Municipios y ¨¦xito escolar
Ante la preocupaci¨®n colectiva por los resultados de los ¨²ltimos informes sobre el estado de la educaci¨®n en Catalu?a, que revelan un aumento significativo de los ¨ªndices de fracaso escolar y de abandono formativo m¨¢s all¨¢ de la etapa obligatoria, creo que desde los gobiernos locales deber¨ªamos formular nuevos compromisos y repensar las prioridades. En este sentido, es importante que tengamos la capacidad de poner sobre la mesa y compartir el an¨¢lisis de las transformaciones sociales que se est¨¢n produciendo, para ver c¨®mo afecta al rendimiento escolar de nuestros ni?os y adolescentes, y para valorar cu¨¢l es el impacto que pueden tener las pol¨ªticas de proximidad en la mejora del tejido escolar.
Los espacios culturales municipales de acci¨®n social tienen efecto educativo y cohesionador
Los gobiernos locales son los que, haciendo bandera del principio de subsidiariedad, es decir, primar aquello que est¨¢ m¨¢s cerca, han de liderar la idea que el ¨¦xito escolar se ha de procurar desde dentro y desde fuera de la escuela. Esta reflexi¨®n se produce, adem¨¢s, en un momento que puede ser especialmente oportuno porque se est¨¢ debatiendo el anteproyecto de la futura ley de educaci¨®n de Catalu?a. Y est¨¢ claro que la nueva norma deber¨¢ definir, entre otros muchos aspectos, la funci¨®n de los municipios en la educaci¨®n del pa¨ªs y tendr¨¢ que prever el financiamiento necesario tanto para la acci¨®n educadora que tiene lugar dentro de las aulas como para la que se despliega y existe a su entorno.
Hoy es bien sabido que las escuelas e institutos se esfuerzan para hacer posible una labor educativa que conduzca al ¨¦xito escolar para todos y todas. Pero tambi¨¦n que, cuando a menudo se encuentran en contextos con realidades sociales complejas y desfavorecedoras, este objetivo no est¨¢ s¨®lo en sus manos. Es necesario, por tanto, que puedan contar con la sensibilidad y la cooperaci¨®n de los ayuntamientos y del conjunto de las pol¨ªticas municipales dirigidas a la cohesi¨®n social.
Tambi¨¦n conocemos el papel central de la familia en el apoyo al desarrollo de las capacidades emocionales y morales de los ni?os y ni?as, y las dificultades que tienen para ejercerlo de una manera satisfactoria, porque son muchos y muy profundos los cambios que nuestra sociedad est¨¢ experimentando en t¨¦rminos de vida cotidiana. Es evidente que el modelo de familia tradicional homog¨¦nea que caracteriz¨® el siglo XX ha dejado paso a nuevas formas de diversidad familiar donde los proyectos de vida, la cotidianidad y la gesti¨®n del tiempo se configuran desde unos par¨¢metros bien distintos.
La responsabilidad familiar es exigible y no admite excusas, los hijos e hijas tienen el derecho a tener padres, madres, abuelos, amigos, familias en suma, que la ejerzan con afecto y valores propios. Ahora bien, tambi¨¦n es una evidencia el hecho de que nuestra sociedad no est¨¢ favoreciendo que se puedan producir din¨¢micas familiares con m¨¢rgenes ¨®ptimos de relaci¨®n. Quiz¨¢ baste recordar la propuesta reciente de algunos pa¨ªses europeos de volver a jornadas de 60 horas semanales.
Precisamente por todas estas situaciones, es m¨¢s importante que nunca poner en valor y resaltar el efecto educativo y cohesionador que pueden tener algunos de los espacios culturales de acci¨®n social, de promoci¨®n de la salud y de ocio que gestionamos o subvencionamos los ayuntamientos. Estos ¨¢mbitos de la actuaci¨®n municipal son en s¨ª mismos una oportunidad educativa para reconstruir pol¨ªticas efectivas de acompa?amiento a la escolaridad y para completar huecos que nuestro sistema social provoca. Hay que tenerlo presente si queremos trabajar para la equidad, si pretendemos contribuir a cambiar en positivo una realidad preocupante. No obstante, ¨¦sta no es la ¨²nica actuaci¨®n de pol¨ªtica social que se deber¨¢ potenciar, pero la diferencia entre aplicarla o no puede marcar m¨¢s desigualdades entre ciudadanos y territorios.
Por ello, la Diputaci¨®n de Barcelona ha iniciado un periodo de debate y de reflexi¨®n abierto al conjunto de electos municipales, de t¨¦cnicos locales, de expertos y de representantes de diferentes entidades, para dar apoyo a los municipios en estos nuevos retos de adecuaci¨®n de las pol¨ªticas educativas locales.
Estoy convencida de que es con colaboraci¨®n y corresponsabilidad como tenemos que aprovechar la oportunidad que nos dar¨¢ el nuevo marco legal para desarrollar pol¨ªticas m¨¢s efectivas que ayuden a la acci¨®n educativa de las familias y que permitan construir entornos favorecedores que relacionen y fortalezcan los proyectos educativos de las escuelas e institutos.
Como diputada me gustar¨ªa que este fuera uno de nuestros objetivos prioritarios desde el convencimiento de que el ¨¦xito escolar requiere del esfuerzo de todos los sectores implicados y de las administraciones.
Carme Garc¨ªa Su¨¢rez es presidenta delegada del ?rea de Educaci¨®n de la Diputaci¨®n de Barcelona.
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