Un jurado declara culpable a la polic¨ªa en el 'caso Menezes'

Scotland Yard fue ayer declarada culpable de la muerte del joven brasile?o Jean Charles de Menezes, confundido con un terrorista y ejecutado de siete tiros en la cabeza tras una cadena de tr¨¢gicos errores en la ma?ana del 22 de julio de 2005. El jefe de Scotland Yard, sir Ian Blair, se neg¨® ayer a dimitir a pesar de que as¨ª se lo hab¨ªan exigido minutos antes los dos grandes partidos de la oposici¨®n. El Gobierno, sin embargo, respald¨® al responsable policial, que corre el riesgo de recibir nuevas cr¨ªticas cuando en los pr¨®ximos d¨ªas se revelen los detalles de la investigaci¨®n sobre el caso.

La Polic¨ªa Metropolitana fue condenada como instituci¨®n por los fallos que llevaron a la muerte de De Menezes, de 27 a?os, y deber¨¢ pagar una multa de 175.000 libras (235.000 euros) y unas costas de 385.000 libras (algo m¨¢s de 500.000 euros). El fallo abre las puertas a una reclamaci¨®n de la familia de De Menezes por la v¨ªa civil para recibir una compensaci¨®n por su muerte, aunque los familiares del brasile?o insistieron ayer en que el caso se ten¨ªa que haber juzgado por la v¨ªa penal.

La celebraci¨®n del juicio que concluy¨® ayer fue un t¨ªpico compromiso brit¨¢nico: la fiscal¨ªa de la Corona no vio base legal suficiente para procesar por presunto homicidio a ninguno de los polic¨ªas ni mandos policiales que participaron en aquella desastrosa operaci¨®n, pero encontr¨® una f¨®rmula para evitar que esa decisi¨®n se interpretara como un encubrimiento de Estado: por primera vez en la historia, que se sepa, la Polic¨ªa Metropolitana ser¨ªa acusada, como instituci¨®n, de incumplimiento de la normativa de salud e higiene en el trabajo por la muerte a tiros de un inocente.

Aunque eso significaba que ning¨²n polic¨ªa ser¨ªa condenado de forma individual y que la pena m¨¢xima imponible era una multa de cuant¨ªa impredecible, el proceso judicial se ha acabado convirtiendo en una humillaci¨®n para Scotland Yard. Las audiciones, conducidas con mano de hierro por el juez Henriques, han permitido airear los numerosos errores cometidos aquel d¨ªa por la polic¨ªa, desde las confusiones en la identificaci¨®n del sospechoso al retraso de varias horas en el despliegue del comando de tiradores de ¨¦lite -que acab¨® siendo clave y sellando el destino de De Menezes- o la pobreza del material policial, que imped¨ªa la comunicaci¨®n entre el mando que controlaba la operaci¨®n en Scotland Yard y los polic¨ªas que siguieron al brasile?o hasta el and¨¦n de la estaci¨®n de metro de Stockwell, en el sur de Londres. De Menezes hab¨ªa sido confundido con uno de los autores de cuatro fallidos intentos de atentado la v¨ªspera en el metro de Londres, s¨®lo dos semanas despu¨¦s de las explosiones del 7-J.