La contrataci¨®n indefinida cae un 11,7% en el primer trimestre del a?o

El empleo indefinido comienza a sufrir con fuerza los efectos de la desaceleraci¨®n econ¨®mica. En el primer trimestre del a?o, los servicios de empleo registraron poco m¨¢s de medio mill¨®n de contratos fijos, un 11,7% menos que en el mismo periodo de 2007. Son datos del Ministerio de Trabajo recogidos en un informe de UGT sobre contrataci¨®n temporal e indefinida. Tras el m¨¢ximo de 2007, las cifras apuntan a que este a?o se cerrar¨¢ con una ca¨ªda anual en los contratos fijos suscritos.

El descenso de los indefinidos casi duplica el de los temporales entre enero y marzo de 2008. El fin de las bonificaciones a la conversi¨®n de empleos eventuales en fijos, vigentes hasta diciembre de 2006, hizo descender esta modalidad en 2007, aunque la contrataci¨®n indefinida a¨²n logr¨® subir. Pero este a?o, la desaceleraci¨®n ha incidido en la confianza empresarial a la hora de contar trabajadores fijos.

El informe de UGT abunda en las caracter¨ªsticas del llamado mercado laboral dual: un 30% de los trabajadores est¨¢ sujeto a un contrato temporal, con condiciones m¨¢s precarias, y el resto dispone de estabilidad. ?stas son las conclusiones.

- Temporalidad en el sector p¨²blico. El porcentaje de empleo eventual desciende a buen ritmo en el sector privado y muy lentamente en el p¨²blico. Eso implica que la brecha entre ambos segmentos se estrecha. Los 19 puntos de diferencia que hab¨ªa en 1998 se reducen ahora a 5,5. Un 31,1% de los asalariados en la empresa privada es temporal, porcentaje seguido de cerca por el 25,6% de la Administraci¨®n. Los contratos con fecha de caducidad se concentran en los ayuntamientos y las comunidades aut¨®nomas.

- J¨®venes. M¨¢s de la mitad de los trabajadores temporales tienen entre 25 y 39 a?os. El colectivo m¨¢s vulnerable es menor de 20 a?os; casi el 77% dispone de un contrato temporal.

- Hombres y mujeres. Aunque en t¨¦rminos absolutos hay m¨¢s hombres empleados de forma temporal, la tasa de temporalidad es mayor entre las mujeres (32% frente al 28,7%). Las diferencias entre ambos sexos son ahora mayores que en 2007.

- Zona sur. El mapa de la temporalidad es muy heterog¨¦neo. Encabezan la lista Andaluc¨ªa, con un 42,9% de sus asalariados; Murcia (37,6%) y Extremadura (37,5%). En el otro extremo figuran Catalu?a (22,1%), La Rioja (22,7%) y Madrid (23,8%). En cuanto al empleo p¨²blico y el privado sorprenden Pa¨ªs Vasco y Navarra, con tasas de temporalidad notablemente superiores entre los asalariados p¨²blicos respecto a los privados.

- El campo y el ladrillo. La mayor¨ªa de los temporales se localiza en estos dos ¨¢mbitos. En la agricultura es del 61,3%, y en la construcci¨®n, del 51,3%. Las actividades m¨¢s estables son los servicios financieros y la miner¨ªa.

- Menos de seis meses. Casi un tercio de los temporales ha firmado un contrato con su empresa inferior a seis meses. M¨¢s ¨¦xito que esta modalidad cosecha la de obra o servicio, que tiene la ventaja para el empresario de no tener que fijar el periodo para el que requiere al empleado.