S¨®crates, bajo el fuego
El primer ministro portugu¨¦s niega las acusaciones que le implican en un supuesto caso de cobro de comisiones
Los ataques y acusaciones proliferan en los medios de comunicaci¨®n, a pesar de que las pruebas no asoman con igual intensidad. El objetivo es Jos¨¦ S¨®crates, primer ministro de Portugal, a quien acusan de haberse embolsado comisiones en una vieja licitaci¨®n de un centro comercial cerca de Lisboa. Estamos en a?o de elecciones y hay quien cree que la campa?a ya ha empezado.
El ¨²ltimo aguijonazo lo han dado el canal de televisi¨®n TVI y Visao y S¨¢bado, los dos principales semanarios, que aseguran que el procurador (fiscal) general de la Rep¨²blica ha recibido una misiva de la justicia brit¨¢nica que compromete al primer ministro en un caso de soborno y corrupci¨®n. La carta rogatoria dice tener sospechas de que S¨®crates pudo haber "solicitado, recibido o facilitado pagos" en el curso de la licitaci¨®n del Freeport Outlet Alcochete, el mayor centro comercial de Europa de tiendas de descuento, inaugurado en el estuario del Tajo en septiembre de 2004.
El poder judicial en Portugal se mueve a paso de tortuga, seg¨²n la fiscal¨ªa
S¨®crates se dirigi¨® ayer al pa¨ªs para "repudiar" las noticias publicadas y afirmar con rotundidad: "Con campa?as negras e insidias no me derrotar¨¢n". El primer ministro aludi¨® a "fugas de informaci¨®n selectivas y manipuladas" para atacarle pol¨ªticamente, asegur¨® que la licitaci¨®n del centro comercial Freeport se hizo conforme a la ley, y asegur¨® estar preparado para afrontar "una prueba de resistencia".
S¨®crates era ministro de Medio Ambiente del Gobierno que autoriz¨® en 2002 a la compa?¨ªa brit¨¢nica Freeport Leisure la construcci¨®n del centro comercial en los l¨ªmites de una zona protegida. La falta de pruebas en aquella ¨¦poca dej¨® el asunto en el olvido, hasta que, a?os despu¨¦s, ha saltado de nuevo a la palestra. S¨®crates ya no es un simple ministro, sino el jefe de Gobierno que aspira en las pr¨®ximas semanas a la reelecci¨®n al frente de la secretar¨ªa general del Partido Socialista y a revalidar el cargo de primer ministro tras las generales previstas para oto?o.
"Ante la alarma social", la fiscal¨ªa de la Rep¨²blica, que dirige Fernando Pinto Monteiro, emiti¨® ayer un comunicado de respuesta a la carta de la Oficina de Fraudes Graves de Londres, recibida el 19 de enero, en la que advierte que hasta la fecha no tiene indicios que permitan acusar a nadie. Asegura que el caso Freeport est¨¢ bajo investigaci¨®n desde septiembre de 2008 y que, en este momento, la polic¨ªa judicial rastrea diversos flujos bancarios.
Pese al impacto medi¨¢tico, el caso Freeport no es el m¨¢s relevante de los que se acumulan en el poder judicial portugu¨¦s, que se mueve a paso de tortuga, seg¨²n ha admitido el propio procurador Pinto Monteiro. Este a?o ser¨¢ particularmente exigente para la justicia, ha declarado Mar¨ªa Jos¨¦ Morgado, adjunta del procurador general. Esta mujer de 57 a?os dirige el grupo de investigaci¨®n de la fiscal¨ªa m¨¢s importante. El martes, una quincena de fiscales y agentes de la polic¨ªa, encabezados por un juez de instrucci¨®n, se presentaron en la sede del Banco Privado Portugu¨¦s (BPP) con un mandato de busca y aprehensi¨®n de documentos. Cumpl¨ªan ¨®rdenes de Morgado. El BPP est¨¢ intervenido por el Estado desde el pasado 24 de noviembre.
Otro banco, el Banco Portugu¨¦s de Neg¨®cios (BPN), est¨¢ siendo investigado despu¨¦s de que el Gobierno decretara en noviembre su nacionalizaci¨®n. Jos¨¦ Oliveira e Costa, ex presidente de la entidad, es el primer banquero de relieve que ha sido detenido en Portugal. La justicia investiga al BPN y BPP por abundantes irregularidades, que incluyen fraude, lavado de dinero en para¨ªsos fiscales, evasi¨®n fiscal y falsificaci¨®n de documentos.
Sin duda, el caso m¨¢s grave sin resolver es el de los abusos sexuales en la Casa P¨ªa, un internado que acoge a muchachos marginados o hu¨¦rfanos. El esc¨¢ndalo sali¨® a la luz en noviembre de 2002, cuando se descubri¨® una red de pedofilia en la que est¨¢n implicados nombres conocidos de la pol¨ªtica, la televisi¨®n y el deporte.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.