?Basta ya! mexicano
En M¨¦xico capital y en otras 55 ciudades del pa¨ªs azteca estaban convocadas anoche -madrugada en Espa?a- grandes movilizaciones ciudadanas contra el horror cotidiano del crimen organizado, el narco, el secuestro, la corrupci¨®n policial, responsable de buena parte del crimen y de la impunidad que cubre a los criminales: casi 3.000 asesinatos de este tipo desde enero (m¨¢s que en todo el a?o anterior) y s¨®lo el 1,7% de los delitos llega a los tribunales.
El ?basta ya! mexicano se desencaden¨® con el secuestro y asesinato de un chico de 14 a?os, hijo de un empresario que hab¨ªa pagado el rescate ignorando con buen criterio a la polic¨ªa, puesto que uniformados eran los asesinos. En M¨¦xico se producen miles de secuestros y muertes violentas al a?o, lo que incluye la de 320 polic¨ªas en 2008, pero en su mayor¨ªa no en cumplimiento del deber, sino como parte del crimen mafioso. Los ¨²ltimos, 12 cad¨¢veres en Yucat¨¢n.
El precipitado de tanta conmoci¨®n es un plan a tres a?os del Gobierno de Calder¨®n, que implica a los tres poderes: el ejecutivo federal y de los Estados, con la purga de la polic¨ªa, la construcci¨®n de c¨¢rceles y un presupuesto extraordinario para seguridad en 2009; el legislativo, con el endurecimiento de las penas contra el secuestro; y el judicial, con la formaci¨®n de magistrados especializados en la lucha contra el nuevo crimen globalizado.
El Acuerdo Nacional para la Legalidad y la Seguridad est¨¢ apoyado por la totalidad de los medios de comunicaci¨®n, entidades ciudadanas, fuerzas econ¨®micas y partidos. El problema no es s¨®lo del Gobierno federal, ya que el 80% de las fuerzas policiales depende de los gobernadores y alcaldes. El problema es estructural. El PRI, con su dictadura perfecta, fabric¨® una legalidad a su servicio, desde la ley a la polic¨ªa, que se revela incompatible con la democracia. Refundar M¨¦xico no es s¨®lo votar cada sexenio.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.