Los tres tenores en versi¨®n sacra

"Nuestro objetivo es que la m¨²sica muestre la belleza de la espiritualidad. Admitamos que esto no es San Pablo de camino a Damasco: no conocemos casos de repentinas conversiones despu¨¦s de escucharnos cantar. Pero al menos s¨ª hemos conmovido a personas que quiz¨¢s antes no ten¨ªan inter¨¦s por Dios y ahora empiezan a hacerse preguntas sobre el significado de nuestras letras".

Con esta declaraci¨®n de intenciones, tres sacerdotes irlandeses de beat¨ªfica mirada y potente voz asaltar¨¢n hoy la Parroquia San Jer¨®nimo el Real con m¨¢s de 12.000 vatios, focos, micr¨®fonos y altavoces para presentar en un concierto exclusivo hoy al mediod¨ªa -acceso s¨®lo con invitaci¨®n- su ¨¢lbum de deb¨², llamado como ellos, The Priests.

Por contrato, no act¨²an en sitios que vayan en contra de sus convicciones

Los hermanos Martin y Eugene O'Hagan y su amigo de la infancia David Delargy aseguran que se sienten m¨¢s c¨®modos cantando en una bas¨ªlica -como han hecho en su Irlanda natal o en San Pedro invitados por el Vaticano- que en cualquier otro lugar. Ya desde el instituto se dieron cuenta de sus dotes musicales y de la inexcusable llamada de Dios, primero para que trabajasen para ¨¦l y segundo para ficharles como cantantes. Desde que terminaron su formaci¨®n eclesi¨¢stica compaginan las misas con los conciertos a peque?a escala. "Nosotros provenimos de una infancia dura en el contexto de la Irlanda de los a?os 60, dividida por un clima de hostilidad y sospecha permanente. Nos refugiamos en la m¨²sica y descubrimos que era una forma de superar todo aquello. Ahora nos gusta llevar un poco de esa esperanza a otros p¨²blicos que pueden necesitarla", explica David Delargy.

Casi de casualidad, los hermanos (tenores) y su compa?ero de aventuras (bajo) grabaron una maqueta con ayuda de un m¨²sico irland¨¦s, quien la envi¨® a la multinacional Sony, que a su vez tuvo que convencerles para que sacaran un disco. Por contrato se niegan a dos cosas: cantar en sitios que vayan en contra de sus convicciones y priorizar la carrera musical por encima de sus tareas religiosas. De hecho, gran parte de las ganancias que obtengan de la venta del disco -que incluye cl¨¢sicos como Ave Maria, Holy Night, Pie Jesu, Panis Angelicus e incluso Hacia Bel¨¦n- se destinar¨¢ a fines sociales, mientras se organizan como pueden con otros sacerdotes para que durante la promoci¨®n y conciertos les hagan las "suplencias" en sus peque?as parroquias irlandesas.

"Lo m¨¢s interesante de este disco es un fen¨®meno que hemos observado en Youtube, donde subimos v¨ªdeos con nuestras canciones. Resulta que mucha gente atea o agn¨®stica escribe para comentar que aunque no tienen fe, esta m¨²sica les ha movido por dentro", advierten con orgullo.

Entre sus pr¨®ximos retos se encuentra acercarse a¨²n m¨¢s a creyentes e incr¨¦dulos e incluso confesiones distintas con el lenguaje universal de la m¨²sica. "Hace poco cantamos en una sinagoga jud¨ªa de Belfast, donde descubrimos que los cantos gregorianos se parecen mucho a lo que interpretan durante la liturgia jud¨ªa. El islam reconoce a Jes¨²s como profeta. ?Por qu¨¦ no cantar en una mezquita?", sugieren los hermanos O'Hagan.