Nicolau Casaus, ex vicepresidente del Bar?a

Nicolau Casaus ha sido tan fiel al Bar?a como a su puro habano Montecristo del tres. Su vida se ha escrito en los colores azul y grana. Ha vivido mejor que nadie los ¨²ltimos 60 a?os de la historia del Bar?a. Vinculado desde su juventud al club, durante el franquismo estuvo vetado por las autoridades para ocupar cualquier cargo directivo. Fund¨® la pe?a Solera, la primera oficial del club en la posguerra, y tambi¨¦n form¨® parte del comit¨¦ organizador de los actos inaugurales del Camp Nou, en 1957. Durante aquellos a?os dio apoyo a diversos candidatos a la presidencia del Bar?a y ejerci¨® tambi¨¦n de opositor contra algunos presidentes.

En 1978, Casaus decidi¨® presentarse a las elecciones presidenciales del Bar?a. Despu¨¦s de varias retiradas de aspirantes, la confrontaci¨®n por el cargo se redujo a tres candidatos: Casaus, Ferran Ari?o y Josep Llu¨ªs N¨²?ez. El veterano barcelonista no parec¨ªa tener opciones, pero esperaba que la virulencia de la lucha entre los otros dos candidatos pudiera inclinar la balanza hacia ¨¦l. No fue as¨ª. Aunque hab¨ªa dicho que se retirar¨ªa despu¨¦s de los comicios, decidi¨® aceptar la vicepresidencia que le ofreci¨® N¨²?ez con el objetivo de dar a su junta un toque de catalanismo y barcelonismo cl¨¢sico.

Casaus fue el representante de la funci¨®n social, activando todas las pe?as. De ¨¦l parti¨® la iniciativa de las grandes caravanas de aficionados a las finales europeas, siendo la pionera la final de la Recopa de Basilea, en 1978. Como directivo, fue Casaus quien provoc¨® el fichaje de Bernd Schuster, en 1980, actualmente entrenador del Real Madrid, y tambi¨¦n facilit¨® los informes para fichar a Diego Armando Maradona, en 1982. Pero, sobre todo, fue el embajador del Bar?a en los desplazamientos del equipo porque N¨²?ez no viajaba. Albert Vicens, presidente institucional del club, subray¨® que Casaus "represent¨® la voluntad de extender el barcelonismo por el mundo".