Lavigne ha cumplido 22 a?os, se cas¨® hace un a?o y un espectacular brillante en su mano derecha da fe del compromiso. La cantante canadiense se ha convertido en una m¨¢quina de vender discos. M¨¢s modosita que cuando irrumpi¨® en el mundo del rock con apenas 17 a?os, Avril Lavigne ha pasado dos d¨ªas en Madrid, envuelta en el traj¨ªn de dar a conocer su nuevo disco, The best damn thing, tercero de su corta y mete¨®rica carrera, del que ya ha vendido tres millones de copias en dos meses.

Lleg¨® a Madrid el domingo casi anocheciendo. Ven¨ªa de Francia, pero todav¨ªa ayer parec¨ªa afectada por el cambio de horario entre continentes. Se enfrent¨® con aspecto somnoliento a su apretada lista de entrevistas, en un lujoso hotel de la capital, apoyada por un s¨¦quito de unas 20 personas. Y en cuanto a declaraciones, poca chicha. Los t¨®picos sobre las bondades de Espa?a, posiblemente como har¨¢ en el pa¨ªs de turno que le toque. Ni siquiera se atreve a detallar c¨®mo consigue el maquillaje siniestro de sus ojos: "Las marcas de cosm¨¦tica podr¨ªan malinterpretarme", afirma. La jornada concluy¨® con un concierto para invitados en el nuevo Circo Price, Hoy tomar¨¢ un avi¨®n en direcci¨®n a otro pa¨ªs de Europa.