"Europa apesta a dinero"

"Vivimos una ¨¦poca en la que en Europa s¨®lo existe una fuerza: el dinero. Nunca antes hab¨ªa apestado tanto a dinero y riqueza". ?ste es el desolador paisaje que el pensador y humanista George Steiner (Par¨ªs, 1929) dibuj¨® ayer del Viejo Continente. Una Europa carente de ideales, en la que la ¨²nica aspiraci¨®n de las ¨¦lites intelectuales consiste en dedicarse a la banca y donde los j¨®venes aspiran a convertirse en multimillonarios a los 25 a?os. La pol¨ªtica, el derecho, la investigaci¨®n han perdido todo su atractivo, al mismo tiempo que se ha producido el descalabro de la izquierda. "Si no somos capaces de encontrar un nuevo ideal, el dinero sofocar¨¢ la vida espiritual".

Steiner viaj¨® a Barcelona para pronunciar ayer una conferencia en el Museo de Historia de la Ciudad sobre la necesidad de construir el futuro a partir de la reflexi¨®n sobre el pasado. El problema, en su opini¨®n, es que en Europa "el pasado es tan pesado, tan excesivo, que no estoy seguro de que podamos dar una nueva esperanza a los j¨®venes". S¨®lo una minor¨ªa se desvela por la libertad de pensamiento y de palabra, porque el miedo a la pobreza, al desempleo y el deterioro del Estado del bienestar son las grandes preocupaciones contempor¨¢neas.

"?Encontraremos un capitalismo humano, un socialismo liberal?"

El arrinconamiento de la religi¨®n, -"Espa?a es un buen ejemplo de ello"- le lleva a preguntarse, de modo ret¨®rico, "?cu¨¢l ser¨¢ ahora la garant¨ªa trascendente que necesitamos para ir hacia delante?". Seg¨²n ¨¦l, en la ¨¦poca de la globalizaci¨®n ha dibujado una Europa "troceada" en la que "lo que cuenta es la regi¨®n, la lengua local y la tradici¨®n local". Ni siquiera la literatura atraviesa su mejor momento, y le parece "un poco inquietante" que el Nobel recaiga en una autora de 88 a?os, aunque admire a Doris Lessing y le guste su obra.

Su retrato es mucho m¨¢s edificante cuando su afilado prisma anal¨ªtico enfoca Am¨¦rica. "All¨ª hay una generosidad infinita: se dona a los museos, a las universidades, a las orquestas sinf¨®nicas. En Europa no se da nada". Su diagn¨®stico pasa por la necesidad de "intentar desarrollar en Europa la solidaridad de la cultura. Una solidaridad que nos haga volver a pensar".

En este contexto, el antiamericanismo europeo es, a su modo de ver, "un complejo de inferioridad. Es una mala conciencia profunda por parte de Europa, avergonzada ante la generosidad americana". Steiner record¨® la ignominia de las dos guerras mundiales y dijo que incluso en conflictos b¨¦licos recientes, como la guerra de los Balcanes, fue necesario recurrir a la ayuda americana. "No fuimos capaces de limpiar nuestra propia mierda".

Estadounidense de origen polaco, ganador, entre otros, del Premio Pr¨ªncipe de Asturias de Comunicaci¨®n y Humanidades, ejerci¨® su magisterio durante a?os en diversas universidades norteamericanas. Actualmente da clases en Cambridge (Reino Unido). Es decir, que como ¨¦l mismo explica, "he escogido Europa". Pero no cree que haya esperanza para revertir su actual decadencia. "Desde la revoluci¨®n francesa, en Europa la esperanza ha estado siempre en la izquierda. Pero ahora ya no hay una izquierda seria, grande, filos¨®fica. Hay un agujero negro, un enorme vac¨ªo". Es as¨ª en Francia, "donde la izquierda es un espectro", en Inglaterra, "donde todos somos hijos de la se?ora Thatcher", en Suiza, "un protofascismo", aunque "por suerte nos llegan buenas noticias de Polonia".

Como colof¨®n a sus reflexiones, Steiner plante¨® una nueva pregunta ret¨®rica: "?Encontraremos un capitalismo humano, un socialismo liberal? No veo muchos s¨ªntomas de que vaya a ser as¨ª. Pero espero equivocarme".