Esta chica es una pieza de museo

Muchos son los nuevos y j¨®venes rostros que pretenden arrebatar el cetro de la moda a Kate Moss, pero el reinado de la top brit¨¢nica m¨¢s famosa de todos los tiempos no da visos de empezar a palidecer. Para bien o para mal erigida en todo un icono de nuestros tiempos, la Moss va a ser objeto de una exposici¨®n en Par¨ªs enteramente consagrada a las campa?as publicitarias que ha protagonizado en los ¨²ltimos 19 a?os. El objetivo de la muestra, que se inaugurar¨¢ en el Museo de Artes Decorativas en noviembre del pr¨®ximo a?o, pasa por intentar "desentra?ar el fen¨®meno planetario" que encarna esta mujer nacida en Croydon hace 34 a?os desde que Calvin Klein descubriera sus delgadeces para el mundo.

"La exposici¨®n es una oportunidad para pedir a un buen n¨²mero de expertos en imagen y comunicaci¨®n que nos expliquen por qu¨¦ y c¨®mo Kate se ha convertido en alguien a quien absolutamente todo el mundo conoce", ha explicado la directora de la instituci¨®n parisiense, B¨¦atrice Salmon. Objeto de deseo de numerosos artistas que la han inmortalizado en cuadros, esculturas o instalaciones, en los ¨²ltimos a?os la figura de Moss ha reincidido en diversos museos internacionales, con los londinenses a la cabeza. Incluso el venerable Museo Brit¨¢nico incluir¨¢ en una exposici¨®n del pr¨®ximo octubre la pieza que el escultor Marc Quinn realiz¨® sobre la modelo en pose de yoga. Kate Moss est¨¢ m¨¢s de moda que nunca tan s¨®lo tres a?os despu¨¦s de que un esc¨¢ndalo relacionado con las drogas amenazara su longeva carrera. Pillada in fraganti por un tabloide consumiendo coca¨ªna, la reacci¨®n inmediata de muchas grandes firmas -Burberry, Chanel, H&M...- fue la rescisi¨®n de sus lucrativos contratos. La top, capaz de reinventarse como nadie, ingres¨® en una cl¨ªnica de rehabilitaci¨®n, plant¨® a su novio de entonces y compa?ero de juergas, Pete Doherty, y se volc¨® en su resurrecci¨®n profesional. El fichaje como dise?adora por el gigante Topshop confirmaba, meses m¨¢s tarde, el resurgir de su estrella. Hoy sigue trabajando como nunca y se permite exigir 400.000 d¨®lares tan s¨®lo por asistir a un desfile de ba?adores en Brasil.

Moss, Campbell y Bruni, las modelos m¨¢s famosas del mundo (lalistaWIP)