"Las momias no me obsesionan"

Con barba, pelo revuelto, pa?uelo al cuello y el rostro marcado por el viento y el sol del desierto, el brit¨¢nico Barry Kemp tiene toda la planta de ser lo que es: egipt¨®logo. Uno de los m¨¢s prestigiosos de su profesi¨®n, Kemp, autor de obras de referencia como El antiguo Egipto, anatom¨ªa de una civilizaci¨®n o la tan deliciosa 100 jerogl¨ªficos (ambas en Cr¨ªtica), es profesor en Cambridge y director de las excavaciones en Amarna, la antigua capital del fara¨®n hereje Akenat¨®n. Es tambi¨¦n protagonista de un reciente reportaje sobre Nefertiti de National Geographic Channel.

Pregunta. Debe haber fiesta entre los egipt¨®logos por el hallazgo de la momia de la reina Hatshepsut. ?Seguro que es ella?

Respuesta. Tanto como es posible. Siempre hay un margen de duda. Pero hay otras famosas identificadas con menos garant¨ªas.

P. No le veo entusiasmado.

R. Las momias no me obsesionan. Siento respeto por ellas y es extraordinario tener otra momia de la realeza. Pero no me provocan una emoci¨®n personal. El estudio general de todas ellas es muy interesante y va a seguir dando sorpresas; eso es lo importante.

P. ?Qu¨¦ fue de Nefertiti?

R. No lo sabemos. Desaparece de la historia. No tenemos datos. Parece que fue sustituida como esposa real por su hija Meritat¨®n. En egiptolog¨ªa hay que tener la mente abierta, pero tambi¨¦n estar dispuestos a reconocer que hay cosas que simplemente desconocemos.

P. Ha estudiado usted el c¨¦lebre busto pintado de la reina.

R. Una pieza misteriosa, ignoramos qu¨¦ significaban todas esas esculturas que el escultor Tutmose almacenaba en su taller en Amarna, qu¨¦ estaban haciendo all¨ª, cu¨¢l era su destino. Parece que eran realmente retratos, algo muy sorprendente. Acaso era un show room, un espacio de exhibici¨®n. En cuanto al busto, ?actuaba Tutmose a las ¨®rdenes directas del rey o era un regalo de alg¨²n noble?

P. ?Seguro que es ella, Nefertiti?

R. Eso s¨ª, por la corona. Tenemos muchas representaciones en que la porta.

P. ?Qu¨¦ le parece que est¨¦ en Berl¨ªn el busto?

R. Es un s¨ªmbolo importante para la ciudad. Pero para los egipcios es uno de los grandes iconos, como la m¨¢scara de oro de Tutankam¨®n.

P. As¨ª pues, ?d¨®nde cree que debe estar?

R. Le dir¨¦ que me parecer¨ªa muy bonito que regresara a Amarna. El Gobierno egipcio est¨¢ construyendo all¨ª un peque?o museo.

P. ?Cree de verdad que Nefertiti va a volver a casa?

R. No en las circunstancias actuales. Alemania podr¨ªa devolver ahora otro material de Amarna, otras esculturas, pero no el busto pintado.

P. ?Aunque los egipcios desentierren el hacha de guerra cient¨ªfica?

R. Zahi Hawass, el responsable de antig¨¹edades, ha lanzado amenazas, pero, si se fija, nadie del Gobierno lo ha secundado.