Bazofia
Peter Falk, el int¨¦rprete de Colombo, fue visto "desorientado y desali?ado" en una calle de Beverly Hills. Leo la noticia en varios medios digitales, incluido el de este diario. Quiz¨¢ incluso aparezca hoy en el peri¨®dico. "Desorientado y desali?ado". Y, adem¨¢s, "agitando los brazos". Tremendo. Parece que despu¨¦s de protagonizar tan desasosegante acontecimiento, el actor se larg¨® de all¨ª. La noticia procede de otro medio digital, TMZ, reputado por su fiabilidad.
Hace unos meses, al actor y productor Ashton Kutcher se le ocurri¨® un programa llamado Pop fiction, en el que varios de sus amigos famosos se dedicaban a crear noticias falsas. Paris Hilton, por ejemplo, hizo creer que recib¨ªa asesoramiento espiritual de un monje budista. TMZ y otros medios similares (y diarios como el San Francisco Chronicle) entraron a todos los trapos.
Ignoro por completo el estado de ¨¢nimo de Peter Falk, un grande del cine. Considero que tiene todo el derecho del mundo a ir por la calle desorientado y desali?ado. Lo mismo que Terele P¨¢vez puede charlar con quien quiera, salir donde quiera y vestir como quiera.
Hace unos d¨ªas se suscit¨® un cierto debate en torno a una se?orita Ortiz, cu?ada del pr¨ªncipe Felipe. Ortiz pidi¨® a un juez que protegiera su vida privada, tan privada como cualquier otra. ?Es debatible eso? Lo ¨²nico a discutir, a estas alturas, es el desparpajo de la industria period¨ªstica. Las empresas que satisfacen su voyeurismo m¨¢s abyecto, querido lector, son las mismas que difunden los materiales m¨¢s selectos, o impulsan estrictos c¨®digos de autocontrol.
Nos gusta consumir basura y la industria nos la sirve. Ser¨ªa bueno, sin embargo, un poco m¨¢s de informaci¨®n. Si las cadenas de hamburgueser¨ªas acabar¨¢n indicando las calor¨ªas y grasas de sus productos, ?por qu¨¦ no han de avisar los medios sobre la cantidad de bazofia contenida en ciertos art¨ªculos? As¨ª podr¨ªamos ir directamente a ellos.
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