Locos por las c¨¢maras
Cada vez que hay una c¨¢mara cerca, se vuelve loco. Sarkozy entendi¨® que eso era lo que le pasaba al copresidente de los Verdes, Daniel Cohn-Bendit, cuando el martes critic¨® en Estrasburgo su gesti¨®n al frente de la presidencia de la Uni¨®n Europea. Curioso comentario en un personaje que desprecia las maneras de la vieja pol¨ªtica -proyecto, programa, medidas- y que ha convertido su carrera en una vertiginosa sucesi¨®n de iniciativas para ser mimado por las c¨¢maras. Para llenar as¨ª el mundo con su imagen decidida de hombre de acci¨®n.
En el Chad detuvieron a dos periodistas y tres azafatas, y hacia all¨ª vol¨® raudo y veloz para liberarlos (clic). Tuvo problemas sentimentales con su ya ex mujer y supo seducir enseguida a una hermosa cantante (clic). Que hay un poco de l¨ªo entre georgianos y rusos en Osetia del Sur y Abjazia, no se diga m¨¢s: all¨ª acudi¨® como l¨ªder intr¨¦pido y resuelto (clic). ?Hay crisis? Pues reuni¨®n de los cuatro, reuni¨®n de los ocho, reuni¨®n de los veinte (m¨¢s dos): clic, clic, clic. Ya se puede decir etc¨¦tera.
En cuanto a Daniel Cohn-Bendit, el m¨ªtico Dany el Rojo de Mayo del 68, el travieso l¨ªder estudiantil reciclado en riguroso defensor de causas (casi) perdidas, ?se vuelve de verdad loco por salir en los telediarios? El otro d¨ªa, en el Parlamento Europeo, intent¨® simplemente no hacer el rid¨ªculo. Antes de que tuviera que intervenir, lo hab¨ªan hecho los presidentes del grupo de los Socialistas Europeos, del Partido Popular Europeo y de los liberales. Y todos ellos se hab¨ªan rendido a los pies de Sarkozy. ?Un presidente europe¨ªsta!, ?un l¨ªder pragm¨¢tico!, ?un tipo lleno de creatividad y entusiasmo!, clamaron uno detr¨¢s de otro.
Frente a semejante fascinaci¨®n por las gestas de Sarkozy, Cohn-Bendit critic¨® su silencio ante el atropello de los derechos humanos en China y Rusia. Fue entonces cuando el presidente franc¨¦s tuvo un ataque de perplejidad. Record¨® que hab¨ªa almorzado con Cohn-Bendit hasta tres veces en el Eliseo y, dijo, se mostr¨® entonces "cort¨¦s, tolerante y simp¨¢tico". ?C¨®mo pod¨ªa criticarlo ahora? ?Por qu¨¦ caer en tama?o desprop¨®sito? Y le vino la iluminaci¨®n, y sentenci¨®: hay gente que se vuelve loca en cuanto hay una c¨¢mara de televisi¨®n a la vista (clic).
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