Cambiar de h¨¢bitos
Desde 1972, las Naciones Unidas dedican el 5 de junio a celebrar el D¨ªa Mundial del Medio Ambiente, ¨²ltimamente centrado en concienciar acerca de las causas y consecuencias del cambio clim¨¢tico. Si en 2006 y 2007, los temas elegidos fueron la desertificaci¨®n y el deshielo, dos de los graves efectos del calentamiento global, este a?o se nos llama a reflexionar y actuar sobre una de sus causas, el exceso de emisiones de di¨®xido de carbono, el principal gas responsable del efecto invernadero. La mayor parte de estas emisiones procede de la quema de combustibles f¨®siles, sobre todo del petr¨®leo, directamente relacionada con el consumo energ¨¦tico, por lo que el lema de este a?o es Deja el h¨¢bito. Hacia una econom¨ªa baja en carbono, con el que nos anima a utilizar menos el autom¨®vil, separar los residuos o consumir el agua y la energ¨ªa indispensables. Un cambio de h¨¢bitos que no solo nos proporcionar¨¢ un planeta m¨¢s habitable, sino tambi¨¦n una vida m¨¢s saludable, para nosotros y nuestros hijos. Es, seguramente, lo m¨¢s importante que podemos hacer por ellos.
No obstante, la petici¨®n de la ONU tambi¨¦n va dirigida a los gobiernos y a su tendencia a considerar las cuestiones medioambientales como no prioritarias. Es el caso, por ejemplo, del Gobierno valenciano, que solo ha demostrado inter¨¦s por el cambio clim¨¢tico durante los d¨ªas en que el Grupo de Expertos Intergubernamentales de la ONU estuvo reunido en Valencia, en noviembre pasado. Entonces, los 450 expertos asistentes hicieron una urgente llamada a los pol¨ªticos para que actuaran contra este fen¨®meno y alertaron de que no actuar ser¨ªa una "irresponsabilidad criminal". Fiel a sus h¨¢bitos, Camps prometi¨® actuar, pero sus promesas duraron lo que tardaron en apagarse los focos de la rueda de prensa.
Prometi¨® convertir el Museo de las Ciencias en centro de referencia para la divulgaci¨®n del cambio clim¨¢tico, pero todav¨ªa no se conoce ninguna iniciativa al respecto. Como tampoco ha cumplido su anuncio, hecho en Oslo junto al presidente del Panel de Expertos de la ONU, Rajendra Pachauri, un mes despu¨¦s de la Cumbre de Valencia, de crear un parque tecnol¨®gico donde desarrollar las pol¨ªticas de desarrollo sostenible y cambio clim¨¢tico. Un parque que, seg¨²n afirm¨® Camps, "traer¨ªa important¨ªsimas inversiones a la Comunidad Valenciana, de numerosas empresas de todo el mundo". Sin embargo, de momento, ni hay proyecto, ni hay empresas, ni hay inversiones.
Incumplir la palabra dada es un h¨¢bito del presidente de la Generalitat. En marzo de 2007, anunci¨® que crear¨ªa una Comisi¨®n de Expertos en cambio clim¨¢tico, "para que elaboraran propuestas que el Consell pudiera poner en marcha". Ha pasado un a?o y la ¨²nica comisi¨®n que se ha acordado crear ha sido en las Cortes Valencianas. De eso hace seis meses y todav¨ªa no se ha nombrado a sus miembros, ni hay calendario de trabajo. Camps tambi¨¦n prometi¨® que, si volv¨ªa a gobernar, crear¨ªa una Secretar¨ªa Auton¨®mica de Cambio Clim¨¢tico, directamente dependiente del vicepresidente econ¨®mico del Consell. Pero la secretar¨ªa auton¨®mica se ha quedado en una direcci¨®n general, que no depende del vicepresidente, sino del consejero de Medio Ambiente y cuenta con un presupuesto un 30% menor que el del a?o pasado.
El dinero, debe pensar Camps, es para las ocasiones (que a ¨¦l le interesan), como la reciente organizaci¨®n, en Valencia, de una reuni¨®n del Partido Popular Europeo, para hablar sobre cambio clim¨¢tico, de la que no se han conocido propuestas ni compromisos y cuyo ¨²nico objetivo era que Camps proporcionara algo de calor internacional al fr¨ªo entorno dom¨¦stico que envuelve a Mariano Rajoy y, de paso, fortalecer la candidatura de Esteban Gonz¨¢lez Pons a alg¨²n puesto relevante del futuro equipo de Rajoy. Todo ello costeado por el bolsillo de todos los valencianos.
En un d¨ªa como hoy, en el que se nos induce a cambiar de h¨¢bitos, Camps deber¨ªa ser el primero en darse por aludido, hacer examen de conciencia, entender que las promesas est¨¢n para ser cumplidas, hacer prop¨®sito de enmienda y afrontar de verdad un fen¨®meno que provocar¨¢, en el sur de Europa, una reducci¨®n de los recursos h¨ªdricos y de las cosechas, as¨ª como olas de calor y una reducci¨®n del turismo estival. El calor de las c¨¢maras no es lo ¨²nico que debe impulsar a Camps a preocuparse por el calentamiento global.
Francesc Signes i N¨²?ez es diputado auton¨®mico y portavoz de medio ambiente, agua, urbanismo y vivienda del PSPV-PSOE.
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