"A veces me pregunto qu¨¦ pinto yo aqu¨ª"

Joan Capdevila sonr¨ªe. Llueva o haga sol en Neustift, Capdevila (T¨¤rrega, Lleida; 1984) contagia buen rollo a su paso mientras vive la internacionalidad de una manera ciertamente relajada. Atiende a un chino, luego a un italiano y m¨¢s tarde a un periodista andaluz sin dejar de sonre¨ªr. Disfruta cada minuto de la concentraci¨®n y transmite ese estado de ¨¢nimo en el terreno de juego. En ¨¦l han empezado tres goles de Espa?a, dos de ellos decisivos. Contagia optimismo y avisa: Italia no les parar¨¢.

Pregunta. Alguno de sus compa?eros ha dicho que ma?ana quien marque gana. ?Lo cree?

Respuesta. Si es as¨ª, marcaremos nosotros primero.

P. Sorprende tanta seguridad en el mar de dudas del entorno de la selecci¨®n.

"Llevamos dos a?os esperando este partido y no tenemos intenci¨®n de fallar"

"Llegu¨¦ al f¨²tbol casi sin querer, pero me he esforzado mucho para llegar hasta aqu¨ª"

R. Quien se quiera recrear en que llevamos no s¨¦ cu¨¢nto sin ganar, en la maldici¨®n del 22 de junio..., que digan. Yo estoy seguro de que Italia no marcar¨¢ y de que ganaremos por 2-0. Nos va a costar trabajo, pero vamos a ganar a Italia, ya lo ver¨¢. Los italianos no son invencibles.

P. ?Sabe cu¨¢ntos a?os hace que...?

R. [Interrumpe] S¨ª, 88, desde los Juegos de Amberes...

P. No, me refer¨ªa a la ¨²ltima vez que en una competici¨®n oficial Espa?a gan¨® a Italia.

R. ?Claro! 1-0. Gol de Gabri. Estaba Gabri, Xavi, Puyol, Ferr¨®n, muchos de los que est¨¢bamos en aquellos Juegos [Sidney 2000] hemos llegado a la absoluta. Y en Italia estaba Ambrosini, Pirlo... Nosotros llegamos a la final. Yo ya he ganado a Italia, es cierto. Pero no es f¨¢cil. Ellos s¨ª que tienen la suerte de los campeones. Mire, la ¨²ltima vez, antes de que a Luis Enrique le partieran la nariz, Espa?a tuvo muchas ocasiones. Italia ha contado con el factor suerte para llegar a los cuartos. Nosotros nos lo hemos tenido que ganar. A los italianos no les puedes dar por muertos. Conocen el oficio.

P. ?Cambia la medalla de plata por la final en Viena?

R. No; quiero jugar la final, pero no me ponga en esa tesitura. Por ganarla igual la cambio; por jugarla, no.

P. ?Ese optimismo en qu¨¦ se basa?

R. En que estamos jugando muy bien y tenemos un gran equipo y mucha confianza. Sabemos que podemos ganarles. Pero es verdad que para superar al campe¨®n del mundo tenemos que jugar un partido perfecto. Llevamos dos a?os esperando este partido y no tenemos ninguna intenci¨®n de fallar.

P. ?Lo del partido perfecto lo dice por los errores que est¨¢n cometiendo en el marcaje en jugadas a bal¨®n parado?

R. Espero que hayamos aprendido la lecci¨®n. No podemos repetir esos errores.

P. Y juega Luca Toni. ?C¨®mo se le combate?

R. M¨¢xima concentraci¨®n. En las jugadas a bal¨®n parado, m¨¢xima concentraci¨®n.

P. ?Qui¨¦n lo coge?

R. A¨²n no lo sabemos.

P. ?Y si le toca a usted?

R. A estar atento. Lo mejor es mantenerlo bien lejos del ¨¢rea. Y, si hay c¨®rners, ?espero que le toque a otro marcarle! No; en serio, las jugadas de estrategia implican estar muy atento. Los italianos se las saben todas.

P. Usted tambi¨¦n. Lleva diez a?os en la Liga.

R. Es impresionante. A veces lo pienso y no me lo creo. Sin ir m¨¢s lejos, el otro d¨ªa miraba a mi alrededor en la concentraci¨®n y pensaba: "T¨ªo, si son buen¨ªsimos, ?t¨² qu¨¦ pintas aqu¨ª? S¨ª, a veces me pregunto qu¨¦ pinto yo en la selecci¨®n, jugando un Europeo...

P. ?Y eso?

R. Porque estoy harto de ver futbolistas mucho mejores que yo. Pones la tele un s¨¢bado por la tarde y hay jugadores en Segunda B espectaculares que no han tenido la suerte que yo. A m¨ª me han tocado con una varita m¨¢gica. Soy un afortunado, un privilegiado.

P. ?Su padre jug¨® 20 a?os en el T¨¤rrega? Le ver¨ªa jugar.

R. Iba a todos los partidos, en casa y fuera. Tengo im¨¢genes muy buenas: un d¨ªa que le expulsaron, otro que se sent¨® en medio del campo protestando una decisi¨®n del ¨¢rbitro... Mi padre era un fen¨®meno, un caso. Gracias a Dios me he controlado mucho m¨¢s.

P. ?Siempre fue defensa lateral?

R. No, yo era delantero. El Espanyol me fich¨® como extremo. Met¨ªa muchos goles, un a?o marqu¨¦ 54. Pero, poco a poco, me fui para atr¨¢s.

P. ?Sigue siendo perico?

R. No, fui del Espanyol desde peque?o, pero me obligaron a dejar de serlo. Desde dentro las cosas se ven diferentes. Una cosa es ver el club como aficionado y otra pasar la experiencia que me toc¨® vivir a m¨ª. Me hicieron mucho da?o. Le estar¨¦ siempre agradecido porque gracias al Espanyol llegu¨¦ a Primera. Pero le aseguro que no me han regalado nada. Llegu¨¦ casi sin querer, pero luego he puesto mucho esfuerzo para llegar hasta aqu¨ª.

P. Cuando marca, ?qu¨¦ hace con las manos?

R. La T de T¨¢rrega. Va dedicado a los ni?os del campus de mi pueblo. Un d¨ªa me pidieron que les dedicara un gesto y me sali¨® eso. ?Sabe lo mejor que me ha dado el f¨²tbol?

P. No.

R. Tengo una sobrina, de mi hermana, que cuando su madre le pregunta "?qu¨¦ hace el t¨ªo?", ella grita: "?Gol!". ?Y a m¨ª se me cae la baba!