La avenida partir¨¢ en dos El Cabanyal
El Tribunal Supremo rechaza el recurso de la plataforma que busca preservar el barrio
Rita Barber¨¢ podr¨¢ prolongar la avenida de Blasco Ib¨¢?ez hasta el mar. As¨ª lo ha decidido el Tribunal Supremo. El barrio de El Cabanyal, en Valencia, con una planimetr¨ªa singular protegida como Bien de Inter¨¦s Cultural (BIC) por la importancia de su trama urbana, quedar¨¢ partido en dos por una gran avenida. 1.652 viviendas se ver¨¢n afectadas por el que ha sido un proyecto emblem¨¢tico del PP en Valencia, que ha tenido diez a?os de recorrido judicial y que levant¨® desde el primer momento oposici¨®n en diversos sectores ciudadanos. Unos sectores a los que Barber¨¢ no se recat¨® ayer en calificar como "izquierda radical".
Salvem El Cabanyal, plataforma c¨ªvica que agrupa a los damnificados por el proyecto, lament¨® ayer la respuesta del Supremo y anunci¨® que, si es posible, plantear¨¢ un nuevo debate jur¨ªdico en el Constitucional. La sentencia del Supremo no estaba ayer redactada y solo se dio a conocer el fallo. Seg¨²n fuentes de Salvem El Cabanyal, la resoluci¨®n se fundamenta en que el Tribunal Superior de la Comunidad Valenciana, tras un exhaustivo estudio del asunto, ya se pronunci¨® a favor del Ayuntamiento de manera razonada y, por tanto, no ha entrado a discutirlo.
El deterioro de El Cabanyal es culpa de la "izquierda radical", seg¨²n Barber¨¢
La prolongaci¨®n de la avenida de Blasco Ib¨¢?ez afecta a 450 inmuebles
Un portavoz de Salvem El Cabanyal afirm¨® que dos sentencias de 2007 sobre asuntos similares les servir¨ªan para plantear un recurso. Esa fue una primera afirmaci¨®n, a falta de conocer el detalle de los argumentos utilizados por la sala del Supremo para respaldar la prolongaci¨®n de la avenida de Blasco Ib¨¢?ez hasta el mar. La plataforma celebr¨® anoche una asamblea en el Teatre de Titelles la Estrella, ubicado en el popular barrio del distrito mar¨ªtimo.
La oposici¨®n pol¨ªtica expres¨® su respaldo a Salvem el Cabanyal ante la inminencia de la ejecuci¨®n del proyecto. Muy distinta fue la reacci¨®n de la alcaldesa de Valencia, que se mostr¨® satisfecha y afirm¨® que el fallo permitir¨¢ acabar con la "degradaci¨®n" del barrio, cuya "culpa", se?al¨®, ha sido "exclusivamente de la izquierda radical". Agreg¨® que durante los 10 a?os de conflicto entre el Ayuntamiento y los afectados, "ha habido momentos de tremenda violencia". Barber¨¢ a?adi¨® que en sucesivas elecciones los vecinos de El Cabanyal han respaldado la intervenci¨®n, en alusi¨®n a las reiteradas victorias electorales que el PP ha obtenido en esa zona de Valencia. La alcaldesa no quiso concretar una fecha para retomar el proyecto, pero s¨ª se comprometi¨® con los vecinos a que se comenzar¨¢ "muy intensamente para poder avanzar" tanto en la prolongaci¨®n de la avenida como en la recuperaci¨®n de este barrio.
Por su parte, la portavoz socialista, Carmen Alborch, lament¨® que el Ayuntamiento "no haya invertido en El Cabanyal y haya permitido que el barrio se deteriore". Y exigi¨® el cumplimiento de la parte buena del proyecto: "La construcci¨®n de 70 equipamientos, la rehabilitaci¨®n de 560 edificios y la construcci¨®n de vivienda p¨²blica".
La presidenta de la Federaci¨®n de Vecinos de Valencia, Mar¨ªa Jos¨¦ Broseta, expres¨® su rechazo al fallo. "No es una decisi¨®n justa. En lugar de dejar degradado todo lo que est¨¢ alrededor, se tendr¨ªa que haber reactivado la zona para que los vecinos tuvieran sus casas como toca, rehabilitadas y bonitas, y covertir este barrio en una zona entra?able de la ciudad de Valencia".
