"?Cu¨¢ntos van a caer, cu¨¢ntos?"
Los directores de las tres grandes vueltas ciclistas se muestran preocupados por la repercusi¨®n que pueda tener la resurrecci¨®n de la Operaci¨®n Puerto
Christian Prudhomme quer¨ªa contar c¨®mo, desde una visi¨®n m¨¢gica, m¨ªtica, desde la pasi¨®n que le transmiti¨® Luis Oca?a, quer¨ªa seguir construyendo el Tour en el siglo XXI; Angelo Zomegnan, su apasionado proyecto para un Giro resucitado; Javier Guill¨¦n, de la necesidad de que los aficionados volvieran a identificarse con la Vuelta y sus h¨¦roes, de una camiseta roja en vez de un maillot dorado para el l¨ªder, del regreso a la primavera, a abril de una carrera desplazada al oto?o en 1995 -"una blasfemia contra el ritmo hist¨®rico del ciclismo", dijo Zomegnan-; los tres directores de las grandes vueltas se juntaron ayer en Madrid, en el Foro Ferr¨¢ndiz del diario As, y terminaron hablando de lo que menos les apetec¨ªa, de la crisis, de todas las crisis, de la econ¨®mica, de la de credibilidad, de la Operaci¨®n Puerto, del dopaje.
"?Cu¨¢ntos van caer, cu¨¢ntos?", se preguntaban, preguntaban convencidos de que la citaci¨®n de la fiscal¨ªa antidopaje italiana a Alejandro Valverde no ser¨ªa el ¨²ltimo movimiento de la partida. Y a continuaci¨®n, como en los momentos m¨¢s candentes de la Operaci¨®n Puerto, empezaban a conjeturar, a tratar de resolver el puzle incompleto, ligando apodos con potenciales corredores sospechosos. Les guiaba la necesidad de prevenir, de evitar que en sus carreras participaran corredores con la capacidad de mancharlas, de ensuciar los maillots publicitarios de los l¨ªderes con sombras de dopaje. Apoyaron todo tipo de medidas para que se llegara hasta el fondo en la Operaci¨®n Puerto -"a grandes males, grandes remedios", dijo Zomegnan, como aqu¨¦l que contaba que gato blanco o gato negro da igual, lo importante es que cace ratones-, aunque ninguno de los tres quiso, sin embargo, mojarse y adelantar si sus carreras aceptar¨¢n la participaci¨®n de Valverde, a la espera de los acontecimientos en Roma.
Mientras, en Mallorca, Alejandro Valverde continuaba tranquilo sus entrenamientos, repitiendo a todos sus compa?eros y directivos que no puede haber nada contra ¨¦l, que estaba abierto a acudir donde le llamaran para defenderse de cualquier acusaci¨®n. Con ese fin, su equipo, el Caisse d'?pargne, ha enviado una carta a las oficinas del Comit¨¦ Ol¨ªmpico Italiano (CONI) indic¨¢ndole la direcci¨®n postal del ciclista murciano. "As¨ª", explican sus dirigentes, que no quieren entrar a discutir si es leg¨ªtimo o legal que se extraiga una muestra de ADN en un control antidopaje en el que no se advierte al sujeto de esa posibilidad, "le podr¨¢n citar como se debe hacer, no con una llamada telef¨®nica y un email a un administrativo del equipo".
Dentro de la estrategia para revitalizar el Tour, su due?o hab¨ªa decidido que el diario L'?quipe no volviera a investigar asuntos de dopaje y a lograr noticias que le obligaran ocupar la primera p¨¢gina con el asunto. Pero la realidad, y los designios judiciales, es m¨¢s obstinada que sus deseos, y el director de la carrera tuvo que adoptar tono de r¨¦quiem. "No es un problema econ¨®mico", dijo. "Los patrocinadores los tenemos firmados desde oto?o. Es el ciclismo el que est¨¢ en peligro, el que sufre y el que paga. Es indispensable que el sue?o se mantenga, y el talento de un corredor es su coraje; su esencia, su capacidad de llegar al l¨ªmite, y el dopaje rompe ese encantamiento. En un mundo en crisis se necesita so?ar". Similar fue el discurso de Zomegnan, quien teme m¨¢s al dopaje que a los efectos de la crisis econ¨®mica sobre su carrera. "La crisis econ¨®mica es coyuntural, y las empresas volver¨¢n a anunciarse en el ciclismo, que tiene el mejor ratio visibilidad-coste", dijo el director del Giro, muy italiano, muy dram¨¢tico, "pero, ahora, ?con qu¨¦ cara voy a un patrocinador a pedirle que patrocine un maillot en 2010 si los ¨²ltimos a?os se lo han ensuciado los corredores?". Javier Guill¨¦n cont¨® que ayer mismo ten¨ªa una reuni¨®n con un posible patrocinador de la Vuelta, pero se tem¨ªa lo peor. "Los que se acercan buscan asociarse a los valores del ciclismo", dijo, "pero si damos a entender que son mentira, se van. Y estamos en una situaci¨®n ag¨®nica".
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