Alcaldada

Desde hace unos doce a?os mi padre usa el servicio gratuito de teleasistencia en su domicilio, al que accedi¨® por tener una pensi¨®n m¨ªnima contributiva. Ahora, el Ayuntamiento de la localidad de Ponferrada (Le¨®n), donde mi padre ha residido y trabajado casi toda su vida, y a punto de cumplir 94 a?os, le requiere el pago de tres euros mensuales si sigue utilizando la referida asistencia, que le ser¨¢ suspendida si no abona el dinero.

La mayor¨ªa absoluta del Partido Popular impone una sensibilidad recaudatoria agresiva y deplorable con los ponferradinos que aspiran a consumir sus ¨²ltimos tramos de existencia con una calidad de vida lo m¨¢s confortable posible, la que, por otra parte, se han ganado y ning¨²n partido da graciosamente desde el poder, sino que debe gestionar adecuadamente en beneficio de los ciudadanos aunque sean ¨¦stos los m¨¢s viejos del lugar.

Recurrir ahora y as¨ª al pago de los tres euros de marras, m¨¢s all¨¢ del dinero en s¨ª, es una ofensa en toda regla a la dignidad e inteligencia de los ancianos de Ponferrada, herir gratuitamente la sensibilidad de personas que, ante todo, piden respeto. Me parece una alcaldada al m¨¢s despreciable estilo caciquil del franquismo.