Desaliento

?stos son los peores d¨ªas del a?o. Los ingleses lo tienen bastante estudiado. Ahora mismo, incluso en a?os buenos, se juntan los gastos aplazados de diciembre, los gastos inaplazables de enero, los resfriados y las gripes, el fr¨ªo y las noches largas. En un a?o como ¨¦ste existen numerosos motivos adicionales para el desaliento: no hace falta que nos extendamos sobre eso, las cartas est¨¢n a la vista.

Seg¨²n el Daily Telegraph de Londres, el d¨ªa malo, mal¨ªsimo, fue ayer, porque adem¨¢s de todo era lunes. Es una forma de mirarlo: quienes trabajamos los domingos no somos tan severos con el lunes.

La Sexta eligi¨® el te¨®rico peor d¨ªa del a?o para presentar la nueva versi¨®n, corregida y aumentada, de S¨¦ lo que hicisteis. Me pareci¨® una iniciativa discutible. Patricia Conde y ?ngel Mart¨ªn seguir¨ªan siendo graciosos (y un portentoso ejemplo de eso que llaman "qu¨ªmica") en cualquier formato, y el resto del equipo est¨¢ ya perfectamente rodado y funciona solo. Ir alargando una idea, sin embargo, suele significar que no se dispone de otras, y eso es mal s¨ªntoma. S¨¦ lo que hicisteis es un excelente programa peque?o. No deber¨ªa convertirse en un ¨®mnibus mediocre. Tampoco hace falta. Ya han ganado su particular guerra de sobremesa con Telecinco, que, tras las desgracias con Las gafas de Angelino y Xq no te callas?, se ha visto obligada a adelantar los cr¨ªmenes con paella del inefable Est¨¢ pasando. Eso tambi¨¦n demuestra que faltan ideas. Antena 3, que suprime Lalola, flojea desde hace tiempo. TVE, por su parte, no necesita ideas para la siesta: seg¨²n van las cosas, Amar en tiempos revueltos acabar¨¢ durando much¨ªsimo m¨¢s que la posguerra.

?stos son los peores d¨ªas, dec¨ªamos. Hoy, en cualquier caso, hemos superado el lunes y llegado al martes. Que no es poco, con lo que est¨¢ cayendo. Seguir¨¢n las malas noticias, pero, salvo tragedia de tono apocal¨ªptico, algo habr¨¢ de bueno: George W. Bush no dormir¨¢ nunca m¨¢s en la Casa Blanca ni ocupar¨¢ nunca m¨¢s el Despacho Oval. Quedar¨¢n muchos mandamases in¨²tiles y perversos. Bush, al menos, ya no.