La justicia investiga una estafa con pr¨®tesis mamarias a 130 mujeres

"Antes de operarme ten¨ªa el complejo de que ten¨ªa poco pecho. Ahora es peor. No dejo que mi marido los toque. Tengo uno m¨¢s alto que el otro y los dos mirando cada uno para un lado. No puedo abrazar a nadie porque se ha endurecido mucho. Me han estafado con mi cuerpo". L. N. L. tiene 32 a?os y es una de las v¨ªctimas de una supuesta estafa de la compa?¨ªa Corporaci¨®n Dermoest¨¦tica. La investiga el Juzgado n¨²mero 20 de Valencia desde hace un a?o y afecta a mujeres en esta provincia y en Castell¨®n. Al menos 130 pueden haberse visto perjudicadas en varias provincias espa?olas (Valencia, Castell¨®n, Albacete, C¨®rdoba, Almer¨ªa y Madrid) as¨ª que el juzgado de Valencia se inhibir¨¢ en favor de la Audiencia Nacional, que tendr¨¢ que decidir si es competente para juzgarlo.

La Audiencia Nacional decidir¨¢ si es competente para juzgar el caso

La compa?¨ªa explica que las facturas no concuerdan por un error inform¨¢tico

Seg¨²n las diligencias de la fiscal, las pacientes pagaron unos 1.200 euros por unas pr¨®tesis de la marca estadounidense McGhan, las mejores del mercado, seg¨²n los especialistas consultados. Pero a las pacientes nunca se les implantaron esas pr¨®tesis. En su lugar, les colocaron otras mucho m¨¢s baratas, de las marcas Silimed o Sebbin, de unos 600 euros.

El hombre que destap¨® el caso es el cirujano Jaume Serra. El 17 de febrero de 2006, este cirujano de Corporaci¨®n Dermoest¨¦tica acudi¨® a su puesto de trabajo en Valencia para operar a una paciente que ten¨ªa problemas con una de las pr¨®tesis mamarias que le hab¨ªa implantado tres a?os antes otro m¨¦dico de la misma compa?¨ªa. El pecho de la joven se hab¨ªa encapsulado, es decir, hab¨ªa reaccionado al implante y se hab¨ªa endurecido y deformado.

Serra mir¨® el historial de la paciente y vio que le hab¨ªan implantado unas McGhan. Pero al extraer la pr¨®tesis, se dio cuenta de que no era la prevista sino otra de inferior calidad, de la marca Silimed. En esa diferencia de precio est¨¢ la clave de la presunta estafa.

Este peri¨®dico ha tenido acceso a algunas facturas de las mujeres afectadas en las que aparece McGhan como pr¨®tesis contratada. Ellas poseen adem¨¢s otros documentos -unas pegatinas del producto utilizado en la operaci¨®n- que muestran la marca que se les implant¨® realmente.

La fiscal¨ªa asegura adem¨¢s, seg¨²n los testimonios de las pacientes, que el procedimiento de contrataci¨®n de las pr¨®tesis estaba viciado y que son los comerciales, sin conocimientos m¨¦dicos, los encargados de convenir qu¨¦ pr¨®tesis es la que se va a poner. "Son estos consultores-comerciales", se?ala el texto de la fiscal, "quienes ofertan a estos pacientes las pr¨®tesis que les van a ser implantadas, les informan de que son las mejores del mercado, no presentan complicaciones y son para toda la vida, indicando que las pr¨®tesis que se implantar¨¢n son de la marca McGhan". El ¨²nico contacto de las pacientes con el m¨¦dico se produce tras haber formalizado el contrato, seg¨²n la fiscal.

Corporaci¨®n niega las acusaciones aunque reconoce que en algunos casos ha implantado pr¨®tesis que no eran las que aparecen en las facturas. La compa?¨ªa explica que esto se debe a un error inform¨¢tico. Seg¨²n un portavoz de la empresa, el sistema hac¨ªa que siempre saliera por defecto el nombre de la pr¨®tesis McGhan en las facturas. Afirma que siempre han vendido todas las pr¨®tesis al mismo precio y que las McGhan les salen m¨¢s baratas que el resto. La empresa asegura que la decisi¨®n sobre qu¨¦ pr¨®tesis es m¨¢s adecuada corresponde a los cirujanos y acusa a Jaume Serra de haber convencido a las pacientes para que apoyen su cruzada contra la empresa. El portavoz a?ade que todas las pr¨®tesis son de la misma calidad, que todas est¨¢n homologadas en Espa?a y que un informe elaborado por la Consejer¨ªa de Sanidad de Valencia sobre el caso apoya esta tesis.

Antonio Porcuna, presidente de la Sociedad Espa?ola de Cirug¨ªa Pl¨¢stica Reparadora y Est¨¦tica (Secpre) corrobora que todas las pr¨®tesis est¨¢n permitidas en Espa?a y que todas pueden causar el temido encapsulamiento y posterior endurecimiento de la mama. Pero su testimonio contradice todo lo comentado por Dermoest¨¦tica sobre la calidad de las pr¨®tesis. "No es cierto que sean todas iguales. Las mejores son las McGhan y las Mentor. No es que las otras sean malas, pero no es por capricho que unas valgan m¨¢s que otras", asegura.

Porcuna explica que la diferencia sustancial entre McGhan y el resto se da, adem¨¢s de en el precio, en las capas de la pr¨®tesis. "Las McGhan tienen m¨¢s capas. Eso forma una barrera que impide que el contenido de la pr¨®tesis emigre hacia el exterior. ?stas tienen adem¨¢s una textura rugosa que trata de evitar que se produzca la c¨¢psula", comenta.

Porcuna remata su testimonio con una dura cr¨ªtica a la banalizaci¨®n de la cirug¨ªa est¨¦tica: "Esto se ha convertido en una gran superficie de venta de cirug¨ªa. Se ha olvidado de que estamos hablando de medicina, de diagn¨®sticos. Eso no casa con las comisiones que cobran los comerciales. Un m¨¦dico puede negarse a operar a una paciente que ya ha contratado un servicio, pero a la segunda vez que lo haga lo m¨¢s probable es que le echen de la empresa".

El caso de la presunta estafa de Corporaci¨®n Dermoest¨¦tica tendr¨ªa que haber pasado hace tiempo a la Audiencia Nacional para que ¨¦sta decidiese si era competente. Pero la empresa recurri¨® la inhibici¨®n de la juez en dos ocasiones. La Audiencia Provincial de Valencia ratific¨® en enero la decisi¨®n de la magistrada y el caso ser¨¢ remitido en breve a la Audiencia Nacional. Fuentes judiciales se?alaron a este peri¨®dico que s¨®lo falta encontrar cirujanos independientes que elaboren un informe pericial sobre las distintas marcas y las posibles complicaciones que ¨¦stas puedan presentar.