Ir¨¢n considera una "provocaci¨®n" la ofensiva francesa para que renuncie a su plan nuclear

La ofensiva diplom¨¢tica lanzada por Francia para que Ir¨¢n abandone su programa nuclear ha irritado a Teher¨¢n. El Gobierno iran¨ª mostr¨® ayer su enfado por las declaraciones del ministro franc¨¦s de Exteriores, Bernard Kouchner, en las que dejaba abierta la puerta a la "guerra" si Teher¨¢n no renuncia a su plan. "Son una provocaci¨®n y van en contra de la credibilidad de Francia", dijo el portavoz de la diplomacia iran¨ª, Mohamed Ali Hoseini. En tono conciliador, el director general del OIEA, Mohamed el Baradei, advirti¨® de que usar la violencia ser¨ªa "contraproducente".

El domingo, en una entrevista de televisi¨®n, Bernard Kouchner hab¨ªa advertido de que el mundo tendr¨ªa que estar preparado "para lo peor", y aclar¨® que lo peor ser¨ªa "la guerra", aunque de momento cabe a¨²n negociar "hasta el final" para evitar que Ir¨¢n llegue a tener la bomba at¨®mica. La evocaci¨®n del riesgo de guerra fue respaldada ayer por el primer ministro franc¨¦s, Fran?ois Fillon, aunque evit¨® utilizar el mismo t¨¦rmino y se limit¨® a decir que Kouchner "tiene raz¨®n", en el sentido de que la tensi¨®n con Ir¨¢n "ha llegado al l¨ªmite".

Las palabras de Kouchner han sentado mal en Teher¨¢n. En una primera reacci¨®n oficiosa, un comentario editorial de la agencia Irna afirm¨® que "el nuevo inquilino del El¨ªseo quiere copiar a la Casa Blanca, se ha metido en la piel de los estadounidenses e imita sus aullidos". Sin embargo, Hoseini, en un comunicado posterior, dej¨® ayer la puerta abierta a que "esas declaraciones no correspondan a las posiciones reales y estrat¨¦gicas de Francia".

El lenguaje crecientemente cr¨ªtico de Par¨ªs, que ha pedido a los europeos que impongan a Teher¨¢n sanciones suplementarias a las de la ONU, e incluso aconsejado a sus empresas que no inviertan en Ir¨¢n, ha roto la imagen que en la Rep¨²blica Isl¨¢mica se ten¨ªa de Francia como pa¨ªs que "resist¨ªa frente a un EE UU imperialista". Hoseini subray¨® el hecho de que lo dicho por Kouchner no est¨¢ en l¨ªnea con la UE. En efecto, ponen de manifiesto una importante diferencia con Alemania, que sigue insistiendo en la soluci¨®n pac¨ªfica de la crisis nuclear.

Desde que Nicolas Sarkozy lleg¨® al poder, la pol¨ªtica exterior francesa ha dado un giro y parece cada d¨ªa m¨¢s cercana a la postura de Washington. De hecho, EE UU celebr¨® con gusto las declaraciones de Kouchner.

Las cr¨ªticas vinieron tambi¨¦n del Organismo Internacional de la Energ¨ªa At¨®mica (OIEA), responsable de vigilar el programa nuclear iran¨ª. El Baradei dijo que hay que sacar lecciones de la invasi¨®n de Irak, realizada en 2003 por la sospecha de que su r¨¦gimen ten¨ªa armas de destrucci¨®n masiva. "Estoy preocupado, ¨²ltimamente he escuchado hablar mucho del uso de la fuerza", afirm¨®, e inst¨® a "mantener la calma" y "no calentar" el debate.

Ir¨¢n insiste en que el desarrollo de su tecnolog¨ªa nuclear est¨¢ destinado ¨²nicamente a la producci¨®n de energ¨ªa, mientras los pa¨ªses occidentales, sobre todo EE UU, sospechan que el objetivo es la fabricaci¨®n de armamento. El programa nuclear iran¨ª hizo estallar la desconfianza internacional al descubrirse en 2002 instalaciones no declaradas. Desde entonces, Teher¨¢n, bajo presi¨®n, ha admitido las inspecciones. Pero su transparencia deja mucho que desear, seg¨²n consta en los informes del organismo de la ONU. El Baradei dijo ayer que, de momento, no ve "ning¨²n peligro claro con respecto al programa nuclear iran¨ª".

Los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU (China, EE UU, Francia, Reino Unido y Rusia) se reunir¨¢n el pr¨®ximo 21 de septiembre para estudiar nuevas sanciones contra Teher¨¢n.