Los viticultores retan al Gobierno al emplear a miles de inmigrantes sin contrato

Los inspectores del Ministerio de Trabajo podr¨¢n recoger una buena cosecha en Castilla-La Mancha a partir del lunes, cuando comenzar¨¢ oficialmente la mayor vendimia del mundo. Los agricultores de la regi¨®n se disponen a emplear a miles de inmigrantes sin permiso de trabajo para recolectar 2.750 millones de kilos de uvas durante 25 d¨ªas. La mayor¨ªa son rumanos y b¨²lgaros con derecho a residir en Espa?a, pero sujetos a una moratoria que les impide trabajar por cuenta ajena sin permiso expreso de la Administraci¨®n. El ministro de Trabajo, Jes¨²s Caldera, advierte que ser¨¢ "inflexible" en el control de los contratos.

Todos son conscientes de que aplicar la ley podr¨ªa provocar el hundimiento del sector

Hasta el mi¨¦rcoles, los agricultores hab¨ªan presentado en la Delegaci¨®n del Gobierno en Castilla-La Mancha solicitudes para contratar a 12.800 extranjeros. Pero, s¨®lo en Ciudad Real, precisan 30.000 trabajadores para recoger la uva, seg¨²n c¨¢lculos de Trabajo. Dado que los jornaleros espa?oles disponibles en la provincia oscilan entre 5.000 y 10.000, los patronos deber¨¢n emplear entre 20.000 y 25.000 extranjeros. El doble de los que han pedido para toda la regi¨®n.

El conflicto es grave. En primer lugar, por su dimensi¨®n econ¨®mica: 600.000 hect¨¢reas de cultivo y 18.000 hectolitros de vino en los que descansa el sustento de 70.000 familias. En segundo, por su dimensi¨®n pol¨ªtica: los sindicatos de agricultores, en realidad patronales agrarias, han desafiado la ley y al Gobierno. As¨ª lo admiti¨® hace 15 d¨ªas M¨¢ximo D¨ªaz-Cano, delegado del Gobierno: "Intentan forzarnos a mirar hacia otro lado".

Desde mayo, las delegaciones de Trabajo vienen advirtiendo de que, seg¨²n el decreto aprobado por el Gobierno el a?o pasado, las contrataciones de inmigrantes en sus pa¨ªses de origen deb¨ªan presentarse, como m¨ªnimo, tres meses antes de iniciar su actividad laboral. El plazo afecta a rumanos y b¨²lgaros, que entraron en la UE el 1 de enero, pero con una moratoria de dos a?os para trabajar por cuenta ajena. Luego, el plazo se rebaj¨® a dos meses en Castilla-La Mancha.

Adem¨¢s, una "interpretaci¨®n generosa" de las instrucciones de la Direcci¨®n General de Inmigraci¨®n permit¨ªa a los agricultores contratar a rumanos y b¨²lgaros que est¨¢n en Espa?a. Esa f¨®rmula se limitaba a los trabajos de temporada. Los empleadores s¨®lo ten¨ªan que presentar en la Delegaci¨®n sus expedientes empresariales y fotocopias de los pasaportes de los extranjeros para que las autoridades cotejaran su edad, antecedentes penales... Deb¨ªan aportar esos datos con una antelaci¨®n de entre mes y mes y medio, ya que los de rumanos y b¨²lgaros debe ser comprobados en Espa?a y en sus pa¨ªses.

Aunque no habr¨¢ tiempo para resolver la mayor¨ªa de los 12.800 expedientes presentados antes de comenzar la vendimia, la Delegaci¨®n sigue admitiendo solicitudes. Y esas personas empezar¨¢n a vendimiar sin contrato. Una situaci¨®n an¨®mala que explica as¨ª D¨ªaz-Cano: "Al menos, as¨ª tenemos la identidad de empresarios y trabajadores y a ¨¦stos podremos garantizarles el alta en la Seguridad Social".

El conflicto es pol¨ªtico y econ¨®mico, pero las razones por las que los empresarios prefieren arriesgarse a contratar braceros sin permiso de trabajo parecen tener que ver con la antropolog¨ªa. "Muchos de los patronos fueron trabajadores explotados y ahora repiten la historia con otra gente", explica indignado Manuel Delgado, primera v¨ªctima pol¨ªtica del conflicto. Hasta el mi¨¦rcoles era responsable nacional de campa?as agr¨ªcolas de la Federaci¨®n Agroalimentaria de CC OO. Ese d¨ªa convoc¨® en Toledo una rueda de prensa donde acus¨® a D¨ªaz-Cano de "ceder al chantaje de la patronal" y "saltarse la ley a la torera" al regularizar a extranjeros "de una forma arbitraria y salt¨¢ndose todos los requisitos".

Horas despu¨¦s, CC OO de Castilla-La Mancha emiti¨® una nota en la que loaba las iniciativas del delegado, "tendentes a garantizar el respeto a los derechos de los trabajadores frente a situaciones muy complejas y conflictivas provocadas, muy especialmente, por el proceder de determinadas patronales agrarias". Y cerraba: "Las consideraciones hechas en rueda de prensa no se ajustan a la valoraci¨®n que hace CC OO de las actuaciones del delegado del Gobierno".

Delgado relat¨® a este peri¨®dico que sus superiores en el sindicato le pidieron que rectificara o desmintiera sus declaraciones. "Rectificarlas ser¨ªa admitir que son incorrectas, y no lo son. Desmentirlas supondr¨ªa decir que he mentido, y yo he dicho la verdad. Por lo tanto, ni rectifico ni desmiento: dimito".

Nadie en Castilla-La Mancha ha secundado las denuncias de Delgado. Todos son conscientes de que la aplicaci¨®n de la ley podr¨ªa provocar el hundimiento de la vendimia y un conflicto social imprevisible. Hace dos meses, Pedro Barato, presidente de Asaja, la patronal mayoritaria en la regi¨®n, lanz¨® un desaf¨ªo a las autoridades que le instaban a contratar legalmente: "La uva no se va a quedar en el suelo".

Los agricultores, animados por Asaja, quer¨ªan contratar "como toda la vida": en la plaza del pueblo. Y exigieron que se levantara la moratoria sobre rumanos y b¨²lgaros. La mayor¨ªa rechaz¨® las alternativas de la Administraci¨®n. El representante de Trabajo en Ciudad Real, ?ureo Ruiz, explicaba as¨ª la actitud de los empleadores: "Desidia, imprevisi¨®n, incapacidad de planificar a largo plazo". Roque Guti¨¦rrez, presidente de la Cooperativa Santiago Ap¨®stol de Moral de Calatrava, un pueblo que produce 40 millones de kilos de uva, ni se altera cuando se le hace ver que la actitud de los suyos puede poner en peligro los 400 millones en subvenciones que la vendimia recibe de la UE: "Ya...", contesta.

As¨ª se ha llegado a la situaci¨®n actual. Los agricultores necesitan a miles de inmigrantes. Y ¨¦stos, sin permiso de trabajo, buscan empleo en las plazas de los pueblos. Como hace cuarenta a?os.