Imaz y Egibar fijan posiciones ante la asamblea del PNV

Una nueva batalla se est¨¢ incubando en el PNV, con motivo de la asamblea general que ese partido celebrar¨¢ en diciembre y que debe fijar su l¨ªnea pol¨ªtica para los pr¨®ximos cuatro a?os y renovar su direcci¨®n.

Las hostilidades abiertas en 2003 con ocasi¨®n del relevo de su antiguo presidente, Xabier Arzalluz, que enfrentaron por la sucesi¨®n a Josu Jon Imaz y a Joseba Egibar, amenazan con reproducirse.

Los dos actos y los dos discursos protagonizados por ambos el martes, con motivo del 112 aniversario de la fundaci¨®n del partido, evidenciaron de nuevo las diferencias en el seno del PNV, ante cuyo proceso congresual no se sabe todav¨ªa si habr¨¢ ponencia de consenso o documentos y listas alternativas.

Imaz trabaja en la elaboraci¨®n de la ponencia pol¨ªtica, sin que Egibar descubra a¨²n sus cartas.

?ste dej¨® todas las dudas en el aire al se?alar que primero "hay que trazar el camino y despu¨¦s ver qui¨¦n va de patr¨®n". Los discursos no pueden estar m¨¢s alejados, como volvi¨® a verse el martes, en las celebraciones paralelas del aniversario de la fundaci¨®n del partido.

El riesgo alcanzar¨ªa incluso al liderazgo del primero, si cuajan las voces que abogan por un candidato de consenso que, l¨®gicamente, no podr¨ªa ser ninguno de los que participaron en aquella batalla. A esas voces parece que quiso responder Imaz al se?alar que las personas "no deben ni debemos ser obst¨¢culo" para favorecer posiciones integradoras en el partido.

Hay dos interpretaciones contrapuestas de sus palabras, que Imaz no quiso aclarar m¨¢s: la primera ser¨ªa que se trat¨® de una apelaci¨®n a Egibar para que no presente una plancha alternativa; la segunda, que Imaz estar¨ªa sugiriendo su disposici¨®n a dejar el cargo si ello redunda en m¨¢s posibilidades de integraci¨®n para su partido.

Sea cual sea el desenlace, y es pronto para predecirlo, Imaz ha salido a campo abierto el primero, al aclarar en el art¨ªculo publicado hace tres semanas, y revalidar en su discurso del martes, en qu¨¦ terreno est¨¢ dispuesto a jugar, el del acuerdo, y, por eliminaci¨®n, en cu¨¢l otro no se puede contar con ¨¦l, el de la confrontaci¨®n.

Su apuesta es la del pacto con el Estado sobre la base de los principios de no imponer (los nacionalistas dentro del Pa¨ªs Vasco) y no impedir (los dos grandes partidos en las Cortes). ?se es, a su juicio, el ¨²nico camino para alcanzar la normalizaci¨®n: un acuerdo suficiente, que deber¨ªan sellar las fuerzas pol¨ªticas vascas, y no s¨®lo las nacionalistas, y que las Cortes deber¨ªan asumir despu¨¦s, para finalmente someterlo a la consulta ciudadana.

El planteamiento no es nuevo. Est¨¢ recogido en el documento del PNV que fij¨®, en octubre de 2005, las bases de su pol¨ªtica para la pacificaci¨®n y la normalizaci¨®n pol¨ªtica. Imaz lo rescat¨® hace tres semanas en su art¨ªculo y lo quiso reiterar el martes, echando mano en su apoyo de la trayectoria y los discursos de los l¨ªderes hist¨®ricos del PNV, incluidos manifiestos de la ¨¦poca de Arzalluz, anclados en la doctrina y la tradici¨®n m¨¢s pactista del partido.

Arzalluz estuvo el martes, sin embargo, en otro acto: el que sigue celebrando cada a?o en Mutriku, para celebrar la misma efem¨¦rides, Joseba Egibar, pese a que la ejecutiva del PNV traslad¨® a la llegada de Imaz esta conmemoraci¨®n a su sede central.

As¨ª, mientras Imaz se reafirmaba en Bilbao en los principios del documento de 2005 y realizaba llamadas a la unidad, la cohesi¨®n y la lealtad y honestidad en el debate interno, Egibar expres¨® otras preferencias.

El l¨ªder del sector m¨¢s soberanista y rupturista del PNV afirm¨® que Euskadi no alcanzar¨¢ la normalizaci¨®n mientras el Estado no reconozca su derecho a la autodeterminaci¨®n.

Muy alejado del pacto con el Estado defendido por Imaz, Egibar anunci¨® que en los pr¨®ximos tiempos se producir¨¢ en el Pa¨ªs Vasco "un desbordamiento democr¨¢tico". Egibar evit¨® el t¨¦rmino consulta, pero traz¨® el dibujo completo: habr¨¢ "iniciativas populares" que estar¨¢n basadas en "decisiones adoptadas por las instituciones vascas" cuya referencia es "el proyecto aprobado en 2004 en el Parlamento vasco", el plan Ibarretxe.

Los malos resultados del 27-M podr¨ªan haber pasado una cara factura a Egibar, pero finalmente no ser¨¢ as¨ª, porque en t¨¦rminos de poder y presencia institucional, son sus partidarios quienes han aportado al partido las diputaciones de ?lava y Guip¨²zcoa, pese a haber perdido las elecciones en ambas provincias.