Negar el acoso escolar

La Audiencia de Madrid ha sentado un importante precedente en el tratamiento jur¨ªdico del acoso escolar al considerar que el colegio en el que se produjeron los malos tratos a un ni?o tiene responsabilidad en lo ocurrido. Cuando un escolar sufre acoso persistente durante m¨¢s de dos a?os por parte de un grupo de compa?eros, y los malos tratos son incluso grabados en v¨ªdeo por los agresores, resulta muy dif¨ªcil sostener, como hizo la direcci¨®n del Colegio Suizo de Alcobendas (Madrid) que se trata de un incidente puntual. La Audiencia considera que el colegio incurri¨® en una "falta de diligencia palpable", por lo que le condena a indemnizar a la familia con 30.000 euros.

Con este fallo, la Audiencia corrige la sentencia del Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 1 de Alcobendas, que hab¨ªa exculpado al centro aceptando su tesis de que no se hab¨ªa producido acoso. El fallo de la Audiencia estima que dif¨ªcilmente puede ser considerado un incidente puntual entre ni?os una agresi¨®n en la que los agresores han tenido la previsi¨®n de dotarse de una videograbadora. La actitud que el colegio ha mantenido desde el primer momento denota una gran falta de sensibilidad hacia un problema que no es menor. El hecho de que ni la profesora, ni la tutora del grupo, ni el director requisaran la c¨¢mara con la que se grab¨® la agresi¨®n es considerado por la Audiencia como un indicador de pasividad. Resulta especialmente chocante que cuando el ni?o llam¨® a su padre y ¨¦ste se present¨® en el colegio y se hizo con la c¨¢mara, la respuesta de la direcci¨®n fuera negar la evidencia e incluso amenazar a la familia con acciones legales.

El acoso escolar es un comportamiento que, incluso en los casos en que los agresores tienen una alta capacidad de disimulo, dif¨ªcilmente puede pasar inadvertido a un equipo docente sensible y atento. Porque, como se ha acreditado en este caso, la persecuci¨®n suele ser persistente y con frecuencia practicada en grupo. Precisamente porque la finalidad del acoso es la humillaci¨®n de la v¨ªctima, suele tener un cierto grado de publicidad. No hay peor ciego que el que no quiere ver, y negar la evidencia es la peor forma de afrontar esta grave problem¨¢tica. Porque, ?qu¨¦ conclusiones pueden sacar los ni?os con tendencias agresivas cuando observan que los responsables de su colegio niegan o quitan importancia a una agresi¨®n que ha sido incluso grabada?