Amigos en Facebook; en la calle, ni verse
Una fiesta para poner cara a los usuarios s¨®lo reuni¨® a 500 de los 6.000 invitados
Quiz¨¢ los amigos del Facebook no son amigos de verdad, o, tal vez, los c¨®digos de la amistad cambian cuando, en vez del cara a cara, la amistad se establece de ordenador a ordenador. Tres usuarios de esta red organizaron anteayer una fiesta para poner cara a sus cibercolegas en la sala la Riviera de Madrid. Pero pocos se animaron a dar la cara que hay detr¨¢s de su nick. De un grupo con 6.000 invitados, tan s¨®lo acudieron unos 500.
La asistencia defraud¨® a quienes fueron a encontrar a sus 'cibercolegas'
"Yo ven¨ªa a encontrarme con Ketty, una chica que conoc¨ª ayer en el Facebook. Estuvimos hablando desde las once de la noche hasta las cuatro. Por m¨¢s que miro no la veo", comentaba Ra¨²l decepcionado. En la fiesta hab¨ªa gog¨®s, un violinista, actividades de pintura e incluso un muro para dejar mensajes. "So many lost cybersouls" ["Demasiadas ciberalmas perdidas"], rezaba uno. Otros aprovechaban para promocionar sus webs.
La idea de traspasar la pantalla fue de Arlette Abouchedid, Jos¨¦ Manuel Grosso y Mar¨ªa ?ngeles Pellisa. "Creamos el grupo en abril con la idea de que personas desconocidas comenzaran una relaci¨®n en Facebook sabiendo que terminar¨ªan conoci¨¦ndose", dec¨ªa ?ngeles agitada. Era la 1.30, y la sala, que parec¨ªa peque?a a la hora de organizar la fiesta, se hac¨ªa grande por minutos. "Creo que el problema ha sido cobrar 10 euros por la entrada. Lo que ten¨ªa que ser un evento especial de los usuarios ha acabado siendo una fiesta normal", criticaba uno de los asistentes. Mirando a la pista nada indicaba que aquello era un encuentro. Peque?os grupos de amigos hab¨ªan venido "por curiosidad" pero nadie buscaba a nadie.
La idea se infl¨® en Internet, y los usuarios se apasionaron. "En menos de un mes ya ¨¦ramos m¨¢s de 2.500 personas". El asunto lleg¨® a tales dimensiones que los tres amigos se dieron cuenta de que ten¨ªan que contactar con la empresa Facebook. "No pod¨ªamos utilizar la marca sin su permiso", afirma Jos¨¦ Manuel Grosso. La compa?¨ªa se neg¨® a dar respaldo a la iniciativa. "No dejaron claro que no ¨ªbamos a recibir ayuda econ¨®mica y que ten¨ªamos que advertir que la fiesta estaba organizada por usuarios del Facebook. Yo lo entiendo. Como no nos conocen no sab¨ªan qu¨¦ tipo de evento ¨ªbamos a organizar".
Al ver el n¨²mero de personas que hab¨ªa en el grupo algunas marcas se propusieron como patrocinadoras. La encargada de marketing de la web de ocio Netro fue una de las que s¨ª asisti¨®. "Descubrimos el evento mirando por Internet y pensamos que era la mejor oportunidad para promocionar la nueva p¨¢gina. Los usuarios de Facebook son j¨®venes y maduros en el manejo de Internet. Pensamos que iba a haber m¨¢s gente, pero est¨¢ siendo una fiesta rara. Quiz¨¢ muchos de ellos prefirieron quedarse chateando con otros amigos virtuales".
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