"En China e India ahora quieren filete"

Se ha enfrentado antes a situaciones complicadas, pero ninguna como la que ahora se le ha venido encima. Jos¨¦ Mar¨ªa Sumpsi, catal¨¢n de 59 a?os que vive a caballo entre Roma, donde est¨¢ su trabajo, y Madrid, donde est¨¢ su casa, es el segundo hombre m¨¢s poderoso de la FAO, la Organizaci¨®n para la Agricultura y la Alimentaci¨®n de la Organizaci¨®n de las Naciones Unidas. Tiene ante s¨ª un reto complicado: evitar que los altos precios de las materias primas ocasionen un nuevo tsunami alimenticio en el mundo que se lleve por delante la estabilidad de, al menos, 33 pa¨ªses.

Pregunta. ?Qu¨¦ hace a esta crisis alimentaria diferente de las anteriores?

"El problema es tan grave que no puede resolverlo la FAO por s¨ª sola" "?frica tiene un gran potencial agr¨ªcola inexplorado que ahora hace falta"

"Vamos a proponer crear una especie de banco mundial de alimentos" "El biocombustible ha encarecido los alimentos entre el 5% y el 10%"

Respuesta. La novedad es que han confluido muchos elementos y, sobre todo, una violencia que era desconocida. Hasta ahora, las hambrunas llegaban por cat¨¢strofes naturales como las sequ¨ªas. ?sta viene por el precio de los alimentos, y adem¨¢s ser¨¢ coyuntural.

P. ?Entonces, el Primer Mundo tiene la culpa de que 100 millones de personas puedan pasar hambre?

R. En buena parte, s¨ª. Hay muchos factores como la crisis financiera, los cambios de moneda o los biocombustibles que son cuestiones creadas por las econom¨ªas avanzadas. Pero otras no. Hay pa¨ªses como China o India, que suponen el 40% de la poblaci¨®n mundial, donde antes la gente se alimentaba con un taz¨®n de arroz. Ahora, su nivel de vida ha aumentado, y quieren un filete. Esta demanda, sumada al aumento de poblaci¨®n y los altos precios, da como resultado una ecuaci¨®n complicada.

P. Se se?ala a los biocombustibles como la causa principal de todos los males...

R. De todo no, pero por supuesto que tienen una parte de responsabilidad. Seg¨²n estudios de la FAO y de otros organismos internacionales, entre 2006 y 2007 han tenido una contribuci¨®n a la subida de los precios de entre el 5% y el 10%. Eso se ha juntado con otros factores. Ahora bien, de cara al futuro, si Estados Unidos o la Uni¨®n Europea siguen convirtiendo m¨¢s y m¨¢s producto agrario en biodi¨¦sel o bioalcohol, a medio plazo los biocombustibles se convertir¨¢n en el gran problema.

P. Los analistas dicen que las materias primas son el nuevo refugio de muchos inversores escaldados. ?Eso tambi¨¦n influye?

R. Por supuesto. Ante una crisis hipotecaria o financiera hay masas de dinero que van cambiando de producto. Han decidido refugiarse en los alimentos, algo que no pasaba desde hace tres d¨¦cadas. Saben que las reservas son las m¨¢s bajas desde hace 30 a?os, y esto crea una oportunidad de rentabilidad para los pr¨®ximos a?os. Estas inversiones han empezado a empujar sus precios hacia arriba.

P. El Banco Mundial y el FMI no hablan de las bolsas de materias primas como un problema. S¨®lo acusan al biocombustible.

R. Hay que tener en cuenta que las reuniones de estos organismos son puramente financieras. S¨®lo el hecho de mencionar que hay un problema con los alimentos por primera vez en la historia, es muy positivo. Si detr¨¢s de las menciones a los carburantes se esconde alguna otra intenci¨®n de despiste, no lo s¨¦, pero tampoco creo que estas instituciones sepan mucho sobre materias primas, porque, hasta ahora, ¨¦se era un mercado residual.

P. Los grandes productores se niegan a exportar parte de su producci¨®n. Despu¨¦s de a?os en busca del libre mercado, ?eso supone un fracaso?

