Pek¨ªn encarcela a 17 supuestos dirigentes de la protesta tibetana

Un tribunal conden¨® ayer en T¨ªbet a 17 supuestos cabecillas de las violentas manifestaciones del pasado marzo en Lhasa, la capital de esa regi¨®n aut¨®noma china. Las penas impuestas son de entre tres a?os de c¨¢rcel y cadena perpetua. Seg¨²n el Gobierno chino, en las protestas murieron 19 personas, aunque los medios tibetanos en el exilio aseguran que perdieron la vida un centenar.

[En la vecina provincia de Qinghai, un polic¨ªa chino muri¨® en un tiroteo cuando iba a detener a otro supuesto cabecilla de las protestas por la autonom¨ªa tibetana, informa Reuters citando a la agencia oficial china Xinhua, que recoge la versi¨®n de la polic¨ªa china. "La polic¨ªa fue a arrestar al sospechoso el lunes. El supuesto l¨ªder de las protestas se resisti¨® y se desencaden¨® un tiroteo", dice la agencia. "El polic¨ªa muri¨® en el incidente, y otros agentes respondieron a los disparos, matando al sospechoso", a?ade]. Las protestas de Lhasa las iniciaron monjes budistas, el 10 de marzo, para pedir la vuelta de su l¨ªder espiritual, el Dalai Lama, cuando se cumpl¨ªan 49 a?os de su exilio, tras el fracaso de la revuelta independentista de 1959. La represi¨®n policial alent¨® nuevas protestas en las que hubo graves disturbios.

Un polic¨ªa chino y un detenido por la revuelta en T¨ªbet mueren en un tiroteo

Vietnam cerr¨® ayer sin incidentes el conflictivo paseo internacional de la antorcha ol¨ªmpica, que hoy llega a territorio chino, a la regi¨®n administrativa especial de Hong Kong. Centenares de j¨®venes chinos se desplazaron a Ciudad Ho Chi Minh -la antigua Saig¨®n- para alentar a los 60 relevistas que recorrieron 13 kil¨®metros de esta urbe de m¨¢s de ocho millones de habitantes. Ciudad Ho Chi Minh celebra el 33? aniversario de la reunificaci¨®n del pa¨ªs, la entrada del Ej¨¦rcito norvietnamita y la salida de las tropas estadounidenses. Vietnam, que normaliz¨® sus relaciones con China en 1992 y que tambi¨¦n est¨¢ dirigido por un r¨¦gimen comunista, ha tenido un exquisito cuidado en impedir que el trayecto por Ciudad Ho Chi Minh se convirtiera en una protesta contra su gran vecino del norte.