Shakespeare lee a Lope
Fuenteovejuna ha despertado tantas pasiones como el f¨²tbol. En el montaje ruso de 1919, era una obra marxista y revolucionaria. Durante el franquismo, pas¨® por ser nacionalista y conservadora. En disputas tales, se perdi¨® su esencia", dice Laurence Boswell mientras aguardamos el almuerzo en una cafeter¨ªa pr¨®xima al Teatro Adolfo Marsillach de San Sebasti¨¢n de los Reyes (Madrid). "Es una obra pol¨ªtica, pero no ideol¨®gica, sobre c¨®mo debemos tratarnos los unos a los otros, y sobre la naturaleza del amor. ?Debemos ser altruistas o ego¨ªstas? ?Trabajar en nuestro provecho o en el del grupo? En un extremo de esta escala de valores est¨¢ el Comendador, que destruye una boda por gozar a la novia, y en el otro, Frondoso, dispuesto a dar su vida por ella, y trescientas personas m¨¢s que mantienen su respuesta aunque los torturen. El Comendador acaba solo, rodeado de enemigos, y la novia, festejada por todos. Esto puede parecer simple, pero tiene una lectura profunda".
"Es una obra pol¨ªtica, pero no ideol¨®gica, sobre c¨®mo debemos tratarnos unos a otros, y sobre la naturaleza del amor"
Boswell, director asociado de la Royal Shakespeare Company (RSC), es el r¨¦gisseur no hispanohablante que mejor conoce nuestros cl¨¢sicos, y el Fuenteovejuna que preestrena hoy en San Sebasti¨¢n de los Reyes, su decimocuarto montaje de una obra del Siglo de Oro. "El origen de la crisis financiera actual es la codicia", prosigue. "Los especuladores que la precipitaron son nietos de las pol¨ªticas avarientas de Thatcher y de Reagan. En 1984, George Orwell predijo que un d¨ªa lo obsceno pasar¨¢ por bueno. Ya ha sucedido. En Fuenteovejuna, Lope nos pone ante un dilema, y apunta una salida: la generosidad. Tambi¨¦n el director de escena debe escoger entre canalizar las ideas del grupo o imponer las suyas".
Durante el ensayo, se respira un clima acorde con el esp¨ªritu de la obra. Alberto Jim¨¦nez, Lidia Ot¨®n, Gerardo Malla, Mario Vedoya, Crist¨®bal Su¨¢rez, ?scar Zafra y el resto del reparto parecen comprometidos de verdad. El trato de Boswell, su cercan¨ªa, y la de Rodrigo Arribas y Alejandra S¨¢enz, j¨®venes actores que llevan las riendas de la productora Rakat¨¢, soplan a favor.
"?sta es, sencillamente, la obra que Clifford Odets hubiera querido escribir. Y la frase 'Fuenteovejuna lo hizo', el Yes, we can de su tiempo", escrib¨ªa un cr¨ªtico norteamericano para contextualizar el Fuenteovejuna en ingl¨¦s que Boswell estren¨® el oto?o pasado en Ontario. Fue el espect¨¢culo m¨¢s celebrado del Stratford Shakespeare Festival canadiense, coto de directores brit¨¢nicos: "Lope eclipsa a Shakespeare", titul¨® otro cr¨ªtico una extensa rese?a, dedicada tambi¨¦n al Hamlet de Adrian Noble.
"Fuenteovejuna es la comedia de Lope m¨¢s conocida fuera de Espa?a, pero tiene una docena de calidad parecida", opina Boswell. "Entre ellas, Lo fingido verdadero, donde Gin¨¦s, actor, autor y empresario, enamorado de la primera actriz de su compa?¨ªa (que no le corresponde porque quiere a otro c¨®mico), escribe una obra en la que ella debe insultar a su amante y amarle a ¨¦l. Mientras la ensayan, los actores, descontentos, discuten sus personajes con Gin¨¦s, y cuando se ponen a representarla, improvisan otro texto que les parece mejor. ?Yo cre¨ªa que el primero en hacer algo as¨ª fue Pirandello trescientos a?os despu¨¦s!".
Lo malo de los cl¨¢sicos es que apenas dan trabajo a las actrices, mucho m¨¢s numerosas hoy que los actores. En Fuenteovejuna, por ejemplo, por cada personaje femenino aparecen cuatro hombres y medio. En las obras de Shakespeare, escritas para compa?¨ªas donde los varones hac¨ªan todos los papeles, la desproporci¨®n es mayor. No parece justo fomentar desequilibrio laboral semejante con dinero p¨²blico. "Cierto. Los directores de los teatros p¨²blicos debemos establecer una estrategia de reequilibrio. En la RSC cambiamos el g¨¦nero del reparto en algunas ocasiones, hacemos temporadas femeninas y alternamos el repertorio cl¨¢sico con el contempor¨¢neo: la dieta variada es m¨¢s saludable. Yo mont¨¦ un cl¨¢sico griego con 17 actrices y 3 actores. En este Fuenteovejuna hay 14 mujeres y 23 hombres".
A Lope se le atribuyen una mir¨ªada de comedias ajenas, algunas a sabiendas de que lo son. "Es una iron¨ªa. ?l mismo advierte en el segundo acto de Fuenteovejuna sobre los peligros de la industria editorial, que ensancha las conciencias difundiendo la escritura, pero que a veces prefiere ensanchar su cartera. Tambi¨¦n sucede con Shakespeare. El autor de la mayor parte de Enrique VIII es John Fletcher, pero esta obra se sigue publicando y representando como suya. As¨ª se vende m¨¢s".
El n¨²mero de espectadores que sumaron en 2008 los teatros del West End londinense, el National y la RSC ha subido a trece millones. "Porque el turismo europeo aument¨® al bajar la libra, pero tambi¨¦n porque las crisis favorecen al teatro, si atendemos a lo que pas¨® durante la Gran Depresi¨®n".
Fuenteovejuna. Teatro Adolfo Marsillach. San Sebasti¨¢n de los Reyes. 28 de febrero. Centro Cultural Caixanova. Vigo. 5 y 6 de marzo. Auditorio Caixanova. Vilagarc¨ªa de Arousa. 7 de marzo. Auditorio Caixanova. Pontevedra 8 y 9 de marzo. Pazo de Congresos. Ourense. 10 de marzo. Teatros del Canal. Madrid. Del 7 de mayo al 7 de junio.
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