El suicidio de un polaco permite descubrir una red de extorsionadores

El suicidio de un inmigrante polaco, Marios Andres Mucinsky, de 30 a?os, fue la pista que ha permitido a la polic¨ªa desarticular un violento grupo de extorsionadores que tambi¨¦n se dedicaba, supuestamente, a los robos y al tr¨¢fico de droga.

La v¨ªctima hab¨ªa sido amenazada: o pagaba 5.000 euros o su esposa e hija ser¨ªan asesinadas. Los integrantes del grupo tambi¨¦n han cometido cuatro cr¨ªmenes en los ¨²ltimos a?os, seg¨²n inform¨® ayer la Jefatura Superior de Polic¨ªa de Madrid.

Marios Andres se quit¨® la vida en su casa, en la calle de Tom¨¢s Meabe (Usera), el pasado 2 de septiembre. Este empleado de una cristaler¨ªa de la calle de Antonio L¨®pez recibi¨® una primera amenaza. Ten¨ªa que pagar 2.000 euros, pero la cantidad subi¨® a 5.000 justo el d¨ªa anterior al pago. Fue entonces cuando se suicid¨®. Antes mand¨® numerosos mensajes de tel¨¦fono m¨®vil a su esposa, en los que avisaba de que le iban a matar.

La mujer denunci¨® el suicidio en la comisar¨ªa de Carabanchel, y a partir de ese momento empezaron a investigar los agentes del grupo XVI de la Brigada de Polic¨ªa Judicial.

Los agentes ya conoc¨ªan de la existencia de este grupo. Es una ramificaci¨®n de una gran organizaci¨®n que actuaba por toda Europa desde 2000. Los polic¨ªas hab¨ªan detenido a algunos integrantes, pero ¨¦stos hab¨ªan sido sustituidos por otros.

La forma de actuar siempre era la misma. Los miembros de la banda contactaban con chivatos, que les informaban de los inmigrantes polacos que resid¨ªan en la regi¨®n. "El que ten¨ªa m¨¢s dinero pagaba m¨¢s. Les daba lo mismo en qu¨¦ trabajaran, porque siempre les exig¨ªan mucho dinero. Lo mismo iban a por peque?os empresarios que a por empleados", explic¨® un responsable policial.

Muchas veces han infligido fuertes palizas a sus compatriotas para obligarles a desembolsar el dinero que les exig¨ªan. La polic¨ªa se ha encontrado con muchos problemas, ya que las v¨ªctimas se han negado a denunciar en m¨¢s de una ocasi¨®n por temor a las represalias.

Los agentes lograron identificar a los siete integrantes de la banda, que tambi¨¦n se dedicaban, adem¨¢s de a la extorsi¨®n, al cobro de deudas pendientes para terceras personas. Otra actividad il¨ªcita que practicaban era el robo con fuerza. Generalmente hac¨ªan butrones en las naves industriales para desvalijarlas. Tambi¨¦n traficaban con droga. La polic¨ªa les detuvo antes de que atracaran una peluquer¨ªa.

M¨²ltiples antecedentes

Los siete detenidos son Jakub Z., de 33 a?os; Pablo P., de 27; Norbert P., de 29; Alexander M., de 50; Jaroslaw Krzystof R., de 28; Malgorzarta Nina S., de 40, y Klaudiusz Janusz T., de 31. Todos ellos, salvo la mujer Malgorzarta Nina, han sido detenidos anteriormente. Norbert P., con 21 antecedentes, era buscado por un juzgado de lo penal de Madrid, seg¨²n la polic¨ªa. Algunos arrestados est¨¢n acusados de graves delitos en Polonia.

Algunos de los integrantes hab¨ªan cometido al menos cuatro homicidios en los ¨²ltimos nueve a?os. El primero ocurri¨® el 22 de febrero de 1998, cuando muri¨® Marin Klepka, de 30 a?os, tras recibir un disparo en el pecho en Carabanchel. El segundo se produjo el 6 de septiembre de 1999 en Alcal¨¢ de Henares.

Zygmut Malek muri¨® en 2005 al ser apu?alado en el t¨®rax por un compatriota en el bar Bus Express, en el n¨²mero 7 de la calle de Goya, frente a la estaci¨®n de Renfe de M¨®stoles.

El martes 9 de agosto de 2005 fue hallado muerto el inmigrante polaco Witold Kulcyk, de 38 a?os, en una nave industrial del camino de los Dep¨®sitos, en el barrio del Sector III, en Getafe. La v¨ªctima presentaba golpes en la cabeza y en el rostro.

Los investigadores del grupo XVI registraron los domicilios de los arrestados, que se encontraban en Getafe, Fuenlabrada y Parla. En el de Pablo P., situado en esta ¨²ltima localidad, fueron intervenidos una pistola de fabricaci¨®n h¨²ngara con cargador y munici¨®n, una defensa el¨¦ctrica, varios pu?ales, un taladro, una cizalla, dos hojas de sierra y documentaci¨®n de algunas de las v¨ªctimas. Henryk Jakub Z., Pablo P., Norbert P. y Jaroslaw Krzystof R. han ingresado en prisi¨®n por orden judicial. Los tres restantes est¨¢n en libertad con cargos, seg¨²n fuentes del caso.