Brasil marca el paso en Suram¨¦rica

Brasil ha reforzado su liderazgo pol¨ªtico y econ¨®mico en la cumbre de Manaos que termin¨® en la madrugada de ayer. El presidente, Luiz In¨¢cio Lula da Silva, ha impulsado un ambicioso corredor fluvial por el Amazonas, ha reforzado el papel del Banco del Sur en medio de la crisis financiera mundial y ha marcado el tono en una reuni¨®n con la izquierda m¨¢s radical de la regi¨®n, encarnada por el venezolano Hugo Ch¨¢vez, el boliviano Evo Morales y el ecuatoriano Rafael Correa. Las buenas artes mediadoras del brasile?o en el plano regional, unidas a los excelentes indicadores internos de su pa¨ªs, le han llevado a consolidarse como un l¨ªder cuya popularidad fuera y dentro de Brasil vive sus horas m¨¢s altas.

Hace poco menos de dos a?os, Lula inici¨® su segundo mandato presidencial salpicado por esc¨¢ndalos de corrupci¨®n que alcanzaron a estrechos colaboradores y miembros de su Gobierno. Tras sus cuatro primeros a?os al frente del pa¨ªs, las cifras macroecon¨®micas, as¨ª como los datos de pobreza y desigualdad, no parec¨ªan mejorar a los niveles prometidos y una ola de decepci¨®n y desconfianza se extendi¨® entre los brasile?os. En el transcurso de los dos ¨²ltimos a?os, el Brasil de Lula ha dado un giro de 180 grados y se ha resituado en el tablero suramericano como el pa¨ªs sin el cual no se toma ninguna decisi¨®n de trascendencia.

En la cumbre regional convocada en la capital amaz¨®nica de Manaos, Lula respald¨®, junto a sus hom¨®logos de Venezuela, Ecuador y Bolivia, la puesta en marcha del Banco del Sur, un proyecto impulsado hace menos de dos a?os por Hugo Ch¨¢vez durante una Cumbre de l¨ªderes del Mercosur y que tiene por objeto dotar a la regi¨®n de una entidad de cr¨¦dito propio, que acabe con su actual dependencia del Fondo Monetario Internacional (FMI) y pueda ayudar a los pa¨ªses a hacer frente a la actual crisis econ¨®mica.

En la misma reuni¨®n amaz¨®nica Lula tambi¨¦n perfil¨® a la ciudad de Manaos como el futuro centro neur¨¢lgico de los corredores terrestres y fluviales que conectar¨¢n el oc¨¦ano Pac¨ªfico con el Atl¨¢ntico, cruzando de oeste a este el subcontinente, y que suponen un fara¨®nico proyecto de integraci¨®n territorial en Suram¨¦rica. El trazado de estas v¨ªas de transporte en la inexpugnable regi¨®n amaz¨®nica tiene relaci¨®n con el ambicioso Plan de Aceleraci¨®n Econ¨®mica (PAC) lanzado por Lula en su pa¨ªs, que pretende desarrollar econ¨®micamente el Amazonas y que en buena medida desencaden¨® la tempestuosa salida de la anterior ministra de Medioambiente, Marina Silva. Paralelamente, la puesta en marcha de estos nuevos corredores supondr¨¢ para Brasil la cuadratura del c¨ªrculo en sus relaciones comerciales con Asia, ya que reducir¨¢ de 15.000 a 9.000 millas n¨¢uticas la distancia que deber¨¢n recorrer los buques brasile?os para transportar soja hasta las costas asi¨¢ticas.

La reciente Cumbre de la Uni¨®n de Naciones Suramericanas (Unasur) en Santiago de Chile supuso el bautismo de fuego de Lula como l¨ªder imprescindible en la resoluci¨®n de conflictos regionales. El mandatario puso paz en una Bolivia al borde del incendio pol¨ªtico y social, mientras su hom¨®logo venezolano abogaba una vez m¨¢s por la l¨ªnea dura contra los "enemigos" de la revoluci¨®n bolivariana. El secreto del ¨¦xito de Lula es mucho m¨¢s simple de lo que muchos piensan y lo desmarca definitivamente del siempre d¨ªscolo Hugo Ch¨¢vez: moderaci¨®n y discreci¨®n.

Con discreci¨®n Lula se mueve como pez en el agua en el plano internacional, sin excentricidades ni estridencias, aunque dejando siempre presente el peso espec¨ªfico que Brasil tiene a escala planetaria. Con moderaci¨®n ha logrado tener bajo control en su pa¨ªs a una oposici¨®n que no ha conseguido hacerle sombra desde las ¨²ltimas elecciones presidenciales.

Seg¨²n una encuesta del instituto brasile?o Sensus, del pasado septiembre, Lula es el l¨ªder mejor valorado en Brasil desde el regreso de la democracia, a mediados de los ochenta. Un 68,8% aprueba la gesti¨®n del actual Gobierno, y el 77,7% valora el desempe?o personal de Lula.

La luna de miel que el mandatario vive con los brasile?os se debe en gran medida a los buenos resultados que arrojan los indicadores econ¨®micos del pa¨ªs (una previsi¨®n de crecimiento del PIB para 2008 del 5,5%), la ca¨ªda del desempleo y la reducci¨®n de la desigualdad a trav¨¦s de la puesta en marcha de programas sociales, como el Beca Familia, que ayuda a salir adelante a unos 45 millones de brasile?os considerados pobres.

Un estudio publicado el pasado agosto por la Fundaci¨®n Getulio Vargas concluye que el 52% de los brasile?os ya pueden ser incluidos dentro del grupo social considerado clase media, es decir, aquellos que perciben una renta mensual superior a 436 euros. En el mismo estudio se muestra que desde que Lula est¨¢ al frente del pa¨ªs, el ¨ªndice de miseria ha ca¨ªdo del 34,96% al 25,16%.

No s¨®lo una buena gesti¨®n pol¨ªtica est¨¢ detr¨¢s del momento de euforia que vive actualmente Brasil. Al ¨¦xito del l¨ªder brasile?o tambi¨¦n ha contribuido el hallazgo petrol¨ªfero en los litorales de S?o Paulo y R¨ªo de Janeiro, que ha puesto a Brasil en la primera l¨ªnea de los grandes pa¨ªses productores de crudo. Hasta hace poco, Brasil ten¨ªa unas reservas estimadas en 20.000 millones de barriles, pero con el descubrimiento frente a las costas de R¨ªo y S?o Paulo del campo petrol¨ªfero bautizado como Carioca, estas reservas podr¨ªan dispararse hasta los 53.000 millones de barriles, colocando a Brasil en la novena posici¨®n de la lista mundial de pa¨ªses productores de crudo. Pese a los buenos augurios, el gigante suramericano no quiere centrar al 100% su pol¨ªtica energ¨¦tica en el petr¨®leo. Por ello tambi¨¦n lidera el grupo de pa¨ªses productores de biocombustibles.