La asociaci¨®n de vecinos Pavimar y el Instituto de Defensa de Intereses Patrimoniales, Culturales y Art¨ªsticos de El Cabanyal Canyamelar (Indipcacc-Salvem El Cabanyal) recurrieron al Tribunal Supremo despu¨¦s de que la sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) diera la raz¨®n a Rita Barber¨¢ y le permitiera separar el barrio con la prolongaci¨®n de la avenida de Blasco Ib¨¢?ez hasta el mar. Entonces, en 2004, con ocho votos a favor de los 11 miembros de la sala, el TSJ consider¨® que el proyecto urban¨ªstico lograr¨ªa "la mejora del barrio siendo respetuoso con ¨¦l" y facilitar¨ªa "su integraci¨®n en la ciudad". Para el TSJ, la protecci¨®n por su condici¨®n de BIC (Bien de Inter¨¦s Cultural) no fue una circunstancia que pudiera restar peso al "inter¨¦s general". En aquel fallo, los magistrados reconoc¨ªan las singularidades del barrio y tambi¨¦n su deterioro. Precisamente, esas dos cuestiones fueron esenciales en el recurso plateado al Supremo.
Los afectados expusieron que el plan de reforma urban¨ªstica supone "un claro expolio del patrimonio hist¨®rico espa?ol", y con ello una vulneraci¨®n de normas estatales espec¨ªficas sobre patrimonio. El Cabanyal, barrio de pescadores, se uni¨® a Valencia en 1897, se caracteriza por la particular disposici¨®n de sus calles, una trama urbana que discurre perfectamente paralela y perpendicularmente al mar, con algunos de los mejores ejemplos de arquitectura industrial del siglo XIX y con viviendas populares inspiradas en el modernismo. Eso le vali¨® la declaraci¨®n de BIC. Los tribunales han ignorado el valor a?adido que encierra El Cabanyal. Su historia, su geometr¨ªa urbana, no han contado para los jueces.
El proyecto de prolongaci¨®n de la avenida de Blasco Ib¨¢?ez, que present¨® Rita Barber¨¢ hace 11 a?os afecta a 450 inmuebles. De ellos, un centenar est¨¢n catalogados. Son 1.652 viviendas. Los derribos previstos, sobre los que hubo hasta el a?o pasado una suspensi¨®n cautelar excepto en la zona protegida, se extienden por 25.000 metros cuadrados de la parte del barrio declarada BIC y 100.000 metros cuadrados del total del conjunto hist¨®rico. 2.000 vecinos ser¨¢n obligados a desplazarse. Todo eso, a cambio de la divisi¨®n en dos del barrio para dar cabida a una avenida de 48 metros, aunque la franja derribada alcanzar¨¢ los 106 metros de ancho, y la construcci¨®n de edificios de cinco o seis alturas romper¨¢ claramente con la morfolog¨ªa caracter¨ªstica de El Cabanyal-Canyamelar. El Supremo considera, como lo hizo el TSJ, que vale la pena.
Los afectados se reunieron anoche en asamblea en el Teatre de Titelles La Estrella. La convocatoria fue multitudinaria. Los vecinos esperan el detalle de la sentencia del Supremo y buscan una nueva forma de hacer frente a lo que consideran un ataque cultural y social para favorecer los intereses urban¨ªsticos del Ayuntamiento del PP.
El PP, con el apoyo de los tribunales, defiende la actuaci¨®n sobre El Cabanyal. Ayer se evidenci¨® de nuevo. La oposici¨®n pidi¨® responsabilidad a Barber¨¢, para que el respaldo judicial no suponga una licencia sin l¨ªmites. Isaura Navarro, de Iniciativa del Poble Valenci¨¤, afirm¨®: "La justicia est¨¢ para defender al d¨¦bil frente al poderoso y en el fallo no se ha cumplido esta premisa".
El secretario comarcal del Bloc de Valencia, Ximo L¨®pez, manifest¨® que la decisi¨®n del Supremo "no puede ser un tal¨®n en blanco para la alcaldesa".

Una batalla legal
- 1998. Despu¨¦s de perfilado el proyecto, se inicia la tramitaci¨®n.
- 2001. La Generalitat da el visto bueno en abril y en mayo lo ratifica el Ayuntamiento.
- 2002. El Tribunal Superior de Justicia (TSJ) acepta las reivindicaciones de los vecinos y ordena la paralizaci¨®n cautelar.
- 2004. El TSJ levanta la paralizaci¨®n de los derribos y respalda a Barber¨¢.
- 2008. El Tribunal Supremo da luz verde al proyecto.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.