El Gobierno israel¨ª expresa "m¨¢xima preocupaci¨®n"

Silencio casi herm¨¦tico. La prueba de misiles ejecutada ayer por Ir¨¢n fue recibido en Israel sin aspavientos. "Israel no amenaza a Ir¨¢n, pero sus planes nucleares, unidos a su agresivo programa de misiles bal¨ªsticos, es un asunto de la m¨¢xima preocupaci¨®n", se limit¨® a declarar Mark Regev, portavoz del primer ministro, Ehud Olmert.

Hace un mes Saul Mofaz, ministro de Transportes y ex jefe de las Fuerzas Armadas, s¨ª amenaz¨® a Teher¨¢n. Consider¨® Mofaz ineludible el bombardeo de Ir¨¢n porque las sanciones econ¨®micas no estaban causando efectos sobre el r¨¦gimen persa que dirige Mahmud Ahmadineyad.

Olmert, que la semana pasada gir¨® una inusual visita a la central nuclear de Dimona, mont¨® en c¨®lera y prohibi¨® expresamente a sus ministros decir ni p¨ªo sobre tan delicada cuesti¨®n. Olmert desea que el foco no se centre en el asunto nuclear iran¨ª. Sea como fuere, las amenazas no preceden a los bombardeos de instalaciones militares de pa¨ªses ¨¢rabes: Irak en 1981, Siria en 2007. En las calles se habla abiertamente. Y algunos piensan que lo mejor ser¨ªa atacar ahora, con la actual Administraci¨®n de Bush a¨²n en ejercicio, si lo que se pretende es impedir a toda costa la nuclearizaci¨®n del enemigo. En cambio, otros opinan que el ataque conlleva el riesgo de desestabilizaci¨®n de la regi¨®n, y que Israel tambi¨¦n pagar¨ªa un precio.