Darfur

Mientras conmemoramos el quinto aniversario del conflicto de Darfur, gran parte de su poblaci¨®n se enfrenta a otro d¨ªa de miedo y terror. Durante cinco a?os, el mundo ha fracasado en su compromiso de protecci¨®n hacia los habitantes de Darfur. Durante cinco a?os, los pol¨ªticos han prometido que har¨ªan algo, pero nada ha ocurrido. Como agencia humanitaria que trabaja en el pa¨ªs, conocemos las consecuencias de esta continua negligencia. Todav¨ªa hoy, cada semana, son miles los que se ven obligados a huir de sus casas y buscar refugio en los campos de la regi¨®n, mientras los ataques hacia civiles y trabajadores humanitarios se repiten cada d¨ªa.

Que esta tragedia humanitaria contin¨²e durante tanto tiempo tiene que llamar la atenci¨®n de los l¨ªderes mundiales. En enero de este a?o, la ONU y la Uni¨®n Africana desplegaron una fuerza de mantenimiento de la paz, que s¨®lo ha alcanzado un tercio de su tama?o previsto. Esta fuerza podr¨ªa llegar a marcar la diferencia, pero deber¨ªa estar presente en los campos de refugiados y desplazados, en las aldeas y zonas rurales. Sin embargo, dado el escaso n¨²mero de tropas, equipos y soporte policial con el que cuenta, es incapaz de proteger a la gente de Darfur como se merece.

Los l¨ªderes mundiales deben actuar urgentemente, apoyar esta fuerza de paz para que pueda ser efectiva, y presionar a las partes enfrentadas para conseguir un alto el fuego inmediato. Dejar que esta tr¨¢gica crisis contin¨²e implicar¨¢ una vergonzosa acusaci¨®n hacia la comunidad internacional.