Bush recurre al Ej¨¦rcito para llevar ayuda a Georgia

En un intento de restaurar su debilitada autoridad en una regi¨®n estrat¨¦gica del mundo, el presidente de Estados Unidos, George Bush, anunci¨® ayer un vasto esfuerzo humanitario en Georgia, dirigido y ejecutado por el Pent¨¢gono, al mismo tiempo que una iniciativa diplom¨¢tica orientada a forzar a Rusia a retirar sus tropas y garantizar la supervivencia independiente del pa¨ªs invadido y de su actual Gobierno.

Mosc¨² advierte que EE UU debe elegir entre apoyar a Tbilisi o cooperar con Rusia

Bush compareci¨® en la Casa Blanca, escoltado por la secretaria de Estado, Condoleezza Rice, y el secretario de Defensa, Robert Gates, para confirmar que Rusia hab¨ªa incumplido la promesa de alto el fuego hecha el martes al presidente franc¨¦s, Nicolas Sarkozy, y anunciar una serie de medidas destinadas a "demostrar la solidaridad con el pueblo de Georgia y a buscar una soluci¨®n pac¨ªfica a este conflicto".

Esas medidas incluyen "una misi¨®n humanitaria conducida por las Fuerzas Armadas de Estados Unidos". Bush inform¨® de que un primer avi¨®n de carga C-17 viajaba ayer ya rumbo a la capital de Georgia con medicinas y otros productos requeridos por la poblaci¨®n.

"En los d¨ªas siguientes", a?adi¨® el presidente, "utilizaremos aviones y fuerzas navales para entregar m¨¢s ayuda".

"Confiamos en que Rusia asegure que todas las l¨ªneas de comunicaci¨®n y transporte, incluidos los puertos, aeropuertos, carreteras y espacio a¨¦reo permanecen abiertos para la entrega de asistencia humanitaria y para el tr¨¢nsito de civiles", advirti¨® Bush, poco despu¨¦s de mencionar precisamente los puertos y carreteras que en estos momentos mantienen bloqueadas las tropas rusas.

La presencia de personal militar norteamericano en un territorio todav¨ªa sometido a una disputa b¨¦lica puede constituir un elemento a?adido de tensi¨®n, aunque tambi¨¦n es un mensaje a Mosc¨² de que Washington est¨¢ decidido a permanecer junto a su gran aliado.

"Estados Unidos est¨¢ al lado del Gobierno democr¨¢ticamente elegido de Georgia. Insistimos en que la soberan¨ªa y la integridad territorial de Georgia tienen que ser respetadas", record¨® el presidente norteamericano.

Bush anunci¨® tambi¨¦n con ese prop¨®sito el env¨ªo a la zona de la secretaria de Estado, quien, antes de llegar a Tbilisi, har¨¢ una escala en Par¨ªs para coordinar su estrategia con Sarkozy, actual presidente de turno de la Uni¨®n Europea, con quien Bush convers¨® ayer por tel¨¦fono.

Washington se hab¨ªa mostrado hasta ahora bastante esc¨¦ptico sobre el verdadero alcance del acuerdo de paz conseguido por el presidente franc¨¦s el martes, y, aunque Bush expres¨® ayer por fin "un fuerte apoyo" a esa gesti¨®n, la Administraci¨®n norteamericana cree necesaria una nueva iniciativa diplom¨¢tica.

Con ese objetivo viaja Condoleezza Rice a Georgia, donde su simple presencia servir¨¢, adem¨¢s, para estimular a un Gobierno y a una poblaci¨®n con fuerte simpat¨ªa hacia Estados Unidos y que hab¨ªa reclamado desde un principio la ayuda norteamericana contra la invasi¨®n rusa.

Es dudoso, sin embargo, que todos estos gestos, al margen de su efecto emocional, tengan tambi¨¦n relevantes consecuencias pol¨ªticas. El prop¨®sito de Rusia, en cierta medida, ya est¨¢ conseguido: su influencia y liderazgo regional han sido restablecidos.

"Rusia puede retirar sus tropas cuando quiera porque ya ha demostrado que puede entrar en la zona y controlarla con facilidad", opina Joshua Keating, experto en Rusia de la revista Foreign Policy.

George Bush advirti¨® ayer, no obstante, que Rusia "est¨¢ poniendo en riesgo" todos los esfuerzos hechos en los ¨²ltimos a?os "para integrarse en las estructuras diplom¨¢ticas, pol¨ªticas, econ¨®micas y de seguridad del siglo XXI". Fue una forma indirecta de decirles a los dirigentes rusos que Washington impulsar¨¢ una serie de sanciones contra ese pa¨ªs si no retira por completo sus tropas de Georgia.

Entre las sanciones que en estos momentos estudia la Administraci¨®n norteamericana est¨¢n la suspensi¨®n de las maniobras militares que, de forma peri¨®dica, el Ej¨¦rcito de Rusia realiza con el de Estados Unidos y con los de la Alianza Atl¨¢ntica.

Washington ha solicitado ya una reuni¨®n de ministros de esa organizaci¨®n. Fuentes oficiales han mencionado tambi¨¦n la posibilidad de que Mosc¨² sea excluido de las conferencias del grupo de pa¨ªses m¨¢s poderosos de la Tierra, conocido como G-8.

[La reacci¨®n del Gobierno ruso a la advertencia de Bush no se hizo esperar. El ministro de Exteriores ruso, Sergu¨¦i Lavrov, advirti¨® anoche que EE UU debe optar entre su apoyo al actual l¨ªder georgiano y "una asociacici¨®n real" con Rusia, informa France Presse. "Entendemos que EE UU se preocupe por el futuro de su proyecto en Georgia", dijo Lavrov, "pero alg¨²n d¨ªa deber¨¢ elegir entre su apoyo a un proyecto virtual" o mantener su cooperaci¨®n con Rusia].