R. Ahora mismo estamos en el ojo del hurac¨¢n de la crisis. La nueva situaci¨®n est¨¢ creando una vuelta atr¨¢s, despu¨¦s de a?os de liberalismo. Pero la vuelta a la autosuficiencia es coyuntural. Es un p¨¦ndulo, y la crisis, si adoptamos las medidas precisas, nos dejar¨¢ en una posici¨®n equilibrada. El comercio es clave, el mercado tambi¨¦n, pero hay que arbitrar mecanismos internacionales que permitan evitar desastres.

P. ?Y cu¨¢les son esas medidas necesarias?

R. Una acci¨®n combinada con otras instituciones, porque el problema es tan grave que no puede solucionarlo s¨®lo la FAO. En junio propondremos crear un sistema de reservas internacional, stocks o medidas regulatorias que aseguren un m¨ªnimo de reservas mundiales.

P. ?Como un banco central de alimentos?

R. Algo as¨ª. No est¨¢ claro, y por eso hemos organizado esa reuni¨®n con los mandatarios de todos los pa¨ªses. Tambi¨¦n para discutir las medidas agrarias de los pa¨ªses, aumentar la producci¨®n y buscar medidas que calmen el clima pol¨ªtico actual.

P. Entonces, ?la crisis puede acabar en algo bueno?

R. ?sa es la clave. Con la crisis de alimentos vivimos una situaci¨®n dram¨¢tica, pero, a medio plazo, es una gran oportunidad. Puede servir para desarrollar la agricultura en el mundo, mover a las econom¨ªas avanzadas, para crear estructuras...

P. En la UE siguen apostando por llegar al 10% de consumo de biocarburantes en 2020, pero piensan en quitar las subvenciones. ?Es una soluci¨®n?

R. Es contradictorio. Yo pensaba que por las declaraciones de los ¨²ltimos meses iban a pens¨¢rselo mejor. Adem¨¢s, sin subvenciones no conseguir¨¢n el objetivo de ninguna manera. El ¨²nico pa¨ªs capaz hoy de conseguir biocarburantes de forma rentable es Brasil.

P. ?Y Espa?a qu¨¦ pinta en esta coyuntura?

R. Para empezar, deber¨ªa actuar con cautela con los biocombustibles. Por lo dem¨¢s, es uno de los grandes aliados de la FAO. Es el pa¨ªs que m¨¢s recursos extra -aparte de las cuotas alimentarias- cede a la FAO y el primero que se ha ofrecido a colaborar ahora.

P. Y hasta que llegue ese organismo regulador, ?No se puede hacer nada?

R. Desde la FAO proponemos medidas concretas para cada pa¨ªs. Lo m¨¢s importante ahora es aumentar la producci¨®n. Los precios elevados pueden ser malos para los compradores, pero a los agricultores les puede venir bien. Siempre que luego, con las se?ales del mercado se pueda reaccionar y aumentar la oferta... Pero en los pa¨ªses m¨¢s pobres no es f¨¢cil, porque se cultiva con muy poco rendimiento. Por eso pedimos ayuda para repartir semillas y aumentar la producci¨®n, mejorar los sistemas de cultivo, los fertilizantes...

P. Si la crisis ha llegado para quedarse, lo que buscan ahora no es una ayuda de urgencia...

R. Nosotros calculamos que cuando pase la tormenta inicial, los precios bajar¨¢n un poco, pero se quedar¨¢n altos, m¨¢s altos de lo que estaban, en una meseta por un pazo de al menos 10 a?os. Entonces llegar¨¢ el momento de proponer los cambios. ?frica tiene un gran potencial agr¨ªcola inexplorado. Si los pa¨ªses con poca renta avanzan ahora, con altos precios, aumentar¨¢ su calidad de vida.

P. ?Hasta cu¨¢ndo durar¨¢n las revueltas populares y las reacciones m¨¢s virulentas?

R. Hasta las pr¨®ximas cosechas, en junio. Esperamos que sean buenas, a no ser que haya alg¨²n desastre natural, as¨ª que cuando llegue la abundancia, aunque los precios no bajen del todo, las reservas se relajar¨¢n.

P. ?Y si la cosecha de 2008 se estropea?

R. Si eso ocurre, el que sepa rezar que rece.