Al abordaje de Odyssey
El conflicto de intereses que enfrenta a la empresa estadounidense Odyssey Marine Exploration, dedicada al descubrimiento de pecios y tesoros arqueol¨®gicos, con el Gobierno espa?ol a cuenta de un descubrimiento de 500.000 monedas de oro y plata presuntamente en aguas espa?olas, se est¨¢ contaminando de la est¨¦tica de las pel¨ªculas de corsarios que el caso parece evocar. El buque Odyssey Explorer, con un gran n¨²mero de periodistas invitados a bordo por la compa?¨ªa propietaria, ha sido abordado por buques de la Armada y de la Guardia Civil y conducido al puerto de Algeciras. El abordaje y confinamiento -el capit¨¢n del barco fue detenido por oponerse al registro y liberado posteriormente por el juez- ten¨ªa como objeto verificar la carga del barco para determinar si est¨¢ expoliando las aguas territoriales espa?olas. El Gobierno espa?ol entiende que la empresa cazatesoros est¨¢ burlando las leyes espa?olas e internacionales sobre explotaci¨®n de los restos marinos, y Odyssey, por su parte, parece dispuesta a jugar sus cartas en el terreno de las demostraciones al estilo de Hollywood.
El enfrentamiento tiene una explicaci¨®n sencilla, aunque la definici¨®n legal requiera procedimientos largos y fastidiosos. Un juzgado de Florida debe decidir si Espa?a puede reclamar derechos sobre las 500.000 monedas extra¨ªdas por Odyssey o si son de propiedad leg¨ªtima de la empresa estadounidense. Complican el caso las diferencias de criterio entre Espa?a y Reino Unido: Londres reclama tres millas marinas alrededor de Gibraltar y sostiene que m¨¢s all¨¢ son aguas internacionales, mientras que Espa?a entiende que a partir de esa distancia se entra en jurisdicci¨®n espa?ola. Sobre el enredo jur¨ªdico habr¨¢ que pronunciarse en el momento en que el tribunal de Florida decida si Espa?a tiene o no base legal para reclamar el tesoro. Confiemos en que la decisi¨®n sirva como precedente legal en futuros contenciosos.
Pero lo que llama la atenci¨®n ahora es la escasa colaboraci¨®n de la empresa estadounidense. Parece estar jugando al gato y al rat¨®n con las autoridades espa?olas. Odyssey no ha escatimado maniobras de distracci¨®n sobre la localizaci¨®n exacta del tesoro y escenifica operaciones de fingida resistencia, probablemente con la intenci¨®n de demostrar sus posibilidades de ocultar pruebas. No es una conducta que est¨¦ justificada por la defensa de sus derechos. Otros Gobiernos con fondos marinos atestados de pecios deber¨ªan tomar nota de los sospechosos modales de Odyssey.
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