Mejorar la lengua

Ma?ana soleada en pleno invierno, los gorriones piando, cafelito con leche en el bar de siempre y lectura del peri¨®dico, sin prisas. Y leyendo tambi¨¦n Ya s¨®lo habla de amor, de Loriga, que lo prometido es deuda. Y, de repente, paseando, el letrerito en la tienda de ultramarinos: "Se traspasa, urjente". Bueno, no todo iba a ser perfecto en la ma?ana dominical. S¨®lo tres palabras, una falta, 33.33%, si no me equivoco. No es mucho, me consuelo a m¨ª mismo. Claro que no es mucho para un escueto cartel. Ser¨ªa mucho en una columna y demasiado en una novela. Inadmisible en un relato corto.

No me extra?a que algunos miembros de la RAE est¨¦n desde hace alg¨²n tiempo valorando la cuesti¨®n de eliminar la ge o la jota y la be o la uve, ya que, por lo que se ve, a muchos les es extremadamente complicado discernir cu¨¢ndo deben emplear una u otra letra.

No pasa nada por poner "urjente", total la gente se entera de lo que el escritor ha querido decir. Pero al leer el letrero, uno recibe como un pu?etazo en el rostro, o no, o a lo mejor es que yo pido demasiado a la gente.

Y, ?qu¨¦ me dicen de los mensajitos por m¨®vil o de los chats? Cuando los profesores sacamos a los alumnos a la pizarra muchos alumnos empiezan a escribir en ella como si enviaran un SMS. Y cuando les paras los pies, te miran como si los que llevaran raz¨®n fueran ellos.

No obstante, esperanzas, haberlas haylas. La serie de Potter tira por tierra la teor¨ªa de que los j¨®venes no leen. Es de suponer que ese tipo de Literatura les har¨¢ de puente para leer despu¨¦s a Reverte, a Mankel, a Juan Madrid y a Mars¨¦.

Espero que alquilen pronto la tienda de ultramarinos. Aunque s¨®lo sea por la desaparici¨®n del cart¨®n del "urjente".