Menos caridad y m¨¢s impuestos

Si los famosos comprometidos con el progreso del Tercer Mundo pagaran los mismos impuestos que los ciudadanos de a pie, los pa¨ªses en desarrollo podr¨ªan contribuir con mucha m¨¢s generosidad a resolver esos problemas y podr¨ªa salvarse, potencialmente, la vida de 5,6 millones de ni?os en 15 a?os, seg¨²n la veterana ONG brit¨¢nica Christian Aid.

La organizaci¨®n, fundada tras la II Guerra Mundial para ayudar a los parias de la posguerra en Europa, se?ala con el dedo a tres famosos, los cantantes Bono y Phil Collins y el piloto de F¨®rmula 1 Lewis Hamilton. Collins y Hamilton pagan sus impuestos en Suiza y Bono, incansable propagandista de la lucha contra la pobreza en ?frica, declara los ingresos que recibe por derechos de autor a partir de una estructura fiscal en Holanda. Si pagaran m¨¢s impuestos, ayudar¨ªan mejor a combatir la pobreza que con conciertos de caridad.

Bono, Phill Collins y Hamilton pagan sus impuestos en para¨ªsos fiscales

El informe tiene como objetivo concienciar a los m¨¢s afortunados sobre la importancia de pagar impuestos y defiende la tesis de que, aunque no son considerados delincuentes porque no hacen nada ilegal, tienen una responsabilidad moral porque recurren a la ingenier¨ªa financiera para evitar el pago de impuestos.

Christian Aid, que se basa en las cifras del trabajo del profesor Raymond Baker, del centro de estudios US Center for International Policy, ataca tambi¨¦n a las grandes asesor¨ªas fiscales y en particular a los cuatro grandes del sector, KPMG, PriceWaterhouseCoopers, Deloitte y Ernst & Young, que ayudan a las multinacionales a ahorrarse cada a?o miles de millones de d¨®lares.

Las compa?¨ªas evitan legalmente el pago de impuestos pero a menudo tambi¨¦n cometen delitos de evasi¨®n fiscal mediante contabilidades cruzadas entre filiales del mismo conglomerado o falsificando los precios. Dos sistemas que, seg¨²n el informe, le cuestan cada a?o al fisco de Estados Unidos 160.000 millones de d¨®lares (m¨¢s de 100.000 millones de euros). Una cantidad equivalente a 1,5 veces el dinero que todos los pa¨ªses ricos dedican a ayudar a los pa¨ªses m¨¢s pobres.

No se olvida tampoco de subrayar la complicidad que tienen los Estados con esas pr¨¢cticas por su tolerancia con los para¨ªsos fiscales. Y se?ala con especial vehemencia al Reino Unido porque, de los 72 para¨ªsos fiscales existentes en el mundo, no menos de 30 est¨¢n situados en pa¨ªses de la Commonwealth.