El consumo del aceite se recupera de forma lenta

La alerta sanitaria contra el aceite de orujo que, el 3 de julio de 2001, dict¨® Celia Villalobos cuando estaba al frente del Ministerio de Sanidad y Consumo provoc¨® una aut¨¦ntica sacudida para un sector que da empleo a unas 5.000 personas y que realiza una importante labor medioambiental. Y es que, son las empresas extractoras las que asumen las casi tres toneladas de alperujo -el residuo que queda tras la transformaci¨®n de la aceituna en aceite- y que hasta no hace muchos a?os era caldo de cultivo de los vertidos incontrolados a los cauces p¨²blicos.

La sentencia del Tribunal Supremo llega en un momento en el que el sector est¨¢ intentando recuperar lentamente el mercado perdido tras la crisis del benzopireno. Fernando Mu?oz, presidente de ANEO, la patronal que agrupa a 50 f¨¢bricas extractoras de orujo en todo el pa¨ªs, la mayor¨ªa de ellas en Andaluc¨ªa (que concentra el 70% de la producci¨®n nacional, cifrada en unas 100.000 toneladas al a?o), recuerda que las ventas cayeron en torno a un 60%. "Despu¨¦s de seis a?os, hay muchas cadenas de distribuci¨®n que siguen reacias a poner este producto en sus estanter¨ªas", se lamenta Mu?oz.

Los productores se quejan tambi¨¦n del escaso apoyo recibido por el Gobierno en toda esta crisis. Y es que, a pesar de que el Ministerio de Agricultura prometi¨® poco despu¨¦s a los orujeros una l¨ªnea de cr¨¦ditos blandos por valor de 30 millones de euros, las ayudas quedaron bloqueadas porque Bruselas abri¨® expediente por entender que vulneraban la libre competencia.

De este modo, la colaboraci¨®n se limit¨® a las ayudas para el almacenamiento en los dep¨®sitos del Patrimonio Comunal Olivarero de las 30.000 toneladas que no pudieron salir al mercado por superar los ¨ªndices de benzopireno, cifrados en dos microgramos por kilo.

Buena parte de las industrias extractoras de orujo se localizan en la provincia de Ja¨¦n, que acapara el 40% de la producci¨®n nacional. Son peque?as extractoras, como la industria Espuny, en Castellar, que da empleo a 40 personas durante buena parte del a?o.

La producci¨®n de la ¨²ltima campa?a de aceite de orujo se ha situado en torno a las 100.000 toneladas, aunque los empresarios han constatado que la p¨¦rdida mayor del consumo ha afectado a los peque?os consumidores.