Todo por la sangre

Alg¨²n psicoanalista lo tendr¨ªa f¨¢cil para diagnosticar obsesi¨®n fetichista, pero el caso tiene poco que ver con la neurosis y a su resoluci¨®n no se llegar¨¢ en div¨¢n alguno sino en el parqu¨¦ de un tribunal deportivo en Suiza. El asunto m¨¢s tiene que ver con el ciclismo y con su sombra inevitable de los ¨²ltimos a?os, el dopaje. Es decir, con la Operaci¨®n Puerto. Es decir, aqu¨ª hay morbo, aqu¨ª hay sangre.

Hay, en realidad, m¨¢s de cien bolsas de sangre y plasma congeladas, pero m¨¢s en concreto hay una, marcada con el n¨²mero 18, que se ha convertido en s¨ªmbolo de la lucha antidopaje a escala planetaria. Es el plasma contaminado con EPO que, presuntamente, corresponde a Alejandro Valverde -identificado con el n¨²mero 18 en un listado de apodos por los abogados de la Uni¨®n Ciclista Internacional (UCI) y de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA)- y s¨®lo su plena identificaci¨®n podr¨ªa, seg¨²n la tesis obsesiva, dar carpetazo a la Operaci¨®n Puerto, que ya se ha cobrado la cabeza de Jan Ullrich e Ivan Basso.

El procedimiento es sencillo: hace unas semanas, tanto la UCI como la AMA recurrieron ante el Tribunal Arbitral del deporte (TAS) la negativa de la federaci¨®n espa?ola a expedientar a Valverde y suspenderle cautelarmente. Para reforzar sus argumentos, ambos organismos han solicitado al TAS que exija al juez instructor de la Operaci¨®n Puerto, Antonio Serrano, que les entregue la bolsa 18 para cruzarla con el ADN de Valverde y probar que, efectivamente, es suya y que debe ser sancionado por ello.

Pero todo no debe de ser tan sencillo como parece cuando la AMA ha iniciado una b¨²squeda fren¨¦tica de un superabogado en el colegio madrile?o que le asegure el cumplimiento de una medida complicada de conseguir. Algunas fuentes consultadas lo califican de desvar¨ªo jur¨ªdico: el caso est¨¢ archivado provisionalmente; si se reabre, dif¨ªcilmente el juez de un proceso penal, que, adem¨¢s, ya ha advertido en contra del uso administrativo-sancionador de sus pruebas y que se ha sentido enga?ado por la forma en que la sangre de Basso viaj¨® a Italia, puede permitir la movilidad de las bolsas. Si se cierra definitivamente, las pruebas se destruir¨ªan o se devolver¨ªan a sus propietarios.

No obstante, la AMA ha sondeado a varios prestigiosos bufetes madrile?os y se ha encontrado con sonoras negativas, ya que todos ellos, de una manera u otra, cuentan con clientes implicados en el otro lado de la Operaci¨®n Puerto. La UCI, por su parte, cuenta en Madrid con el asesoramiento del abogado Pablo Jim¨¦nez de Parga, quien ya intervino ante el TAS en la primera vista Valverde, la entablada en septiembre por la federaci¨®n espa?ola contra la UCI para permitir al ciclista murciano tan deseado participar en el pasado Mundial de Stuttgart.