"He jugado el partido perfecto"

El muro derrib¨® a la pelota. David Ferrer, ladrillos en movimiento al fondo de la pista, elimin¨® del Abierto de Estados Unidos a Rafael Nadal, Raf, que le dicen los estadounidenses, el jugador que m¨¢s bolas pone en juego del circuito (6-7 (3), 6-4, 7-6 (4) y 6-2). La victoria de Ferrer, el tenista que mejor resta del mundo, seg¨²n las estad¨ªsticas de la ATP, deja a Nadal en una posici¨®n desacostumbrada: derrotado por un espa?ol -lo que no le ocurr¨ªa desde 2006, cuando perdi¨® frente a Carlos Moy¨¤ en Miami-, con la maquinaria gripada y enfrentado a dos semanas de descanso forzoso.

"He jugado perfecto y he aprovechado los problemas f¨ªsicos que pudiera tener Nadal", explic¨® Ferrer, que se enfrentar¨¢ en cuartos de final al argentino Juan Ignacio Chela. "Me ha salido todo bien, lo que no quiere decir que Rafa no haya acusado el esfuerzo de la temporada", continu¨®. "Pero si yo no hubiera estado bien no hubiera ganado".

Nadal deja Estados Unidos licenciado en medicina. El espa?ol se ha visto sometido en cada rueda de prensa a un interrogatorio sobre sus maltrechas articulaciones; las plantillas que usa para mitigar sus dolores; el aparato l¨¢ser que se aplica; y los antiinflamatorios que le suministran para aguantar los partidos. El n¨²mero dos del mundo, sin embargo, no se escud¨® en sus dolores. "No quiero hablar de problemas f¨ªsicos porque no quiero que suene a excusa", dijo. "El m¨¦rito es de Ferrer, que te obliga a mucho", a?adi¨®. "David ha ganado m¨¢s puntos en el resto. Pero lo que no puede ser es que ganando 2-0 en el segundo set me deje superar por 5-2. No s¨¦ qu¨¦ ha pasado".

Pocos tenistas admiran m¨¢s a Nadal que su ejecutor de ayer. A rebufo del ¨¦xito del mallorqu¨ªn, Ferrer, un especialista en tierra batida, se ha volcado en adaptar su juego a todas las superficies. Hoy, encaramado al motor de sus piernas, es un tenista temible, duro en el cuerpo a cuerpo y con tendencias autodestructivas a contracorriente. A Ferrer le distingue su mal genio. Este a?o lo sufri¨® m¨¢s de una silla en el Abierto de Australia; los o¨ªdos de alg¨²n ¨¢rbitro discutido y vilipendiado; y, se supone, alg¨²n periodista estadounidense: cuando Ferrer se desplaz¨® a Wiston-Salem, en Carolina del Norte, para disputar el Estados Unidos-Espa?a de Copa Davis, un peri¨®dico local public¨® que su dedicaci¨®n era el mejor ejemplo del escaso valor que le conced¨ªa su equipo a la eliminatoria. Ferrer, publicaron en portada y con todas las letras, fumaba a manos llenas. ?l, que es un portento f¨ªsico, siempre lo neg¨®.

"Si juego diez partidos con ¨¦l, me gana nueve", dijo Ferrer sobre Nadal tras su partido.

"Yo nunca querr¨ªa ver a Rafa ni en pintura", a?adi¨® cuando le contaron que Chela prefer¨ªa jugar contra el n¨²mero dos del mundo antes que contra ¨¦l. "Esta victoria es un momento que he aprovechado, en el que me ha salido todo bien y ¨¦l ten¨ªa problemas f¨ªsicos", continu¨®.

"Nadal, en los momentos importantes, no ha sacado bien. He tenido suerte de que haya cometido muchas dobles faltas. Ahora no pienso m¨¢s que en darlo todo y esperar que todo salga bien. No por haber ganado a Nadal he ganado ya a Chela. Estoy hecho mierda pero acabo bien los partidos. Agradezco al p¨²blico su entusiasmo. Ser¨¢ porque no esperaban una cosa as¨ª".

Queda por saber c¨®mo reaccionar¨¢ Nadal a la derrota, que ofrece a Djokovic, n¨²mero tres del mundo, la oportunidad de recortarle m¨¢s puntos en la clasificaci¨®n. Eso, sin embargo, no le interesaba al espa?ol tras el partido. Acababa de perder contra Ferrer, un muro, el tenista que m¨¢s pelotas resta de todo el circuito. Y ya ten¨ªa planes: "Ahora mismo mi ¨²nico plan es irme al hotel, dormir y nada m¨¢s. Si hubiera un avi¨®n ahora, a las cinco de la madrugada, me ir¨ªa".