Fontestad recurre una sanci¨®n de 85.000 euros
La empresa fue condenada por vulnerar la libertad sindical
La direcci¨®n de Fontestad, la mayor empresa manufacturera de c¨ªtricos de la Comunidad Valenciana, declar¨® ayer que recurrir¨¢ la sentencia del pasado 8 de agosto en la que se le condena a pagar 85.000 euros al sindicato UGT por vulnerar el derecho de libertad sindical. UGT acusa a la empresa, que cuenta con 4.000 trabajadores, de impedir el ejercicio de la actividad sindical dentro de su centro de Museros (Valencia) adem¨¢s de violar repetidamente otros derechos de hasta 40 trabajadores de su plantilla, la mayor¨ªa de ellas mujeres.
Desde 2004 Fontestad no tiene comit¨¦ de empresa, asegura UGT
Dolores L¨®pez del Castillo, delegada sindical de UGT en Fontestad, acus¨® ayer a los directivos de la empresa de acoso hacia su persona. "He sido perseguida y avasallada, las encargadas me vigilaban y a las compa?eras que hablaban conmigo las desped¨ªan". Seg¨²n UGT este fue el caso de casi 30 de sus compa?eras. Mientras habla, Dolores, que ahora est¨¢ bajo medicaci¨®n por el estr¨¦s sufrido durante los tres a?os que lleva en la empresa como delegada sindical, mira al suelo. Sigue nerviosa pero, como ella misma confiesa ahora se siente "como una hero¨ªna".
Rosa Ben¨ªtez, secretaria pol¨ªtica de UGT, asegur¨® ayer durante una rueda de prensa que la sentencia interpuesta por el juzgado de lo Social n¨²mero 16 de Valencia es pionera ya que hasta la fecha las indemnizaciones pecuniarias por vulnerar la libertad sindical para las empresas, eran simb¨®licas -menos de un euro- Ben¨ªtez espera que con esta sentencia, que la empresa puede recurrir hasta pr¨®ximo lunes, siente un precedente. Adem¨¢s, seg¨²n Ben¨ªtez, los directivos de la empresa pueden ser acusados de un delito penal, una posibilidad de la que la direcci¨®n de Fontestad asegur¨® no estar al corriente, entre otros motivos porque su equipo de abogados "se encuentra de vacaciones".
"Estoy contenta con el castigo, ?se lo merecen, se lo merecen!". Gracias a la sentencia, Dolores espera no tener que volver a recurrir a acciones decimon¨®nicas como reunirse con sus compa?eras fuera de la empresa para repartirles propaganda sindical e informarles "sobre sus derechos como trabajadores". Y es que, como asegur¨® UGT, desde 2004 Fontestad no tiene comit¨¦ de empresa.
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