Una campeona aterrorizada
Henin, vencedora ante la rusa Kuznetsova, prepar¨® su temporada preocupada por el c¨¢ncer y tras superar su divorcio
"La hora de la venganza ha llegado". Justine Henin, n¨²mero uno del mundo, logr¨® la madrugada del s¨¢bado su s¨¦ptimo t¨ªtulo del Grand Slam al derrotar en la final del Abierto de Estados Unidos a Svetlana Kuznetsova (6-1 y 6-3). Fue "el momento m¨¢s grande" de su carrera. La confirmaci¨®n de que una jugadora en miniatura (57 kilos y 167 cent¨ªmetros) domina el mundo de las tenistas longuil¨ªneas. El resultado de un plan de vida centrado en la lucha compulsiva contra un c¨¢ncer que nunca llega. Y una muestra de supervivencia. Henin, Juju, sobrevivi¨® a la venganza de las hermanas Williams.
Nada m¨¢s derrotar a Serena en cuartos de final, Henin se enfrent¨® a los gritos de Oracene Price, la madre de las estadounidenses. "?El entrenador de Henin tiene que parar de hacer trampas! Ella ya tiene edad para desenvolverse sola. Todo el mundo sabe que recibe instrucciones durante los partidos. Es irritante. Hace falta que pare. ?La hora de la venganza ha llegado!".
A la belga le esperaba en semifinales Venus, la otra Williams. Un reto may¨²sculo: s¨®lo Martina Hingis hab¨ªa logrado vencer a las dos en el mismo torneo. Henin prepar¨® el partido en su habitaci¨®n del hotel Intercontinental, en el cruce de la Avenida Lexington con la calle 48. Sonaban Johnny Hallyday, Obispo y Marc Lavoine, m¨²sica franc¨®fona como banda sonora de una batalla. Venci¨® Henin en un ambiente "el¨¦ctrico". Y ya todo qued¨® en las manos de su fisioterapeuta y de su entrenador, las dos personas que vigilan la dieta de la reina triste del tenis, una mujer divorciada y obsesionada con los dolores de est¨®mago y las microlesiones, mensajeros que anuncian la llegada del c¨¢ncer, seg¨²n piensa. Henin lo mide todo. Este a?o ha ganado Roland Garros y el Abierto de Estados Unidos. Decidi¨®, sin embargo, no jugar el Abierto de Australia: estaba reci¨¦n divorciada. Un a?o antes se retir¨® de la final australina, asustada por un dolor de est¨®mago. Otra vez el fantasma del c¨¢ncer. Otra vez el fantasma de su madre, a la que la enfermedad se llev¨® en 1995.
"Hemos descubierto que Justine tiene una gran fragilidad al nivel de la entrada del intestino delgado, donde se concentran todas las bacterias", explic¨® en Tennis Magazine Carlos Rodr¨ªguez, su entrenador, mentor y consejero desde hace 11 a?os. "Es lo que explica sus grandes momentos de fatiga y sus peque?as lesiones aqu¨ª y all¨¢. Nos ha obligado a revisar la manera en que afronta su carrera. Ya saben ustedes de qu¨¦ se muri¨® su madre", continu¨®. "Le dije que verdaderamente deb¨ªa ponerse a vivir su deporte de una manera completamente diferente. Nos fuimos a ver a una dietista. La meta no era ayudarla a ganar partidos, sino permitirle que se sintiera mejor en su piel. As¨ª se entiende mejor que abandonara la final del Abierto de Australia en 2006... el miedo est¨¢ presente. En una situaci¨®n as¨ª, hay todo un pasado que resurge".
En la hora de la victoria, sin embargo, Henin celebr¨® que hubiera encontrado su mejor juego en su poco querida Nueva York, la ciudad del d¨ªa continuo y el imperio de los neones. "He jugado mi mejor tenis durante estas dos semanas y eso me ha llevado al t¨ªtulo", asegur¨® tras lograr su segundo t¨ªtulo en la Gran Manzana. "Quiz¨¢ sea el t¨ªtulo m¨¢s importante de mi carrera. Ten¨ªa muchas cosas que probarme a m¨ª misma".
Final masculina: R. Federer-N. Djokovic: sin finalizar al cierre de esta edici¨®n.
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