Una sopa de 30.000 kilos de pintura
Barcel¨® inicia su colosal obra que cubrir¨¢ de estalactitas una c¨²pula de la ONU en Ginebra
Subido a un andamio de relucientes barrotes, con un mono de trabajo todav¨ªa impecable y con un espacio de 1.500 metros cuadrados vac¨ªos a sus espaldas, Miquel Barcel¨® inici¨® ayer la monumental obra de la c¨²pula de la sala XX de la sede de Naciones Unidas en Ginebra.
"Habr¨¢ multitud de puntos de vista, algo parecido a contemplar la superficie del mar"
"Se trata de crear un gran magma en permanente formaci¨®n"
La idea: 30.000 kilos de pigmentos y pinturas que colgar¨¢n en forma de estalactitas de una b¨®veda de 45 metros de di¨¢metro. Una obra en permanente ebullici¨®n que para el artista mallorqu¨ªn significa la radicalizaci¨®n absoluta de un estilo. "?La sopa definitiva!", dijo ayer a trav¨¦s de una videoconferencia minutos antes de empezar a dar "la primera mano" de pintura. "Se trata", a?adi¨®, "de crear algo que nunca estar¨¢ acabado, un gran magma de materiales en transformaci¨®n, un mundo en permanente formaci¨®n".
Socarr¨®n, Barcel¨® lo explicaba mientras en la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperaci¨®n, en Madrid, medio centenar de pol¨ªticos, funcionarios y periodistas escuchaban los detalles de una obra que pretende ser, seg¨²n ha dicho el propio artista, "una Capilla Sixtina del siglo XXI". Al acto, presidido por el ministro Miguel ?ngel Moratinos, asistieron los patronos de la Fundaci¨®n Onuart, constituida el pasado mes de abril e impulsora de la creaci¨®n de Barcel¨® para la ONU. Moratinos record¨® que la obra, ganada por concurso, es el primer gran proyecto de Onuart, una fundaci¨®n integrada por el sector p¨²blico y privado y que, sin ¨¢nimo de lucro, pretende difundir el arte espa?ol en los foros de Naciones Unidas y as¨ª "divulgar los valores y principios que sustentan el multilateralismo a trav¨¦s del arte".
La fundaci¨®n prev¨¦ que la obra se inaugure en febrero de 2008, aunque el pintor (que tard¨® siete a?os en terminar su cer¨¢mica de la catedral de Palma de Mallorca) no quiso ayer marcar fechas en el calendario: "?El tiempo? Ya me gustar¨ªa a m¨ª saberlo. No lo s¨¦. Un a?o, quiz¨¢".
Barcel¨® insisti¨® en el valor cambiante de su trabajo, en un proceso que tambi¨¦n juega con el azar y la improvisaci¨®n. Durante los ¨²ltimos meses, el artista mallorqu¨ªn y su equipo de 15 personas han trabajado con los ingredientes que colgar¨¢n de la superficie de aluminio ("una gran concha, o una plaza de toros al rev¨¦s", dice Barcel¨® se?alando el espacio vac¨ªo en blanco) instalada como soporte. Con maquinaria pesada y kilos de pintura de silicio, el artista (con su pa?uelo de nudos en la cabeza) ir¨¢ dando forma con capas sucesivas a un espacio en permanente movimiento. "Habr¨¢ multitud de puntos de vista, el cambio ser¨¢ absoluto de un sitio a otro de la sala. Ser¨¢ algo parecido a contemplar la superficie del mar".
Entre los patronos de Onuart, Miguel Zugaza, director del Museo del Prado, y Jos¨¦ Francisco Yvars, que lo fue del IVAM, preguntaron ayer a Barcel¨® por los retos t¨¦cnicos y estil¨ªsticos de su propuesta. Yvars se preocup¨® por el tama?o de las estalactitas colgantes y por el peligro de una t¨¦cnica que juega con la ley de la gravedad. "Trabajo con t¨¦cnicos y restauradores muy buenos que garantizan la seguridad de la obra. Las estalactitas ser¨¢n de 25 cent¨ªmetros a cinco metros, un margen de tama?o muy amplio. Ser¨¢n seguras, y la estabilidad ser¨¢ la de cualquier obra de esta envergadura".
Asomado desde la c¨²pula todav¨ªa en blanco, Barcel¨® solt¨® un inquietante "quiero someter mi pintura al m¨¢ximo riesgo" para luego bromear sobre el mural de Jos¨¦ Mar¨ªa Sert donado por Espa?a en 1936, precedente de una tradici¨®n de colaboraci¨®n entre el arte espa?ol y Naciones Unidas. Al preguntarle si pretend¨ªa establecer "un di¨¢logo" con su hermano mayor en la sede europea de la ONU, respondi¨®: "Sert no es mi artista favorito. A m¨ª me gustan Batman, Spiderman y Miguel ?ngel Buonarroti. Y Sert, como se dec¨ªa en la ¨¦poca, es mierda sobre oro. As¨ª que no creo que establezca ning¨²n di¨¢logo, aunque a lo mejor le cojo el gusto, qui¨¦n sabe".
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